domingo, 4 de septiembre de 2011

Histórica y masiva movilización de los "indignados" en Israel

Más de 400.000 personas protestaron en tres ciudades contra la suba del costo de vida
La mayor participación se registró en Tel Aviv, con 292.000 personas, mientras que en Jerusalén se concentraron entre 35.000 y 50.000 personas, y unas 25.000 personas en Haifa.

"Nosotros no pararemos esta protesta hasta que el primer ministro [Benjamin Netanyahu] nos dé soluciones reales. Estamos aquí para quedarnos", dijo uno de los principales líderes de la movilización, el presidente del Sindicato Nacional de Estudiantes, Itzik Shmueli, en la concentración en Tel Aviv.

Shmueli advirtió que "el camino hacia la victoria no será fácil", pero que acabará con "una mejor sociedad israelí", basada en un "mejor equilibrio entre la economía de libre mercado y la economía humana".

Antes de las manifestaciones, un representante del movimiento, Stav Shafir, declaró: "Vamos a demostrar que los que han enterrado este movimiento se han equivocado y que el pueblo está dispuesto a salir a la calle por la justicia social, las viviendas asequibles y la defensa de la educación y de la salud públicas".

La Marcha del Millón era el reto lanzado por los "indignados" de Israel para lograr la manifestación más numerosa de la historia del país, siete semanas después del comienzo de su movimiento de protesta.

Hace un mes, los "indignados" lograron sacar a las calles a 300.000 personas en la entonces mayor concentración de la historia del Estado judío por motivos no vinculados al conflicto de Medio Oriente.

La cifra de ayer, en un país de 7,5 millones de habitantes, supera la hasta ahora mayor concentración de la historia local, cuando 400.000 personas salieron a las calles en 1982 en protesta por las masacres de los campos de refugiados palestinos de Sabra y Chatila, en el Líbano.

Los israelíes de cualquier tendencia política o religiosa, como subraya uno de los videos de movilización efectuados por los organizadores, habían sido convocados en diversas ciudades del país por la noche.

Aunque el cartel de la convocatoria reza, en un juego de palabras: "Ellos sólo entienden números", los organizadores insistían en que el éxito de la protesta no debe medirse únicamente por el número de asistentes.

La contestación nació en Tel Aviv cuando una joven instaló, en julio pasado, una carpa en un céntrico bulevar tras quedarse sin la casa que alquilaba. Su caso fue seguido por otros en solidaridad, lo que llenó el bulevar de centenares de carpas, se extendió a otras ciudades y se convirtió en un movimiento más amplio de protesta socioeconómica.

Sin embargo, la iniciativa fue criticada en determinados círculos de izquierda por dejar de lado, por motivos tácticos, el espinoso asunto de la ocupación y la colonización de los territorios palestinos. Agencias EFE y AFP

Fuente: lanacion.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario