Nuevos ataques en región mapuche
Dos nuevos atentados incendiarios se registraron en La Araucanía, una de las regiones más pobres del sur de Chile y hoy con una férrea presencia militarizada. El fuego destruyó una bodega y una vivienda en la localidad Padre las Casas. No hubo víctimas.
Agencia AFP
Bomberos intentan apagar el fuego en una vivienda atacada. (AP) |
Pese a los esfuerzos del gobierno y la
férrea presencia de policía militarizada, los ataques incendiarios
continuaron ayer en la región mapuche de La Araucanía, en el sur de
Chile, con atentados contra al menos dos propiedades que, aunque no
dejaron víctimas, alimentan un grave conflicto en una de las regiones
más pobres del país.
El nuevo ataque afectó a una bodega y una casa deshabitadas en la localidad de Padre las Casas, donde la policía encontró indicios de incendios intencionales, que suman seis en los últimos días desde que el viernes un matrimonio de ancianos murió calcinado cuando su vivienda fue atacada por un grupo de encapuchados.
“Se sabe que fue un incendio intencional por las características, ya que no hay electricidad en el lugar y se encontró indicios de inicio del fuego”, dijo el jefe policial Ernesto Ibacache al sitio electrónico del diario La Tercera.
El gobierno de Sebastián Piñera cree que los ataques serían obra de algún “grupo terrorista” que buscaría un incremento del conflicto indígena en el sur de Chile.
La última serie de ataques se inició hace unos 10 días en esta región de La Araucanía, a unos 600 km al sur de Santiago, donde los indígenas mapuches reivindican tierras que consideran suyas por derechos ancestrales.
Los ataques no han cedido pese a la presencia de unos 400 carabineros (policía militarizada de Chile) en la zona, enviados especialmente por disposición del presidente Sebastián Piñera.
El nuevo ataque afectó a una bodega y una casa deshabitadas en la localidad de Padre las Casas, donde la policía encontró indicios de incendios intencionales, que suman seis en los últimos días desde que el viernes un matrimonio de ancianos murió calcinado cuando su vivienda fue atacada por un grupo de encapuchados.
“Se sabe que fue un incendio intencional por las características, ya que no hay electricidad en el lugar y se encontró indicios de inicio del fuego”, dijo el jefe policial Ernesto Ibacache al sitio electrónico del diario La Tercera.
El gobierno de Sebastián Piñera cree que los ataques serían obra de algún “grupo terrorista” que buscaría un incremento del conflicto indígena en el sur de Chile.
La última serie de ataques se inició hace unos 10 días en esta región de La Araucanía, a unos 600 km al sur de Santiago, donde los indígenas mapuches reivindican tierras que consideran suyas por derechos ancestrales.
Los ataques no han cedido pese a la presencia de unos 400 carabineros (policía militarizada de Chile) en la zona, enviados especialmente por disposición del presidente Sebastián Piñera.
Por la gravedad de la situación, la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI) sostuvo un encuentro extraordinario el lunes con las cúpulas de las fuerzas armadas y de la policía. Al final de la reunión no hubo versión oficial, pero el diario El Mercurio señaló este martes que se acordó crear “una instancia semanal de inteligencia por el conflicto mapuche”.
Piñera envió también a la región al tercer hombre de la Policía, Carlos Carrasco, designado para hacer frente a una situación en la que el gobierno cree existe un involucramiento de una organización terrorista que podría recibir financiamiento y entrenamiento desde el exterior, o de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Reunión con autoridades
Agrupaciones indígenas mapuches convocaron una reunión a la que invitaron al presidente chileno y a representantes de la sociedad civil y los poderes Legislativo y Judicial, para buscar un acuerdo que baje la tensión vivida en la región sureña de La Araucanía tras una cadena de ataques incendiarios.
La “Cumbre Mapuche”, como la denominaron las organizaciones que la convocan, tiene previsto reunir el próximo 16 de enero en el cerro Ñielol de la ciudad de Temuco (677 km al sur de Santiago), a autoridades con representantes de las comunidades mapuche.
“Queremos presentar una propuesta de solución a las tensiones que se viven por estos días en el sur”, dijo Aucán Huilcamán, líder del Consejo de Todas las Tierras.
“Debemos darnos una oportunidad, porque nos sentimos responsables. De la misma forma que el presidente debe asumir sus responsabilidades, nosotros somos parte directa”, agregó Huilcamán.
En los últimos diez días se han registrado una serie de ataques incendiarios, uno de los cuales dejó a dos fallecidos, en la región de La Araucanía, donde los indígenas mapuches reivindican tierras que consideran suyas por derechos ancestrales. El gobierno ha aumentado la presencia policial en la zona, mientras sigue investigando el origen de los ataques, que no han sido reivindicados por ningún grupo, pero que según el ejecutivo, son obra de un “grupo terrorista” sin identificar.
Diálogo con los partidos
Para hacer frente a esta ola de ataques, el gobierno citó el lunes a una 'cumbre política' en el palacio presidencial, a la que asistieron los jefes de los partidos políticos tanto del oficialismo como de la oposición. Tras el encuentro, se hizo una llamado a la “unidad nacional”, aunque hubo divergencias en cuanto a la invocación para estos casos de una severa ley antiterrorista que data de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) y que endurece las penas respecto a la legislación ordinaria y le entrega a la justicia algunas facultades especiales.
Mientras que el oficialismo aprueba la aplicación de esta normativa y pide incluso aplicar 'estado de excepción' en la zona -para restringir la libre circulación-, los partidos de centro izquierda criticaron su uso y acusaron una actitud discriminatoria de por parte del gobierno.
Los mapuches son la principal etnia originaria chilena, pero hoy están reducidos a unas 700.000 personas, en una población total del país de 16,5 millones de habitantes. En la región de La Araucanía unas 2.000 comunidades mapuches funcionan de manera autónoma, aunque sin un líder único.
Uno de los territorios más pobres del país
Agencia AFP
La región de La Araucanía, centro de una
serie de ataques incendiarios que el gobierno chileno atribuye a un
grupo terrorista que buscaría alimentar el conflicto indígena mapuche,
tiene la mayor tasa de pobreza del país y la segunda de mayor desempleo,
según cifras oficiales.
A unos 600 km al sur de Santiago, y con poco más de 900.000 habitantes, La Araucanía tiene una tasa de pobreza de 22,9% por sobre el 14,4% que registra el promedio de Chile, según la última encuesta de Caracterización Socio Económica del gobierno (Casen-2011).
Aunque la cifra bajó en comparación al registro de 2009 (27,1%), sigue siendo la más alta del país, por encima de la vecina región del Bío Bío, a unos 500 km al sur de Santiago, donde también se asientan comunidades mapuches, que tiene un 21,5% de pobreza.
Pueblo originario
Los mapuches son los primeros habitantes de Chile y parte de Argentina. Hoy están reducidos a unas 700.000 personas, sobre una población total de 16,5 millones.
La mayoría vive en zonas urbanas y pequeñas comunidades de las regiones de La Araucanía y Bío Bío, y se dedican a labores agrícolas o a la extracción de madera.
El desempleo en La Araucanía alcanza al 6,9%, mientras que en el Bío Bío es de 7,8%, las más altas a nivel nacional, donde la tasa promedio es de 6,2%, según el último reporte del Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
Algunas comunidades mapuches reivindican la posesión de tierras que consideran suyas por derechos ancestrales y que les fueron arrebatadas tras ser sometidos por la fuerza por el Estado a fines del siglo XIX.
De acuerdo a cálculos de expertos, el Estado chileno ha restituido a los mapuches unas 650.000 hectáreas, sobre unas 5 millones que reclaman, desde la región del Bio Bío hacia el sur.
Los mapuches -o “gente de la tierra”, en su lengua originaria- no cuentan con un líder único o reconocible. Sólo en la región de La Araucanía hay unas 2.000 comunidades que funcionan de manera autónoma.
Con una inversión proyectada de 4.500 millones de dólares hasta 2014, el gobierno del presidente Sebastián Piñera puso en marcha en 2010 el llamando “Plan Araucanía”, que considera una serie de iniciativas para el desarrollo social y económico de la región.
Fuente: Los Andes Online
No hay comentarios:
Publicar un comentario