miércoles, 28 de abril de 2010



Autoridades y científicos difieren sobre el supuesto hallazgo del Arca de Noé en Turquía


Las autoridades de Turquía expresaron su alegría por el reciente hallazgo de investigadores chinos en el Monte Ararat, que afirman haber localizado el bíblico Arca de Noé, mientras tanto los científicos turcos dudan sobre la veracidad del descubrimiento, informó hoy la prensa turca.

Científicos chinos, que junto con un grupo de exploradores turcos escalaron el Monte Ararat en octubre de 2009, anunciaron hace poco en Hong Kong haber hallado los restos del Arca de Noé en la altura de 4.000 metros. Según los investigadores, el análisis de carbono demostró que los fragmentos de madera datan de 4.800 años de antigüedad.

Los parlamentarios turcos por la provincia de Agri, donde se encuentra el Monte Ararat, manifestaron una gran alegría al enterarse del hallazgo, escribe el diario Mulliyet.

"No fue una sorpresa para nosotros. Cada uno de los actuales habitantes del planeta debemos la vida al arca de Noé, y por lo tanto, al Monte Ararat también. Les invitamos a todos a su "patria", dijo el diputado del gobernante Partido de la Justicia y el Desarrollo, Cemal Kaya.

A su vez, otro diputado por la provincia de Agri, Yasar Eryilmaz, citado por el periódico Haberturk, señaló que "es necesario ponerse en contacto con la expedición china y recibir los datos del hallazgo desde fuentes oficiales".

Mientras tanto, el famoso geólogo turco Ahmet Ercan puso en duda la posibilidad de tal hallazgo.

"No creo que exista el arca. Aunque la Escritura Sagrada lo describe, la historia del arca contradice a la ciencia", dijo el científico y agregó que los artefactos encontrados pueden pertenecer a la civilización Urartu, que había poblado la región hace muchos siglos.

El científico turco Orhan Bingol afirmó que "el arca no hubiera podido posarse a la altura de 4.000 metros del Monte Ararat", porque si no, "todo el planeta debería cubrirse de agua, mientras que carecemos de los datos que digan que en algún momento de la historia el nivel de agua en la Tierra hubiera alcanzado 4.000 metros".

Según los medios noticiosos turcos, el ex gobernador de la provincia de Agri, Mehmet Cetin, que hace una semana dimitió por problemas de salud, declaró que la expedición carecía del permiso por parte de las autoridades locales para realizar excavaciones en el Monte Ararat.

Cetin agregó que en junio de 2009 un grupo de exploradores, predominantemente estadounidenses, también visitaron la famosa montaña.

"La guardia se contactó con el grupo y reveló que realizaban sus excavaciones ilegalmente. Al revelar que no eran actividades de prospección, le permitieron seguir las excavaciones en búsqueda del arca", dijo el ex gobernador.

Mientras, la prensa turca se pregunta de cómo los exploradores chinos lograron sacar del país los artefactos encontrados en el Ararat, no obstante el Ministerio de la Cultura del país todavía no hizo ningunas declaraciones oficiales al respecto.

El Antiguo Testamento dice que el Arca fue una embarcación construida por Noé para salvar a su familia y un par de cada especie animal del Diluvio Universal para luego repoblar la Tierra. Al retroceder las aguas, el arca se posó sobre una montaña.

Desde hace muchos siglos el Monte Ararat es lugar de la búsqueda de la bíblica arca, pero su existencia por ahora carece de pruebas científicas, aunque últimamente varios investigadores presentaran fotos de un objeto parecido a la embarcación que cita la Biblia.

Así, en 1989 el astronauta estadounidense James Irwin, uno de los buscadores más famosos del arca, durante su expediciones grabó un extraño objeto marrón que, según ciertos científicos occidentales, pudo ser el Arca de Noé.

Fuente: RIA Novosti

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