lunes, 20 de julio de 2015

Para cuidar el ganado, en San Carlos colocan boyeros eléctricos alimentados por paneles solares 
Es para evitar el ataque de animales salvajes. Las boyas estarán alimentadas por energía de paneles solares. Las tareas están a cargo de una ONG ambientalista que busca proteger la fauna de la zona, sobre todo de pumas.
Por Alejandra Adi 


Convivencia de especies. Los perros pastores son otra de las alternativas. Autor: Alejandra Adi / Diario UNO.

El conflicto entre el ganado y los carnívoros silvestres es un problema de vieja data, y la mayoría de los involucrados afirma no creer que pueda resolverse definitivamente. Sin embargo, distintos actores se han propuesto generar alternativas para disminuir la pérdida de más animales típicos de la ruralidad los campos, pero preservando la fauna silvestre. Para ello, una organización ambientalista de San Carlos está trabajando en la implementación de boyas eléctricas en los corrales, que serían alimentadas por paneles solares, y están fomentando el uso de perros pastores.

A raíz de la cantidad de puestos ganaderos que existen en este departamento y de las reiteradas quejas de sus responsables con respecto a la pérdida de cabezas de ganado provocada por los animales salvajes, sobre todo por el puma, la Fundación Cullunche decidió reunir a distintos referentes para poder subsanar este problema, pero incentivando la convivencia de todas las especies.

Para ello, pidieron la banca del vecino del Honorable Concejo Deliberante, instancia a través de la cual, entre todos, sugirieron la implementación de boyas eléctricas para los corrales y la difusión y promoción del trabajo con perros pastores.

“Sabemos que es difícil solucionar el problema completamente pero nuestro objetivo es minimizar el conflicto, que tiene al puma y al zorro colorado como los carnívoros silvestres más representativos, pero tomando conciencia de la importancia de su conservación por su importancia en el equilibrio de los ecosistemas sociales”, expresó Eduardo Furlán, vicepresidente de esta ONG que tiene representantes en el Valle de Uco.

Los animales más afectados son el chivo y la oveja, y su depredación para los puesteros representa pérdidas monetarias de gran importancia. Por eso, entre otras soluciones, lo que se sugirió es ayudarlos a poner en condiciones los corrales para colocarles boyas eléctricas que serían alimentadas a través de paneles solares, similares a los que ya se están usando en la zona para obtener electricidad.

“Estamos buscando conseguir materiales para mejorar los corrales como palos y conseguir más paneles solares, baterías y bolleros para poder electrificarlos”, detalló Furlán con respecto a la campaña de recolección de insumos que ya se inició en la localidad y para la cual también los ediles sancarlinos crearán una ordenanza municipal.

“Es importante también llevar adelante una campaña informativa y de concientización sobre la importancia de los carnívoros silvestres en los ecosistemas a través de charlas y la entrega de folletos. Así como tener un registro de las zonas más conflictivas para lo que se están realizando encuestas entre los pobladores”, agregaron desde Cullunche quienes, además están trabajando en conjunto con la dirección de Desarrollo y Planeamiento de la comuna y en un proyecto de ley que será presentado por el diputado Omar Sorroche, ya que apuntan a que esta actividad esté avalada legalmente a nivel provincial.




Lo que se busca por otra parte es reducir el daño al ganado pero sin provocar la muerte del animal carnívoro integrando las comunidades rurales con las silvestres. Para ello lo que se ha sugerido es alentar y capacitar a los dueños del ganado a que trabajen con perros pastores en los campos que pueden ser comprados o criados.

Estos evitan la exposición de individuos más propensos a ser depredados a situaciones de riesgo, concentrar los partos reduciendo la ventana de tiempo en que los animales son más vulnerables y uso de suelos con menos probabilidad de generar conflicto en zonas de alta incidencia de ataques.

Sus ventajas son que no tienen comportamiento predatorio y se comportan con el ganado como si fueran miembros de la misma especie: no lo conducen, sino que lo acompañan y son independientes, pero viven permanentemente con ellos. En otros sitios, lo que se utilizan son burros o llamas.

Las causas

► Aumento de la población humana y asentamientos en la zona de distribución del puma.

► Disminución de las presas silvestres disponibles para predadores grandes.

► Deterioro y disminución del hábitat silvestre de los animales.

► Falta de políticas oficiales de manejo de la situación o manejo inadecuado del ganado.

► Idea o visión negativa de los pobladores sobre la especie puma.



Fuente:  diariouno.com.ar

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