El Universo no tiene límites y se expande cada vez más rápido
El premio Nobel de Física fue para tres científicos -dos estadounidenses y un australiano- que descubrieron que, al contrario de lo que se creía, el cosmos está acelerando su crecimiento. Especialistas que participan de un congreso en Mendoza explicaron este hallazgo.
miércoles, 05 de octubre de 2011
Zulema Usach - zusach@losandes.com.ar
El descubrimiento marcó un cambio de rumbo en
el mundo de la ciencia y contribuyó a seguir planteando interrogantes
acerca del funcionamiento del Universo y sus componentes clave: las
estrellas. Fue en los '90 cuando dos equipos de expertos internacionales
de gran prestigio efectuaron sus investigaciones en forma paralela,
para resolver si efectivamente las teorías existentes hasta ese momento
acerca de los límites del cosmos eran del todo correctas.
Lo cierto fue que tras extensas investigaciones, se descubrió que a diferencia de lo que se creía, el Universo se expande a un ritmo cada vez más acelerado. Ayer, este avance crucial para la Física y la Astronomía mereció nada menos que el Premio Nobel de Física 2011, que fue otorgado por la Real Academia de Ciencias de Suecia.
Los científicos que ganaron este reconocimiento fueron los estadounidenses Saul Perlmutter (52) y Adam Riess (42), y el australiano Brian Schmidt (44).
En el caso de Perlmutter, el trabajo estuvo centrado en la “Cosmología de la Supernova”, mientras que en el de Schmidt y Riess, el foco estuvo puesto en el “descubrimiento de las Grandes Supernovas y la aceleración de la expansión del Universo”.
De acuerdo a la información que ayer conoció el mundo, la academia sueca comunicó a través de un escrito que el premio fue otorgado a estos dos grupos de expertos “por el descubrimiento de la expansión acelerada del Universo a través de observaciones de supernovas distantes”, y continuó: “Se han estudiado varias decenas de estrellas que explotan, llamadas supernovas, y descubrieron que el Universo se está expandiendo a un ritmo cada vez más acelerado”, dijo textual la misiva que fue difundida en los medios de comunicación.
Lo cierto fue que tras extensas investigaciones, se descubrió que a diferencia de lo que se creía, el Universo se expande a un ritmo cada vez más acelerado. Ayer, este avance crucial para la Física y la Astronomía mereció nada menos que el Premio Nobel de Física 2011, que fue otorgado por la Real Academia de Ciencias de Suecia.
Los científicos que ganaron este reconocimiento fueron los estadounidenses Saul Perlmutter (52) y Adam Riess (42), y el australiano Brian Schmidt (44).
En el caso de Perlmutter, el trabajo estuvo centrado en la “Cosmología de la Supernova”, mientras que en el de Schmidt y Riess, el foco estuvo puesto en el “descubrimiento de las Grandes Supernovas y la aceleración de la expansión del Universo”.
De acuerdo a la información que ayer conoció el mundo, la academia sueca comunicó a través de un escrito que el premio fue otorgado a estos dos grupos de expertos “por el descubrimiento de la expansión acelerada del Universo a través de observaciones de supernovas distantes”, y continuó: “Se han estudiado varias decenas de estrellas que explotan, llamadas supernovas, y descubrieron que el Universo se está expandiendo a un ritmo cada vez más acelerado”, dijo textual la misiva que fue difundida en los medios de comunicación.
De estrellas y supernovas
Explicar cómo es que nacen, viven y mueren las estrellas y al
mismo tiempo dilucidar de qué modo el Universo se amplifica a un ritmo
cada vez más rápido puede parecer dificultoso. Sin embargo, dos
científicos en el tema que participan de un congreso en Mendoza
describieron con lenguaje sencillo de qué se trata esta teoría, tan
importante en el mundo de la física.
“Una supernova es cuando una estrella que es más o menos del mismo tamaño que el Sol, le va quitando masa a otra estrella cercana que coexiste con ella en un sistema binario”, explicó a Los Andes el astrofísico solar Amab Choudhuri, del Instituto de Ciencias de la India.
Para explicarlo mejor, esto significaría que una estrella “se come” a la que tiene cercana, de modo que cuando desborda sus propios límites explota. “Ése es el tipo de supernova que utilizaron los científicos que ganaron el Nobel. Estas estrellas son del tipo 1. Todas las supernovas de esta clase producen la misma cantidad de luz, sin importar en qué lugar estén del Universo”, continuó el especialista junto al experto Andrés Muñoz, de Colombia.
Ambos detallaron que este fenómeno recibe comúnmente el nombre de “vela estándar”, en alusión a esta característica de uniformidad al momento de emitir luz en el Universo.
El origen del Universo
Previo a que el descubrimiento marcara un antes y un después en el mundo de la investigación astronómica y física, las suposiciones eran más bien opuestas: “Creemos que el Universo se originó a partir de una gran explosión y cuando eso ocurrió se supone que los objetos se alejaron del centro”, dijo Choudhuri.
“Al mismo tiempo, como esos objetos se atraen entre sí, se pensaba que en algún momento la expansión se iba a detener y que luego todo volvería al mismo origen”, agregó, y explicó que lo que los físicos que ganaron el Nobel descubrieron es que no sólo esa expansión no está disminuyendo, sino que cada vez es mayor y no se va a detener.
“En cualquier momento en que se mueve, cambia la luz. Esto es comparable a cómo los policías detectan cuando alguien va con exceso de velocidad”, ejemplificó Muñoz con secuencias de la vida cotidiana.
Ambos científicos coincidieron en destacar que las investigaciones de esta magnitud, que ponen en duda los conceptos ya establecidos, son las que justamente permiten que la ciencia avance. “Esto nos muestra que hay un hueco en nuestro entendimiento sobre cómo funciona el Universo y de este modo es como se avanza”, profundizó el especialista colombiano.
“Una supernova es cuando una estrella que es más o menos del mismo tamaño que el Sol, le va quitando masa a otra estrella cercana que coexiste con ella en un sistema binario”, explicó a Los Andes el astrofísico solar Amab Choudhuri, del Instituto de Ciencias de la India.
Para explicarlo mejor, esto significaría que una estrella “se come” a la que tiene cercana, de modo que cuando desborda sus propios límites explota. “Ése es el tipo de supernova que utilizaron los científicos que ganaron el Nobel. Estas estrellas son del tipo 1. Todas las supernovas de esta clase producen la misma cantidad de luz, sin importar en qué lugar estén del Universo”, continuó el especialista junto al experto Andrés Muñoz, de Colombia.
Ambos detallaron que este fenómeno recibe comúnmente el nombre de “vela estándar”, en alusión a esta característica de uniformidad al momento de emitir luz en el Universo.
El origen del Universo
Previo a que el descubrimiento marcara un antes y un después en el mundo de la investigación astronómica y física, las suposiciones eran más bien opuestas: “Creemos que el Universo se originó a partir de una gran explosión y cuando eso ocurrió se supone que los objetos se alejaron del centro”, dijo Choudhuri.
“Al mismo tiempo, como esos objetos se atraen entre sí, se pensaba que en algún momento la expansión se iba a detener y que luego todo volvería al mismo origen”, agregó, y explicó que lo que los físicos que ganaron el Nobel descubrieron es que no sólo esa expansión no está disminuyendo, sino que cada vez es mayor y no se va a detener.
“En cualquier momento en que se mueve, cambia la luz. Esto es comparable a cómo los policías detectan cuando alguien va con exceso de velocidad”, ejemplificó Muñoz con secuencias de la vida cotidiana.
Ambos científicos coincidieron en destacar que las investigaciones de esta magnitud, que ponen en duda los conceptos ya establecidos, son las que justamente permiten que la ciencia avance. “Esto nos muestra que hay un hueco en nuestro entendimiento sobre cómo funciona el Universo y de este modo es como se avanza”, profundizó el especialista colombiano.
Astrónomos de todo el mundo en Mendoza
Amab Choudhuri, astrofísico solar. (Diego Parés)
|
El motivo que trajo a los expertos en
astronomía a nuestra provincia fue el Simposio N° 286 de la Unión
Astronómica Internacional, que por primera vez se realiza en Mendoza.
Por eso, hasta el viernes al menos 110 científicos de Japón, India,
Rusia, Rumania, Italia, Francia, Hungría, Reino Unido, España, Canadá,
Estados Unidos, México, Venezuela, Perú, Brasil y Argentina continuarán
participando de este evento que gira en torno de la Física Solar y
Estelar.
El lugar elegido para este ciclo de charlas fue el auditorio Adolfo Calle de diario Los Andes.
“El objetivo es comprender la actividad del sol y de otras estrellas, en las etapas de su actividad mínima y qué influencia tiene esto para su entorno”, explicó la doctora Cristina Mandrini, investigadora del Instituto de Astronomía y Física del Espacio, organismo dependiente del Conicet y la Universidad de Buenos Aires, una de las organizadoras del simposio.
Vale destacar que el viernes el especialista Pablo Mauas disertará sobre el calentamiento global, en un evento abierto a todo público, de 17.30 a 18.30.
El lugar elegido para este ciclo de charlas fue el auditorio Adolfo Calle de diario Los Andes.
“El objetivo es comprender la actividad del sol y de otras estrellas, en las etapas de su actividad mínima y qué influencia tiene esto para su entorno”, explicó la doctora Cristina Mandrini, investigadora del Instituto de Astronomía y Física del Espacio, organismo dependiente del Conicet y la Universidad de Buenos Aires, una de las organizadoras del simposio.
Vale destacar que el viernes el especialista Pablo Mauas disertará sobre el calentamiento global, en un evento abierto a todo público, de 17.30 a 18.30.
Fuente: Los Andes Online
No hay comentarios:
Publicar un comentario