sábado, 4 de enero de 2025

Advierten que el país podría perder su posición geoestacionaria internacional por el ajuste al sector espacial
Es por el desfinanciamiento del Gobierno para la construcción del satélite ARSAT SG1. "La plata está pero el satélite lleva meses parado", denunció Claudio Marín, el secretario general de FOETRA.




El secretario general del Sindicato de las Telecomunicaciones (FOETRA), Claudio Marín, advirtió por la 750 que el país podría “perder su lugar geoestacionario” para enviar sus propios satélites al espacio si no avanza de manera urgente con la construcción de proyectos que el Gobierno de Javier Milei tiene paralizados.

Marín afirmó que esto se debe a que en el mundo hay un organismo que regula la utilización del espacio, “porque la órbita es un recurso natural”. De lo contrario, sostuvo, “todo el mundo estaría ocupando el espacio de manera anárquica”.

Así, continuó: “Este organismo asigna espacios a cada país, pero hay que mantenerlos. Y eso significa poner algo en esa órbita. Si no lo haces, no dejas que otros lo ocupen, pero pasado cierto tiempo, esa órbita se asigna a otro país”.


Claudio Marín, Secretario General de FOETRA.

Freno a ARSAT 3 (SG1)

En concreto, denunció, eso es lo que podría suceder en Argentina si no se ocupa la órbita geoestacionaria. ¿Y Arsat-3? Marín explicó: “Ese satélite ya está completamente financiado y a mitad de producción”.

“La plata está, pero no se utiliza. No sé cuál será el destino de ese dinero. Pero la plata está. Y el satélite, que está en plena construcción, lleva meses parado. Ahora no sabemos ni el destino de la mitad del satélite ni el de la plata”, se lamentó.

Esto, además, se agrava por la constante fuga de cerebros que hay en la empresa estatal, de unas de las siete en todo el mundo que construye satélites propios y los envía al espacio.

“Se están yendo muchos profesionales. En Benavídez, la cantidad de compañeros y compañeras está disminuyendo porque se van a otros lugares donde los requieren. Son puestos que exigen muchísima formación”, señaló.

El principal motivo es la motosierra de Milei: “El 12 por ciento de la planta ya se ha ido. Y no solo no les pagaron un 50 por ciento, sino que, además, con esa deuda, resulta que ni siquiera los ajustes de la administración pública alcanzan”.

“Los ajustes que se hicieron violando derechos de negociación, otorgando aumentos de un gremio que no es el de Arsat, ni siquiera llegan a cubrir lo necesario”, con módicos aumentos del 1 por ciento mensual.



jueves, 2 de enero de 2025

NGAD: El caza de 300 millones de dólares que la Fuerza Aérea estadounidense considera demasiado costos
La Fuerza Aérea de Estados Unidos está desarrollando su caza furtivo de próxima generación en el marco del programa Next Generation Air Dominance (NGAD), pero está muy preocupada por los costes.
por Stavros Atlamazoglou




-Cada caza NGAD podría costar hasta 300 millones de dólares, un precio que la Fuerza Aérea duda en pagar después del programa F-35 de 2 billones de dólares.

-Para gestionar los costes, la Fuerza Aérea está explorando la posibilidad de trasladar algunas capacidades del NGAD al programa Collaborative Combat Aircraft (CCA), que implica el vuelo de drones no tripulados junto al NGAD para ayudar en las misiones. El objetivo es mantener la rentabilidad a la vez que se avanza en la superioridad aérea.


La Fuerza Aérea está preocupada por el aumento vertiginoso de los costes del nuevo caza furtivo NGAD

La Fuerza Aérea de Estados Unidos está trabajando en su próximo avión de combate furtivo, pero está muy preocupada por el coste.

Se estima que el F-35 Lightning II costará al ejército estadounidense más de 2 billones de dólares, por lo que la Fuerza Aérea teme que se repita el mismo resultado con el Next Generation Air Dominance (NGAD), el programa para desarrollar un caza furtivo de sexta generación.

Reducción de costes en NGAD

La Fuerza Aérea calcula que cada caza furtivo NGAD podría costar hasta 300 millones de dólares, lo que lo convierte en un avión terriblemente caro.

Y la Fuerza Aérea no parece dispuesta a pagar ese precio.

"El F-35 representa el límite superior de lo que nos gustaría pagar por un avión individual para esa misión. El F-15EX y el F-35 están más o menos en la misma categoría de costes. Sin embargo, me gustaría ir más abajo", dijo el secretario de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, Frank Kendall, esta semana en la conferencia anual Air, Space & Cyber ​​de la Asociación de Fuerzas Aéreas y Espaciales.

Se estima que el programa F-35 costará 2 billones de dólares a lo largo de su ciclo de vida, según la Oficina de Responsabilidad Gubernamental (GAO). En términos de costo por avión, actualmente, la versión F-35A cuesta alrededor de 110 millones de dólares, la F-35C 117 millones y la F-35B 135 millones.

El F-35A es la versión de despegue estándar y por eso es más barata. El F-35C está diseñado para operar desde portaaviones y tiene una estructura de aterrizaje diferente. Por último, el F-35B es la versión de despegue corto y aterrizaje vertical que permite que la aeronave despegue y aterrice como un helicóptero. Esta capacidad es compleja, algo que se refleja en el precio de la variante.

“¿Es posible que observemos esa curva de Pareto y no haya nada en esa curva que sea más barato que un F-35? Eso es posible, sí, pero tenemos que hacer el trabajo. Tenemos que hacer el análisis y sabemos qué sería lo más ventajoso”, dijo Andrew Hunter, jefe de adquisiciones de la Fuerza Aérea.


F-35

El NGAD todavía está en desarrollo sin un contrato finalizado. El avión de próxima generación está diseñado para reemplazar al avión de combate furtivo F-22 Raptor en su función de superioridad aérea.

Para reducir costos, la Fuerza Aérea está considerando transferir algunas de las capacidades previstas del NGAD al programa de Aviones de Combate Colaborativo (CCA), que está diseñado para volar junto con el NGAD.

"Una vez que comience a integrar [aviones de combate colaborativo] y transferir algunos equipos, capacidades y funciones de la misión a los CCA, entonces puede hablar de un concepto diferente, potencialmente, para el caza tripulado que los controla, por lo que hay un alcance real allí", agregó el secretario de la Fuerza Aérea.

Los CCA mencionados por Kendall están destinados a servir junto con el NGAD y ofrecer opciones cinéticas adicionales. En esencia, serán controlados por el piloto del NGAD y estarán armados, ofreciendo vectores adicionales de ataque a un objetivo. Aunque la intención es que los CCA operen con inteligencia artificial, el objetivo general es tener un control humano estricto sobre la aeronave no tripulada.