El jueves arrancan obras en el Pasip
Dicen que en 18 meses estará terminado el Parque de Servicios e Industrias de Palmira. Fue proyectado hace 12 años como una solución al impacto que generaban los cierres de ramales ferroviarios.
domingo, 24 de julio de 2011
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| El lugar de Palmira donde empezarán a realizarse las obras. (Luis Amieva / Los Andes) |
Miguel Ángel Flores - mflores@losandes.com.ar
A principios de junio se habían expropiado 46 hectáreas de las 111 previstas dentro del predio. En aquel momento, quienes desde hace al menos 12 años aguardaban una señal clara de que el Pasip (Parque de Servicios e Industrias Palmira) pudiera finalmente dejar de ser sólo un proyecto, supieron que faltaba poco; ahora, mientras se resuelve la situación de poco más del 60% de las hectáreas faltantes, ya comenzaron los trabajos de desmonte, limpieza y nivelación de los terrenos donde se prevé que a fines de 2012 empiece a funcionar el tan esperado polo logístico de Mendoza.
En realidad, es la etapa preparatoria de la obra de infraestructura, a cuyo puntapié inicial el Gobierno ya le puso fecha oficial: será el jueves 28 de julio. Antes, tuvo que erogar cerca de $ 3 millones para asegurarse las primeras 46 hectáreas y, en los próximos días, hará lo propio con poco más de $ 4,9 millones por las 65 restantes.
Cuando haya transcurrido el año y medio de plazo previsto para la ejecución de la obra, la Provincia habrá desembolsado en total más de $ 27 millones, entre el costo de la expropiación de los terrenos y su aporte a la inversión neta en infraestructura. Los fondos se viabilizan bajo la figura de un fideicomiso constituido en el seno del Fondo para la Transformación y el Crecimiento.
Por su parte, de acuerdo a lo comprometido, el consorcio que se adjudicó la ejecución del proyecto, Inversora Pasip S.A., integrado en su mayoría por empresas de la zona Este, deberá financiar alrededor de un 45% del presupuesto global.
El proyecto es diverso y amplio: incluye la sede de un centro tecnológico, el trazado vial, iluminación, urbanización, área logística de carga y descarga de mercaderías, un puerto seco con ramal ferroviario, despacho de Aduana, controles del Senasa y del Iscamen y servicios para los camioneros, además de control policial y planta de tratamiento de efluentes.
"Una vez iniciada la obra se podrá hacer una preventa de los terrenos. La idea es que se ejecute rápidamente la etapa de logística por la demanda existente en ese sentido", explicó un entusiasta Javier Espina, subsecretario de Innovación Tecnológica e Inversiones.
Para dar transparencia a las operaciones de compra-venta, los precios a pagar por metro cuadrado tomarán un valor de referencia a determinar por el Colegio de Corredores Públicos Inmobiliarios de Mendoza.
En cuanto al trámite administrativo que falta, Espina confirmó que ya está el decreto que autoriza el depósito judicial, a través de la Fiscalía de Estado, de alrededor de $ 5 millones en concepto de liquidación a los hasta ahora propietarios de más de la mitad de los terrenos.
La promoción industrial
A propósito, el área destinada al Pasip está compuesta por dos grandes campos al norte de la ciudad de Palmira, delimitados por la base multimodal del ferrocarril y el costado sur de la ruta 7.
"Estamos generando las condiciones para empezar con el desarrollo. Y aunque queremos evitar una multiplicidad de oferentes, por su importancia estratégica vamos a promoverlo por el corredor bioceánico, desde Valparaíso hasta San Pablo", aseguró Mario Lingua, presidente de Inversora Pasip, el consorcio de 46 empresas, en su mayoría locales y algunas bonaerenses, que ejecutará el proyecto del parque.
Lingua empezó a impulsar el proyecto allá por la segunda mitad de la década del '90, y por eso espera con ansia el disparo de largada. Ya sea para la fase de ejecución como la de comercialización, la sociedad que lidera sabe que contará con un crédito de $ 10 millones del FTyC.
Para avanzar, Inversora Pasip debe zonificar el predio, con la prioridad puesta en el desarrollo de servicios vinculados al Puerto Seco, dentro de la plataforma logística (acopio de mercaderías, Aduana, bancos, provisión de autopartes y servicios para el transportista, etcétera). Cada oferta, con su proyecto específico, entrará en concurso público.
El orden de construcción previsto contempla, en la primera etapa, la obra de carácter institucional (seguridad, salud y un centro tecnológico), seguida de la edificación de la unidad de gestión de servicios que, en conjunto, ocuparán unas 5 hectáreas.
Por último, será el turno del sector para la localización de empresas: metalmecánicas, agroindustrias, madereras, cartón para empaque, gráficas y olivícolas, son algunas que forman parte de la lista de 30 en condiciones de acceder.
Según Lingua "no es un parque clásico porque tendrá industrias de base tecnológica, como telecomunicaciones y una bioplanta del Iscamen. Somos optimistas, tendrá precios competitivos teniendo en cuenta que la tierra no sumó valor en su momento, por lo que se puede decir que éste es un proyecto con promoción industrial".
En realidad, es la etapa preparatoria de la obra de infraestructura, a cuyo puntapié inicial el Gobierno ya le puso fecha oficial: será el jueves 28 de julio. Antes, tuvo que erogar cerca de $ 3 millones para asegurarse las primeras 46 hectáreas y, en los próximos días, hará lo propio con poco más de $ 4,9 millones por las 65 restantes.
Cuando haya transcurrido el año y medio de plazo previsto para la ejecución de la obra, la Provincia habrá desembolsado en total más de $ 27 millones, entre el costo de la expropiación de los terrenos y su aporte a la inversión neta en infraestructura. Los fondos se viabilizan bajo la figura de un fideicomiso constituido en el seno del Fondo para la Transformación y el Crecimiento.
Por su parte, de acuerdo a lo comprometido, el consorcio que se adjudicó la ejecución del proyecto, Inversora Pasip S.A., integrado en su mayoría por empresas de la zona Este, deberá financiar alrededor de un 45% del presupuesto global.
El proyecto es diverso y amplio: incluye la sede de un centro tecnológico, el trazado vial, iluminación, urbanización, área logística de carga y descarga de mercaderías, un puerto seco con ramal ferroviario, despacho de Aduana, controles del Senasa y del Iscamen y servicios para los camioneros, además de control policial y planta de tratamiento de efluentes.
"Una vez iniciada la obra se podrá hacer una preventa de los terrenos. La idea es que se ejecute rápidamente la etapa de logística por la demanda existente en ese sentido", explicó un entusiasta Javier Espina, subsecretario de Innovación Tecnológica e Inversiones.
Para dar transparencia a las operaciones de compra-venta, los precios a pagar por metro cuadrado tomarán un valor de referencia a determinar por el Colegio de Corredores Públicos Inmobiliarios de Mendoza.
En cuanto al trámite administrativo que falta, Espina confirmó que ya está el decreto que autoriza el depósito judicial, a través de la Fiscalía de Estado, de alrededor de $ 5 millones en concepto de liquidación a los hasta ahora propietarios de más de la mitad de los terrenos.
La promoción industrial
A propósito, el área destinada al Pasip está compuesta por dos grandes campos al norte de la ciudad de Palmira, delimitados por la base multimodal del ferrocarril y el costado sur de la ruta 7.
"Estamos generando las condiciones para empezar con el desarrollo. Y aunque queremos evitar una multiplicidad de oferentes, por su importancia estratégica vamos a promoverlo por el corredor bioceánico, desde Valparaíso hasta San Pablo", aseguró Mario Lingua, presidente de Inversora Pasip, el consorcio de 46 empresas, en su mayoría locales y algunas bonaerenses, que ejecutará el proyecto del parque.
Lingua empezó a impulsar el proyecto allá por la segunda mitad de la década del '90, y por eso espera con ansia el disparo de largada. Ya sea para la fase de ejecución como la de comercialización, la sociedad que lidera sabe que contará con un crédito de $ 10 millones del FTyC.
Para avanzar, Inversora Pasip debe zonificar el predio, con la prioridad puesta en el desarrollo de servicios vinculados al Puerto Seco, dentro de la plataforma logística (acopio de mercaderías, Aduana, bancos, provisión de autopartes y servicios para el transportista, etcétera). Cada oferta, con su proyecto específico, entrará en concurso público.
El orden de construcción previsto contempla, en la primera etapa, la obra de carácter institucional (seguridad, salud y un centro tecnológico), seguida de la edificación de la unidad de gestión de servicios que, en conjunto, ocuparán unas 5 hectáreas.
Por último, será el turno del sector para la localización de empresas: metalmecánicas, agroindustrias, madereras, cartón para empaque, gráficas y olivícolas, son algunas que forman parte de la lista de 30 en condiciones de acceder.
Según Lingua "no es un parque clásico porque tendrá industrias de base tecnológica, como telecomunicaciones y una bioplanta del Iscamen. Somos optimistas, tendrá precios competitivos teniendo en cuenta que la tierra no sumó valor en su momento, por lo que se puede decir que éste es un proyecto con promoción industrial".
Fuente: Los Andes Online
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