Una especie de Triángulo de las Bermudas se produce en el corazón del mapa argentino: sucede cuando un avión que viaja entre Buenos Aires y Mendoza desaparece de todos los controles y vuela sin los parámetros que deberían ser normales para la aviación.
El vuelo de cualquier línea aérea entre ambas ciudades recorre 980 kilómetros en aproximadamente 1:50 hs.
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Pero hay 62 kilómetros que a la tripulación le resultan eternos.
Hugo Wortman Jofré, patrocinante de la Asociación de Familiares de Víctimas de Accidentes Aéreos, le contó al diario La Nación que "no existe inversión en seguridad. En un vuelo de Buenos Aires a Mendoza, por ejemplo, durante siete minutos del trayecto los aviones pierden total conexión con la tierra porque los radares no cubren todo el espacio aéreo".
El dato es poco conocido para los habituales pasajeros de las diferentes aerolíneas que cubren ese trayecto. Sirve, ahora, para experimentar en carne propia la falta de inversiones en seguridad aérea.
Vuelo BA - MDZ:
Las denuncias, a diez años de la tragedia de LAPA:
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Fuente: MDZ Online
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