Éxodo

Apuro de los mendocinos por dejar Santiago

La terminal de ómnibus de la capital chilena fue invadida por turistas que querían volver a la provincia.

domingo, 28 de febrero de 2010

Es sábado y, después del terremoto que sacudió a Chile, la gente camina hacia un mismo lugar: la terminal de ómnibus. Es que los turistas, apenas amaneció el trágico día, comenzaron a peregrinar en busca de su destino. Lo cierto es, como era de esperarse, que el sistema se saturó y comenzaron los inconvenientes.

"Nosotros teníamos pautado nuestro regreso a las 9 de la mañana de hoy -por ayer-, llegamos con tiempo, pero la terminal estaba cerrada. Recién a las 11.30 abrió, pero ya son las 15.30 y estamos esperando una respuesta de Cata", contó Diego Vergara, de San Carlos.

Mientras que Carolina Gandame, de Tunuyán, se sumó a la charla para contar su traumática experiencia: "Estábamos en una casa de ConCon, fabricada en madera. Por lo que el ruido que hacía era impresionante. Con mis hijos pasamos toda la noche, durmiendo en el patio tapados con frazadas".

Por su parte, Jéssica Gómez, de Cata Internacional, contó que fueron más de 100 las personas que solicitaron ayer un cambio de fecha de pasaje. "Es comprensible que quieran llegar a sus casas, por eso entendemos sus incesantes llamadas y pedidos".

Pero, el viaje que esta empresa planificó para la mañana del sábado, por causas ajenas a ella, no pudo concretarlo. Es que debido a un derrumbe en alta cordillera, el paso quedó interrumpido hasta el mediodía. "Ahora, con mucha precaución, se puede transitar. No sólo por los escombros y rocas que pueden haber en la ruta, sino también por la cantidad de gente que se ha instalado -por miedo- en las calles".

Claro que para los que aún esperaban su butaca de regreso, muchos, incluso, con niños, la explicaciones eran inválidas.

"La empresa TurBus suspendió su viaje de las 8.15 y lo entiendo. Pero lo que me resulta chocante es que no quieren hacer viajes a Mendoza y no nos dan ninguna solución. Sólo que esperemos hasta mañana. Yo tengo dos niños y no tengo más dinero para hospedarme. Les he pedido que, de última, me reintegren el pasaje para poder adquirir otro, pero tampoco acceden a esa opción", dijo indignado Ariel Aguirre.

Mientras que desde TurBus sólo aclaran que el no enviar buses a la provincia es una política de seguridad que ha adquirido la empresa.

Pero, ¿cuánto de real tiene este éxodo turístico? Basta con caminar por Viña para corroborar que todos -sí, todos- los negocios están cerrados; y que aquellos edificios que oficiaban casi de monumentos de la "ciudad jardín" (como la ex Asociación de Funcionarios Municipales de Viña o el mítico Hotel Viña de Mar, entre otros) ya no lucen igual. Los que tampoco se ven de la misma manera son los hoteles que se vieron afectados -directamente- por la situación.

"Hoy se retiró aproximadamente el 60% de nuestros pasajeros. Igual nuestra actitud es de complicidad, ofreciéndole todas las facilidades posibles", expresó Pablo Muñoz, recepcionista del Hotel O'Higgins.

Lo mismo opinó Sara Ponce, del Hotel Queen Royal, quien agregó además: "es una situación extrema que nosotros debemos comprender. Todos quieren estar cerca de sus familias".

Mientras que, por ejemplo, en el Hotel Marina del Rey, Daniela Robles contó que casi el 100% de sus ocupantes formaban parte del Festival de Viña del Mar; al suspenderse, todos decidieron partir a sus hogares. Alejandro Ortega - Enviado especial a Chile

Fuente: Los Andes Online