sábado, 25 de julio de 2009

Telecomunicaciones / Otro capítulo de una operación conflictiva

Más presión oficial para que los italianos dejen Telecom

Al informe adverso de la Secom se sumó otra oferta de Eurnekian


Sábado 25 de julio de 2009

Carlos Pagni
LA NACION

El Gobierno, a través de la Secretaría de Comunicaciones (Secom), acaba de doblar la presión sobre Telecom Italia para que se deshaga de Telecom, donde esa empresa europea controla el 50% de las acciones y, además, tiene un derecho al 50% restante en poder de la familia Werthein.

El organismo que conduce Lisandro Salas le informó a la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC) que la denominada operación Telco no debía ser aprobada porque vulneraba "la libre elección y la sana competencia". Telco es el consorcio que, desde 2007, controla el 24,5% de Telecom Italia. Entre sus accionistas está Telefónica de España, dueña de Telefónica de Argentina.

El pronunciamiento de la Secretaría llega una semana después de que los directivos de Telecom Italia decidieran, en Roma, postergar hasta fines de agosto cualquier decisión sobre la venta de Telecom. Esos ejecutivos también encomendaron a un sigiloso explorador un informe detallado sobre la situación política del país. El visitador, un funcionario con responsabilidades en toda la región, está por llegar a Buenos Aires.

Telecom Italia había dispuesto que sus acciones se vendieran a través de una licitación privada que organiza el banco Credit Suisse First Boston. En ese proceso compiten los directivos del grupo Clarín, un consorcio integrado por Eduardo Eurnekian y Ernesto Gutiérrez -accionista principal y presidente de Aeropuertos Argentina 2000- y un fondo de inversión del empresario Alfredo Román.

La decisión de Telecom Italia de demorar la definición estuvo ligada, sobre todo, al cambio político que se registra en la Argentina desde la derrota de los Kirchner, el 28 de junio. También hubo novedades entre los tres grupos que aspiran a quedarse con la compañía.

Ernesto Gutiérrez, uno de los hombres de negocios más cercanos a Olivos, tuvo serias dificultades para que en Roma aceptaran su oferta. La expectativa de Telecom Italia es cobrar unos US$ 400 millones por el 50% de las acciones de su filial argentina. Tal vez, sería posible cerrar la venta a cambio de US$ 300 millones. Pero Gutiérrez no se habría aproximado tampoco a esa cifra. Además, la supuesta financiación que aportaría un banco europeo resultó ser muy insegura: ante una consulta de los italianos, las autoridades de la entidad negaron que fueran a participar del negocio. Estos datos aconsejaron a Telecom Italia postergar para después del verano boreal cualquier decisión.

Ante las dificultades financieras, el presidente de Aeropuertos realizó una consulta ante ejecutivos de Clarín sobre la posibilidad de sumarse a su consorcio. Fue al comenzar la semana pasada. Pero Héctor Magnetto mandó decir -otra vez- que no tenía pensado asociarse con Gutiérrez, que habría salido en busca de nuevos capitales. El grupo Clarín también tuvo, el miércoles pasado, noticias de la Secretaría de Comunicaciones. El organismo revocó la autorización que acababa de emitir para que la operadora de Internet Fibertel, que es parte de aquel holding, pudiera conectarse a la red fija de Telecom y de Telefónica, y ofrecer servicios de telefonía.

La postergación de los italianos y el traspié de Gutiérrez había descolocado a los otros actores de esta peripecia. Son los Werthein, que llevan adelante una guerra despiadada con los directivos de Telecom Italia. Esta compañía compró en 2003 una opción para quedarse, a partir de diciembre de 2008, con el 48% de las acciones de Telecom, en poder de los Werthein. Pero la fórmula acordada en aquel momento para tasar las acciones arrojaba, a fines del año pasado, un precio decepcionante para los socios argentinos, que aspiran a anular esa opción y, más aún, a mantenerse dentro de la empresa. El dictamen de la Secom fortalece la pretensión de los Werthein, ya que impide a Telecom Italia ampliar su participación en la subsidiaria argentina.

El próximo paso

En las últimas horas, la puja por Telecom volvió a configurarse. No sólo por la nota que envió la Secretaría de Comunicaciones a la CNDC. Casi en simultáneo con ese acto administrativo, el consorcio de Eurnekian y Gutiérrez comunicó a los italianos que está en condiciones de realizar la compra.

El próximo paso de este enredo es previsible. Cabe esperar que, en las próximas horas, la CNDC -organismo que controla Guillermo Moreno- se pronuncie sobre la situación monopólica que denunció el secretario Salas, que obedece a Julio De Vido. Es decir: no debería sorprender que la CNDC resuelva obligar a Telecom Italia a vender sus acciones en Telecom en un plazo perentorio.

Fuentes ligadas a la empresa especulan con que "es posible que en Roma revisen la decisión de postergar todo y que, ahora, se precipite la venta. Allá están cansados, hubo muchas presiones". Sin embargo, una fuente de máximo nivel de Telecom Italia advirtió a LA NACION: "Veremos cuáles son las próximas decisiones y, llegado el caso, las apelaremos en la Justicia. Pero la vocación de la empresa es no retirarse del país".

Algo de razón tienen los directivos de Telecom Italia. Ante el mismo riesgo monopólico que denunció en su nota de anteayer, la Secom había decidido el año pasado, contra toda lógica, impedir a los italianos la venta de sus acciones. Fue entonces cuando De Vido, según el relato de dos ejecutivos de Telecom Italia, habría aconsejado: "Si hablan con la gente de Aeropuertos, nosotros les podemos resolver el tema de la venta".

Telecom factura al año unos US$ 3000 millones y casi carece de deuda financiera. Su destino es decisivo para el mapa de las telecomunicaciones en la Argentina.

Fuente: lanacion.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario