Renunció el presidente de Yemen por la ola de protestas
Tras 33 años en el poder, Abdullah Saleh aceptó dimitir a cambio de una amnistía para él y su familia. La revuelta dejó cientos de muertos.
jueves, 24 de noviembre de 2011
Télam
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| Saleh (izq) no quiso terminar como Kadafi y firmó su dimisión ante el rey Abdullah de Arabia Saudita. (AFP) |
El presidente yemenita Alí Abdullah Saleh,
aceptó ayer formalmente renunciar tras 33 años en el poder y 9 meses de
revuelta opositora, con lo que se convirtió en un nuevo gobernante que
cae producto de la ola de protestas conocida como Primavera Árabe.
En presencia del rey Abdullah de Arabia Saudita, Saleh firmó ayer en Riad un acuerdo de transición que contempla su renuncia, la cesión del poder en el plazo de un mes a su vicepresidente, Abed Rabbo Mansur Hadi, y la celebración de elecciones presidenciales dentro de los siguientes 90 días.
Vestido con traje oscuro, corbata a rayas y pañuelo, el saliente mandatario yemení llegó por la mañana a la capital saudita, Riad, para firmar el acuerdo con la oposición, que fue oficialmente impulsado por otros países árabes del Golfo Pérsico y respaldado por Estados Unidos.
El presidente renunciante se manifestó dispuesto a "cooperar con el nuevo gobierno y la oposición" para "reconstruir el país" y pidió al Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), que preparó el acuerdo de transición, que "continúe apoyando y controlando" la aplicación del plan.
El mandatario lamentó las consecuencias de la revuelta en su contra, que comenzó en febrero pasado y estuvo varias veces cerca de la guerra civil, incluyendo combates entre el Ejército y la mayor confederación de tribus que dejaron cientos de muertos tan sólo en Sanaá, la capital del país del sur de la Península Arábiga.
"El desacuerdo de estos últimos meses tuvo un gran impacto sobre Yemen, sobre su cultura, desarrollo, política, lo que llevó a una amenaza a la unidad nacional y destruyó lo que se había construido en los últimos años", dijo Saleh.
Con su dimisión, Saleh se convirtió en un nuevo gobernante en tener que dejar el poder por la ola de revueltas de la primavera árabe, que en enero pasado condujo a la caída del presidente de Túnez y un mes más tarde a Hosni Mubarak, de Egipto.
El acuerdo, propuesto por el CCG, garantiza la amnistía a Saleh y su familia a cambio de su renuncia y garantiza el llamado a elecciones presidenciales en un plazo de 90 días.
El enviado especial de la ONU a Yemen, Jamal Benomar, señaló hoy que una serie de enmiendas introducidas a la redacción final del acuerdo habían retrasado la firma de Saleh y la oposición.
El portavoz de Saleh, Ahmed al Sufi, señaló a la cadena televisiva Al Arabiya que el acuerdo también fue firmado por el vicepresidente y los líderes de la oposición en presencia del enviado especial de la ONU.
También asistió a la ceremonia, el secretario general del CCG, Abdul Latif al Zayani.
Según la agencia de noticias yemení Saba, poco antes de la firma Saleh habló por teléfono con el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, que le pidió que las dos partes cumplan sus obligaciones.
En tres oportunidades Saleh se había negado a último momento a firmar el documento, por el que dejaba su cargo al vicepresidente.
Saleh viajará a Nueva York donde recibirá tratamiento médico por las graves heridas que sufrió el pasado 3 de junio en un ataque de tribus opositoras contra el palacio presidencial en Sanaá, que provocó la muerte de varios de sus escoltas y dejó heridos a varios miembros de su gobierno.
Desde febrero, millones de yemeníes salieron a las calles para exigir el fin del mandato de Saleh, que estuvo 33 años en el poder.
Fuente: Los Andes Online



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