lunes, 28 de octubre de 2019

El misterioso avión espacial X-37B regresa tras su quinta misión
Por Daniel Marín



El avión espacial no tripulado X-37B del Pentágono ha finalizado su quinta misión tras pasar 779 días y 18 horas en órbita. La misión OTV-5 (Orbital Test Vehicle 5) aterrizó a las 07:51 UTC del 27 de octubre de 2019 en la pista SLF (Shuttle Landing Facility) del Centro Espacial Kennedy de Florida. Después de estar más de dos años en el espacio durante esta misión, el programa X-37B acumula ya un total de 2865 días en órbita tras cinco vuelos. Naturalmente, lo más gracioso del asunto es que nadie sabe cuál es la misión primaria de este programa.


El X-37B OTV-5 tras aterrizar (USAF).

El X-37B OTV-5 fue lanzado el 7 de septiembre de 2017 mediante un Falcon 9 v1.2. Fue la primera vez que un lanzador de SpaceX se usaba para poner en órbita esta nave, ya que en las misiones anteriores emplearon un Atlas V 501 de ULA. En esta ocasión se hizo público que el laboratorio AFRL (Air Force Research Laboratory) de la USAF había contribuido con la carga ASETS-11 (Advanced Structurally Embedded Thermal Spreader) a bordo de la nave para estudiar el comportamiento de determinados sistemas en vuelos de muy larga duración. Hoy por hoy, el X-37B es la única nave espacial con alas reutilizable que está en servicio (las naves de carga Dragon de SpaceX también son reutilizables, pero, obviamente, no tienen alas). El OTV-5 ha maniobrado en varias ocasiones a lo largo de su misión, pero la órbita inicial tenía 54,5º de inclinación y 360 kilómetros de altura. O sea, una órbita más inclinada que las cuatro anteriores y que cubría gran parte del territorio de Rusia y todo el de China.


Lanzamiento del OTV-5 (SpaceX).

La USAF no ha declarado cuántas unidades del X-37B tiene en servicio, pero todo apunta a que solo son dos vehículos. El primero habría realizado las misiones OTV-1, OTV-3 y OTV-5, mientras que la segunda unidad se habría encargado del resto. En todo caso, no hay confirmación oficial de estos datos. El programa X-37 nació en 1999 como un proyecto de la NASA para experimentar tecnologías asociadas con vehículos reutilizables. En principio el X-37 debía haber volado sin tripulación en la bodega de carga del transbordador, pero tras el desastre del Columbia en 2003 se decidió lanzarlo mediante un cohete Delta II. Entre 1998 y 2001 se llevaron a cabo pruebas aerodinámicas del X-40A, una versión a escala del X-37.


El X-37B (Giuseppe De Chiara).

Duración (en días) de las distintas misiones del X-37B. ¿Hay una asíntota que tiende a 800 días?

De forma sorpresiva, el programa pasó en 2004 a estar a cargo de la agencia militar DARPA y en 2006 se realizaron pruebas atmosféricas del prototipo ALTV (Approach and Landing Test Vehicle) en la Base de Edwards con el avión WhiteKnightOne. Ese mismo año el programa pasó a estar controlado directamente por la USAF. Ahora denominado X-37B, el vehículo sería construido por la división Phantom Works de Boeing (actualmente Boeing Space and Intelligence Systems) para la USAF. La Fuerza Aérea decidió lanzarlo dentro de la cofia de un Atlas V y usar la antigua pista del transbordador del Centro Espacial Kennedy para su aterrizaje.


Un X-37B siendo introducido en la cofia del Atlas V (USAF).

El X-37B tiene una masa aproximada de 5500 kg y unas dimensiones de 8,9 x 2,9 metros, con una envergadura alar de 4,5 metros. Se cree que lleva un panel solar desplegable de arseniuro de galio en la bodega de carga y usa un motor principal R-4D a base de combustibles hipergólicos (inicialmente estaba previsto que llevase un motor principal AR-2/3 a base de peróxido de hidrógeno y queroseno). El escudo térmico del X-37B está formado por losetas y mantas térmicas muy similares a los del shuttle, aunque para las zonas de mayor estrés térmico se han usado losetas de TUFROC (Unipiece Fibrous Reinforced Oxidation Resistant Composite) desarrolladas por el centro Ames de la NASA en vez de losetas de carbono-carbono reforzado (RCC).


Tamaño del X-37B comparado con el transbordador espacial y el X-37C, una versión tripulada propuesta por Boeing (Boeing).

La misión principal del X-37B sigue siendo un misterio. Ni su tamaño ni su órbita ni sus prestaciones son las más adecuadas para un satélite espía de reconocimiento óptico o por radar. No puede ser adaptado para vuelos tripulados porque es demasiado pequeño (se ha propuesto una versión más grande tripulada denominada X-37C, pero no ha sido aprobada que sepamos). En teoría podría usar sus alas para realizar cambios de inclinación orbital en la alta atmósfera, pero hasta el momento no ha efectuado ninguna maniobra de este tipo (se habría notado en el cambio de efemérides). Y tampoco ha sido usado como «satélite inspector» para acercarse a otros satélites. Aunque ha cambiado de órbita regularmente y a veces se le ha perdido el rastro por parte de la comunidad de aficionados —como es lógico no sabemos si esto ha pasado con el resto de potencias espaciales—, con el tiempo ha sido avistado en sus nuevas órbitas sin mayor problema, así que no es un vehículo stealth o algo parecido. Es posible que la misión más importante del X-37B sea, precisamente, llevar a cabo vuelos espaciales de larga duración para estudiar el comportamiento de sistemas y materiales. Pero nadie lo sabe a ciencia cierta. La próxima misión del X-37B usará otra vez un cohete Atlas V y está planeada para el año que viene.

Misiones del X-37B:
  • OTV-1 (USA-212): fue lanzada el 20 de abril de 2010 mediante un Atlas V 501 y tuvo una duración de 224 días (X-37B nº 1).
  • OTV-2 (USA-226): fue lanzada el 5 de marzo de 2011 por un Atlas V 501 y estuvo en órbita durante 469 días(X-37B nº 2).
  • OTV-3 (USA-240): fue lanzada el 11 de diciembre de 2012 con un Atlas V 501 y se prolongó durante 675 días(X-37B nº 1).
  • OTV-4 (USA-261): fue lanzada el 20 de marzo de 2015 por un Atlas V 501 y estuvo en órbita durante 718 días (¿X-37B nº 2?).
  • OTV-5 (USA-277): lanzada el 7 de septiembre de 2017 mediante un Falcon 9 v1.2, con una duración de 780 días(¿X-37B nº 1?).


No hay comentarios:

Publicar un comentario