viernes, 30 de diciembre de 2011

Una histórica crisis de popularidad obliga a Piñera a cambiar el gabinete

Por CHILE. AFP, AP Y EFE

Desde el retorno a la democracia, nunca un presidente chileno tuvo sólo 23% de apoyo.

En un año marcado por las protestas estudiantiles, renunció ayer el ministro de Educación de Chile. Es el segundo titular de esa cartera que en lo que va del 2011 deja su puesto desgastado por las protestas que exigían reformas a un sistema educativo que tiene sus bases en la dictadura Augusto Pinochet. También se anunció la renuncia del ministro de Agricultura. Esto se produce en un momento en que la popularidad del presidente Sebastián Piñera decayó notablemente: desde ayer es el mandatario con la más baja popularidad desde el retorno a la democracia en 1990, en Chile.

La última encuesta del Centro de Estudios Públicos (CEP) reveló que Piñera, el primer mandatario de derecha en ser elegido democráticamente desde 1958, tiene sólo un 23% de aprobación de la ciudadanía. A pocos meses de cumplir dos años de mandato, Piñera registra además un nivel histórico de desaprobación, que alcanza el 77%.

Este año el extendido reclamo estudiantil despertó una amplia adhesión ciudadana, y en contraste, desplomó la popularidad del presidente Piñera, que respondió a las demandas estudiantiles con una serie de proyectos de ley que mejoran parcialmente el sistema pero que no resuelven los temas fundamentales de la protesta. En este contexto quien dejó su cargo ayer fue Felipe Bulnes, titular de esa cartera, quien había asumido el 18 de julio en reemplazo de Joaquín Lavín, ex alcalde de Santiago, cuestionado por los estudiantes por sus vínculos con una universidad privada.

“El presidente Piñera ha aceptado la renuncia a sus cargos de los ministros de Educación, Felipe Bulnes, y Agricultura, José Antonio Galilea”, señaló el portavoz, Andrés Chadwick. Bulnes renunció por “razones personales”, explicó el vocero. Los mismos motivos esgrimió el ministro de Agricultura.

Bulnes será reemplazado por Haral Beyer, ingeniero comercial y experto en temas de educación del privado Centro de Estudios Públicos (CEP), mientras que el cargo del ministro Galilea será ocupado por Luis Mayol, hasta ahora presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA) y propietario de varias firmas agrarias.

Este fue el cuarto cambio que hizo Piñera en su gabinete en menos de dos años de mandato, arrinconado por las protestas sociales y la cercanía de las elecciones municipales en 2012 y generales en 2013. En total, y tan sólo durante este año, hubo 6.000 actos contra el gobierno, según cifras oficiales. La decisión de cambiar el gabinete, demandada por oficialismo y oposición, implicó nombrar a los dos nuevos ministros pero descartar una ingeniería en las carteras políticas. Esos cambios no puedieron contener la caída de su imagen, que viene en declive desde hace un año y medio. 

Los estudiantes, que iniciaron sus protestas en abril, buscan acabar con el sistema heredado de la dictadura, que redujo a menos de la mitad el aporte público a la educación y fomentó la inclusión de los sectores privados. Bulnes habría renunciado por el poco espacio que tenía para negociar con los estudiantes, que ya anunciaron que continuarán con sus protestas el año próximo. El jueves pasado realizaron su última marcha de 2011, un año marcado por siete meses de protestas estudiantiles y el peor año de Piñera.

Camila Vallejo, de líder estudiantil a candidata

La líder estudiantil Camilla Vallejo, ex presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (Fech) y actual vice, fue la cara de las movilizaciones que pedían reformar el sistema de educación de Chile. Con sus ojos azules y una llamativa oratoria, se transformó en la referencia del movimiento que provocó una fuerte crisis al gobierno de Sebastián Piñera. 

La joven militante del Partido Comunista perdió hace unos días, a mano de un grupo izquierdista, la dirección de la Federación, pero no cayó en su popularidad. En una encuesta difundida ayer por los medios chilenos, apareció como una de las cuatro figuras políticas más queridas del país, junto a la ex presidenta Michel Bachelet. Aprovechando la difusión de las cifras, que le dan el 44% de aceptación, sugirió que se animará a una candidatura a diputada. “Estoy dispuesta a disputar elecciones”, dijo. 

Respecto del cambio de ministro de Educación, sostuvo que demuestra el problema que tiene el gobierno al no lograr una salida a un conflicto de siete meses. “Son incapaces y se han visto obligados a hacer cambios de gabinete pero sin lograr los cambios importantes”, precisó la dirigente.

Fuente: clarin.com

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