miércoles, 17 de julio de 2024

LeoLabs seleccionado para respaldar el primer satélite de inteligencia, vigilancia y reconocimiento del Reino Unido en órbita terrestre baja
La compañía prestará servicios de conciencia de la situación espacial para el Proyecto Tyche del Comando Espacial del Reino Unido, la primera adquisición de satélites en el marco del programa ISTARI.




MENLO PARK, California, 17 de julio de 2024 /PRNewswire/ -- LeoLabs, el proveedor líder de soluciones integradas que monitorean persistentemente la actividad en el espacio para revelar amenazas a la seguridad, anunció hoy que fue seleccionado para respaldar el lanzamiento y las operaciones del Proyecto Tyche del Comando Espacial del Reino Unido mediante la prestación de servicios de seguimiento y monitorización espacial y de prevención de colisiones.

Tyche, cuyo lanzamiento está previsto para este verano, es un concepto de investigación y desarrollo de 150 kilogramos que se está construyendo en el marco del programa ISTARI. Este proyecto tiene como objetivo probar y demostrar tecnologías que formarán la primera constelación multisatélite de inteligencia, vigilancia y reconocimiento (ISR) ISTARI del Comando Espacial del Reino Unido en órbita terrestre baja (LEO). Tyche es el primer satélite conceptual que se lanza en el marco de este programa.

Además de proporcionar servicios de conciencia de la situación espacial (SSA) para Tyche, LeoLabs también proporcionará al Comando Espacial del Reino Unido servicios de conciencia del dominio espacial (SDA), incluido el monitoreo persistente de objetos seleccionados de alto interés.

"LeoLabs se enorgullece de apoyar al Comando Espacial del Reino Unido y al Ministerio de Defensa del Reino Unido en este importante paso hacia el desarrollo de la primera constelación de satélites ISR en órbita terrestre baja del Reino Unido", dijo Tony Frazier, director ejecutivo de LeoLabs. "Esperamos actuar como un socio de misión crítica para el Reino Unido y sus aliados para esta y futuras misiones, permitiendo la seguridad continua del espacio".

Acerca de LeoLabs (www.leolabs.space):

LeoLabs es el proveedor líder de soluciones integradas que monitorean persistentemente la actividad en el espacio para revelar amenazas a la seguridad. A través de nuestra exclusiva red de radar global y nuestra plataforma de análisis de datos basada en IA, recopilamos millones de mediciones por día en más de 20 000 objetos para mantener un mapa vivo del tráfico orbital. LeoLabs está transformando la forma en que los operadores de satélites comerciales, los proveedores de lanzamiento y las agencias gubernamentales ven, comprenden y actúan sobre las oportunidades para proteger y defender sus activos en el espacio.



martes, 9 de julio de 2024

Más detalles de la estación espacial india BAS y el cohete NGLV
Por Daniel Marín



Desde el año pasado India tiene oficialmente dos grandes objetivos para su programa espacial tripulado: tener lista una estación espacial para 2035 y poner un astronauta en la Luna en 2040. La estación, conocida por el momento de forma genérica como BAS (Bharatiya Antariksh Station), o sea, «estación espacial india», ha evolucionado en este último año. De ser una estación modesta, con una masa de apenas 25 toneladas y dos módulos principales, ahora estará formada por unos cinco módulos principales y su masa alcanzará las 52 toneladas. O sea, la estación india ha aumentado el número de módulos que la forman y, por tanto, su periodo de construcción, aunque la fecha de entrada en servicio se mantiene, por lo que el primer módulo podría despegar antes, en 2028.


Recreación de la estación india Bharatiya Antariksh Station con 5 módulos de gran tamaño y varias naves Gaganyaan acopladas (ISRO).

BAS tendrá unas dimensiones de 27 x 20 metros y estará situada en una órbita con una inclinación de 51,6º, como la ISS y la futura estación de Axiom. Esta inclinación garantiza que todas las potencias espaciales con naves tripuladas, incluso China, sean capaces de lanzar vehículos a la misma. No obstante, es una inclinación un poco extraña para una estación india, pues el centro espacial Satish Dhawan está situado a unos 13,7º. Esto significa que con una inclinación más baja, de hasta 14º, se podría aprovechar mejor la capacidad de carga de los lanzadores indios. Si la agencia espacial de India, la ISRO, quiere que BAS pueda ser visitada por naves estadounidenses lanzadas desde Florida, basta con que su inclinación sea de 28º. Una inclinación de 51,6º permite que Rusia también pueda lanzar naves Oriol o Soyuz hacia BAS. Si además de la inclinación de 51,6º, BAS se lanza en el mismo plano orbital que la ISS o la estación de Axiom, cabe la posibilidad de que haya transferencia de naves, personas y equipos entre estaciones (no obstante, recordemos que la ISS debe ser retirada en 2030).


Datos actuales de la BAS (el diseño de los módulos no es preciso, pues se han usado imágenes de módulos DOS soviéticos) (ISRO).

Diseño del año pasado de la estación espacial india en 2035 (ISRO).

Otros detalles de la estación son que usará paneles solares flexibles de tipo ROSA —como la Estación Espacial China— y un sistema de acoplamiento andrógino, aunque está por ver si será compatible con el estándar NDS (NASA Docking System) empleado en el segmento estadounidense de la ISS (tanto el NDS como el sistema de acoplamiento de la Estación Espacial China se basan en el APAS-89 soviético, pero no son compatibles entre sí por ligeras diferencias de diseño). El diseño de BAS gira alrededor de módulos de unas 10 toneladas cada uno, una gran diferencia con respecto a la Estación Espacial China, cuyos tres módulos principales tienen unas 23 toneladas cada uno, formando una estación de unas 70 toneladas en la actualidad (a las que hay que sumar las aproximadamente 22 toneladas de las naves Tianzhou y Shenzhou acopladas en un momento dado). Esto se debe a que el cohete más potente de India es el LVM3 —antes denominado GSLV Mark III—, que puede situar en órbita baja (LEO) un máximo de 10 toneladas, menos de la mitad que un Falcon 9 desechable. Aunque BAS debe estar lista para 2035, su construcción comenzaría antes, quizás en una fecha tan temprana como 2028. Los astronautas indios viajarán a BAS a bordo de la nave Gaganyaan, que debe realizar su primer vuelo con astronautas en 2026 y que también empleará el LVM3.


Posible diseño del primer módulo de BAS (Vikranth Jonna X: @VikranthJonna).

Detalle de la nave tripulada Gaganyaan con su sistema de acoplamiento andrógino (ISRO).

La ISRO está desarrollando un nuevo lanzador, el NGLV (Next Generation Launch Vehicle), también conocido como Soorya (por el momento es una denominación interna, pero no está claro si terminará por ser el nombre oficial del vector). El NGLV es un cohete de metano y oxígeno líquido con un diseño similar al del Falcon 9 que será capaz de colocar 23 toneladas en órbita en versión desechable (un incremento de 6 toneladas con respecto a las especificaciones del año pasado que lo asemejan más al vector de SpaceX). Tendrá tres etapas y una masa al lanzamiento de 687 toneladas. La primera etapa LM450 empleará nueve motores de metano de 1150 kilonewton de empuje reutilizables hasta veinte veces, mientras que la segunda etapa LM120 tendrá un único motor (una vez más, siguiendo el ejemplo de la distribución de motores Merlin 1D en el Falcon 9).


Cohete de metano NGL (ISRO).

A partir del NGLV/Soorya básico, la ISRO quiere desarrollar una familia de lanzadores más potentes. El NGLV con dos aceleradores S160 podrá colocar 32 toneladas en LEO. Previamente se habían anunciado dos versiones capaces de colocar 28 y 48 toneladas mediante el uso de cuatro aceleradores de combustible sólido S120 o cuatro etapas LM450, pero estas cifras eran para una capacidad básica de 17 toneladas, por lo que estas futuras variantes, de desarrollarse, tendrían una capacidad superior a las 30 y 50 toneladas, respectivamente. Un NGLV que pueda lanzar 30 o 50 toneladas en LEO es un paso fundamental para la ISRO y, sin duda, podrá jugar un papel esencial en la construcción de la BAS añadiendo módulos más pesados. De cara a una misión tripulada a la Luna, es factible imaginar un esquema de misión con tres o cuatro lanzamientos del NGLV pesado, una arquitectura algo más compleja que la que necesitará China, con dos lanzamientos del CZ-10 (en cualquier caso, la ISRO ha apuntado que podría desarrollar un superlanzador pesado derivado del NGLV).


Versiones pesadas del NGLV (Vikranth Jonna X: @VikranthJonna).

Variantes pesadas del NGLV con 28 y 48 toneladas de capacidad en LEO (ISRO).

Variantes de carga, tripulada y pesada del NGLV (ISRO).

El esquema elegido para BAS por la ISRO es único. Mientras la URSS, EE.UU. y China optaron por lanzar estaciones monobloque antes de apostar por estaciones multimodulares, India ha decidido saltarse esta parte del aprendizaje e ir directamente a por una estación espacial permanente formada por varios módulos, aunque más pequeños (solo las Tiangong 1 y 2 chinas, de 8,5 toneladas cada una, se parecen al esquema indio). Teniendo en cuenta que India todavía debe poner en servicio la nave Gaganyaan y practicar acoplamientos en el espacio, no es una apuesta trivial. Esperemos que les salga bien.


Planes espaciales de India en el espacio (ISRO).



Un microsatélite, una de las herramientas clave para la resistencia de Ucrania



Excepto la aparición de un suceso inesperado, en febrero de 2025 la guerra entre Rusia y Ucrania cumplirá tres años.

En un principio, se creía que Moscú obtendría un rápido triunfo ante Kiev. Sin embargo, Ucrania ha resistido mucho más de lo esperado.

En este sentido, entre muchas de las herramientas gracias a las que Ucrania está resistiendo se destaca un satélite financiado por crowdfunding que le está permitiendo a la inteligencia militar de Kiev observar a los rusos desde el espacio, detectar a sus tropas y destruir sus armas.

El país de Volodímir Zelenski le compró el microsatélite a la empresa finlandesa ICEYE, lo que le permitió destruir miles de objetivos militares, incluido el submarino Rostov del Don y el gran buque de desembarco de Minsk, entre otros.



Específicamente, Kiev adquirió la unidad en agosto de 2022 y, desde ese momento, tiene acceso a la base de datos de ICEYE.

Hasta esa fecha, Ucrania no contaba con satélites propios, por lo que el acceso a la tecnología ICEYE le permitió recibir imágenes exclusivas en cualquier condición meteorológica, a pesar de la lluvia, la nieve, la niebla, el polvo, de día y de noche.

Los satélites en miniatura de ICEYE utilizan tecnología de radar de apertura sintética (SAR, por sus siglas en inglés), como los SAOCOM, que recopila imágenes detalladas, mirando a través de las nubes, el follaje e incluso la noche al reflejar las ondas de radio de la superficie de nuestro planeta.

Por su parte, para Rusia esto implica que sea enormemente dificultoso esconder sus tanques o tropas.

Gracias a este satélite, combinado con el acceso a la base de datos ICEYE, Ucrania ha tenido acceso a más de 4.700 fotografías de objetivos militares rusos, incluidos 370 aeródromos, 238 posiciones de defensa aérea e inteligencia técnica de radio, 153 depósitos de petróleo y almacenes de combustible, 147 almacenes de misiles, armas de aviación y municiones, y 17 bases navales.

Según Kiev, el 38% de los datos obtenidos gracias a ICEYE se utilizaron para preparar ataques contra el enemigo.



Son argentinos, crearon un cohete innovador y triunfaron en el "Mundial" de Estados Unidos
Un equipo de estudiantes del ITBA diseñó una nave de más de 3 metros de altura, con propulsión híbrida, e hizo historia al finalizar en el podio de un certamen internacional.
por Matías Rufino



Trabajo y perseverancia son dos palabras que describen a la perfección a los estudiantes de ingeniería del Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA), quienes lograron un hito en la historia aeroespacial de la Argentina.

En poco más de nueve meses, plantearon un proyecto para construir un cohete, apodado "Lanín I" (relacionado con el nombre del volcán, ubicado en el sur del país), y participaron de uno de los certámenes más complejos en Estados Unidos, el Spaceport America Cup.

De esta manera, un equipo de aproximadamente 50 alumnos argentinos alcanzó el podio en la competencia, donde la precisión y la altura (tres kilómetros para su categoría) eran los principales lineamientos.


Estudiantes del ITBA marcaron un antes y un después en la historia aeroespacial del país

En diálogo con El Cronista, afirmaron que "siempre hay una gota de suerte como en cualquier competencia", pero destacaron que la propulsión híbrida, que involucra sustancias líquidas y gaseosas, fue el diferencial que los llevó a ser los pioneros en Latinoamérica en diseñar un motor de estas características.

A pesar de ya haber participado en 2023 con el cohete Theros III, este año lograron acaparar la atención de las autoridades del Spaceport America Cup. "El motor híbrido generó un impacto bastante grande en los jueces, más que nada porque no hay una cultura de lo aeroespacial en Argentina", explicó Juan Bautista Valero, director del proyecto y estudiante del ITBA.

Cohete Lanín I: cómo iniciaron el proyecto los estudiantes del ITBA

Dos años atrás, eran 10 estudiantes que desarrollaban cohetes muy pequeños. Ahora, con el correr del tiempo, el interés dentro de la facultad creció y ya agrupan a más de 50 alumnos, con la ayuda de profesores y profesionales.

"Es un proyecto bastante transversal, abarca a todas las carreras y años. Somos un equipo que desarrolla ingeniería aeroespacial y la universidad en sí es el principal sponsor (alrededor del 90% de los fondos). También utilizamos las sedes y laboratorios", detalló Valero.

Sin embargo, como líder del proyecto de "Lanín I", que mide 3,30 metros de altura y tiene 15 centímetros de diámetro, considera que este año fueron "más lejos desde el nivel tecnológico", ya que "la primera vez que participamos arrancamos con un lanzador hecho por nosotros, pero con un motor comprado".


Fases de diseño del cohete Lanín I

Con un motor híbrido diseñado por los estudiantes, más el desarrollo de tanques y válvulas, dieron un salto muy grande. "Solo ocho de los equipos, de un total de 150, presentaron este tipo de propulsión", señaló.

Debido a ello, en la categoría "Student Researched and Designed (SRAD)", el equipo argentino fue uno de los dos que lograron lanzar el cohete. A raíz de ello, Felipe Ranftl, también integrante del proyecto, celebró haber tenido la "oportunidad de competir en un certamen de esta índole".

Spaceport America Cup: cómo es el diseño del cohete Lanín I

Comenzaron con la idea del certamen en octubre, recibieron la aprobación en noviembre y se presentaron a competir en el Spaceport America Cup en junio. Así fue la acelerada travesía que llevaron a cabo los estudiantes del ITBA.

Se enfrentaron a un sinfín de proyectos, provenientes de universidades en Europa, Asia, Estados Unidos y otros países de Latinoamérica. Para ello, además de la gran injerencia económica de la universidad, también recibieron apoyo por parte LIA Aerospace y el Instituto de Investigaciones Científicas y Técnicas para la Defensa, entre otros. Además, otros sponsors brindaron materiales.

No obstante, el test final no pudo hacerse en el país. "El cohete en ningún momento lo pudimos lanzar acá. Lo hicimos en Estados Unidos", contó Fabrizio Iezzi, alumno y parte del equipo argentino.


Parte del equipo de trabajo del ITBA, quienes aseguraron que volverán a competir en 2025

Sin embargo, previo al viaje hacia los Estados Unidos, tuvieron que pasar una serie de fases preliminares para ingresar al certamen internacional. Así lo indicó Juan Bautista Valero, quien remarcó que "la competencia es de ingeniería" y, previamente, "se pretende chequear el paso del desarrollo".

Para ello, primero hay que presentar la propuesta y esperar la selección final. "Una vez que eligen a los equipos, se realiza una revisión preliminar de diseño, que sea algo lógico desde lo conceptual, luego una revisión crítica (seguridad del cohete) y, por último, antes de ir y con el cohete armado, se entrega en paralelo un documento que se llama technical report", reveló a El Cronista.

No obstante, se sinceró y explicó que en la competencia "uno gana por la performance, pero también por la calidad y la ingeniería de diseño, incluida en ese documento".

Estudiantes del ITBA: cómo sigue el proyecto sobre el cohete Lanín I

Los estudiantes del ITBA finalizaron entre los tres primeros equipos del Spaceport America Cup. A la espera del puntaje final, que determinará su ubicación en el podio, Lorenzo Colace, otro estudiante que integró el proyecto, aseguró que fueron "uno de los pocos en lanzar y recuperar el cohete, dentro de una de las categorías más desafiantes".

Teniendo en cuenta que el cohete fue 100% desarrollado en la facultad, Juan Bautista Valero ratificó que son los primeros (alumnos universitarios) en diseñar un proyecto de este calibre en la historia de Argentina. "Hay cosas que son infinitamente más fáciles de comprar en el exterior que acá", expresó.

Algunos de los estudiantes, con los que El Cronista conversó, no pueden dimensionar semejante logro. "Lo repetís y no parece cierto que hayamos participado en el Mundial de Cohetería", describió Felipe Ranftl.


Lanín I tiene más de 3 metros de altura y tiene 15 centímetros de diámetro.

Asimismo, confirmaron que el proyecto no queda en "stand by", dado que volverán a competir el próximo año y atenderán otro tipo de cuestiones.

"Aunque nos fue bien, no llegamos a la altura estipulada, nos quedamos un poco por debajo de los 3.000 metros. El cohete voló un poco más bajo de lo esperado por algunas cuestiones de la combustión, pero los objetivos del proyecto los cumplimos al 100%", confesó Santiago Ponte, quien valoró la iniciativa y afirmó que se dedicarán a refinar la propulsión de cara al 2025.



jueves, 4 de julio de 2024

La ONU condena la interferencia satelital rusa en Ucrania




La Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), dependiente de la ONU, condenó una serie de incidentes que calificó como interferencia rusa en los sistemas de satélites de países europeos.

En el marco de la guerra en Ucrania, la UIT revisó la semana pasada una serie de quejas de Kiev y cuatro países de la Unión Europea (Francia, Países Bajos, Suecia y Luxemburgo), sobre interferencias satelitales en los últimos meses.

Según los denunciantes, los incidentes han interferido las señales de GPS, poniendo en peligro el control del tráfico aéreo, e interrumpiendo los canales de televisión infantiles para mostrar imágenes violentas de la guerra.



“La Junta expresó su grave preocupación por el uso de señales para causar interferencias dañinas intencionales”, expresó la Junta del Reglamento de Radiocomunicaciones de la UIT, con sede en Ginebra.

Además, dijo que las interrupciones en las redes de satélites de Francia y Suecia “parecían originarse en estaciones terrenas ubicadas en las áreas de Moscú, Kaliningrado y Pavlovka”, calificándolas de “extremadamente preocupantes e inaceptables”.

Por ello, instó a Moscú a cesar inmediatamente sus acciones y convocó una reunión entre los países afectados y Rusia para resolver los casos y evitar que se repitan.

Moscú, que niega haber violado las reglas de la UIT, también se había quejado de la supuesta interferencia satelital por parte de los países de la OTAN, aunque esto no fue tratado por el organismo.

Conformada por 193 Estados miembros, la UIT es responsable de regular y coordinar el sistema mundial de satélites: su constitución le encomienda la coordinación de los esfuerzos para eliminar las interferencias perjudiciales.



domingo, 30 de junio de 2024

El Aeroclub de La Puntilla deberá ser relocalizado antes de octubre de 2027
El del viernes 21 de junio fue el quinto accidente en que una avioneta se estrella en Luján desde 2011. Además, toda la zonificación de La Puntilla cambió y ha llevado a decidir el traslado de la pista. La nueva pista proyectada en Agrelo y, en simultáneo, la “ciudad del futuro” que se instalará en el piedemonte.
por Ignacio de la Rosa


Harán un polo tecnológico en el aeroclub de La Puntilla

Viernes 21 de junio, feriado puente. Cerca de las 10:30, en una mañana con muy poco movimiento en las calles mendocinas, repentinamente una avioneta se precipitó contra el suelo en las inmediaciones del Aeroclub La Puntilla, en Luján de Cuyo.

La aeronave cayó en un predio de Aysam y, pese a la espectacularidad de las imágenes, sus ocupantes –dos hombres de 48 y 43 años- solo sufrieron heridas leves.

Si bien el accidente no derivó en consecuencias graves, volvió a poner sobre la mesa un proyecto que ya tiene 5 años desde su presentación. Se trata de la propuesta de trasladar y relocalizar el aeroclub en otra zona no residencial, también en Luján de Cuyo. Y, al mismo tiempo, darle una nueva impronta al área donde está enclavado actualmente.

Porque el crecimiento urbano y demográfico de las últimas décadas cambió por completo la fisonomía de La Puntilla. Y, por supuesto, sus usos y costumbres.

A nivel municipal, desde 2019 hay un proyecto para relocalizar el aeroclub. La propuesta incluye la construcción de una nueva pista más completa, con hangares y servicios aeronáuticos en la zona de Agrelo, más alejada de la urbanización. Y en octubre se conocerán las propuestas de los oferentes.

A quienes estén interesados en construir y concesionar este polo logístico –con la flamante pista incluida-, se les exigirá además que presenten una propuesta de desarrollo de un polo urbano y tecnológico en La Puntilla y en la zona donde actualmente está el aeroclub.

A partir de la apertura de sobres con propuestas para trabajar en estos dos espacios –prevista para el 10 de octubre de este año-, habrá un plazo de 36 meses para que el Aeroclub La Puntilla deje de operar donde lo hace actualmente.

Porque ese es el plazo previsto para el desarrollo de la primera etapa de esta mini ciudad proyectada en la zona, así como también para la inauguración de la primera etapa nueva pista. Es decir, que antes del 10 de octubre de 2027 el Aeroclub La Puntilla debería haber dejado de funcionar en su sede actual.

De hecho, la concesión de los terrenos en este distrito lujanino –son municipales- como aeroclub venció en 2023, aunque la comuna decidió prorrogarla.

El objetivo de la Municipalidad de Luján no es solamente la relocalización de la pista sino, además, darle una nueva impronta a la zona de La Puntilla, con un área enfocada en el desarrollo tecnológico y sustentable y donde, además, haya un modelo amigable con el entorno.

“La urgencia de la relocalización del aeródromo no radica puntualmente en el accidente aéreo, sino en lo que tiene que ver con cuestiones de urbanización y limitaciones de la pista”, destacó el jefe del Aeropuerto de Mendoza en la ANAC, Alejandro Barrionuevo, a Los Andes.

“A raíz del crecimiento urbano y de los tendidos de alta tensión, el aeródromo hoy cuenta con varios obstáculos a su alrededor”, agregó.

Por su parte, el director de Planificación del Ministerio de Energía y Ambiente, Matías Dalla Torre también se refirió a los cambios en la zona desde la inauguración del aeroclub y la pista en el lugar -1905, cuando era una zona de cerrillos y retirada- hasta la actualidad.

“Hoy sería imposible aprobar un aeródromo en la zona. Un proyecto así no pasaría los estudios y exigencias, y creo que no se le otorgaría la factibilidad para instalarse allí”, resaltó.

Consultados por Los Andes, desde el Aeroclub La Puntilla prefirieron no referirse al tema.

CINCO ACCIDENTES EN 13 AÑOS

El accidente del 21 de junio pasado fue el quinto del que intervinieron avionetas en la zona -e inmediaciones- en los últimos 13 años.

El 1 de marzo de 2011, una avioneta de Sanidad y Calidad Agropecuaria de la Provincia se estrelló en Luján y sus dos ocupantes fueron trasladados con quemaduras y quebraduras.

Más cercano en el tiempo, el 4 de marzo de 2017, otra avioneta se estrelló en una calle interna de un barrio privado de Chacras de Coria. En aquel episodio, sus dos ocupantes -instructor y alumno-, resultaron ilesos.

El 17 de noviembre del 2019 fueron un instructor de vuelo y su alumna quienes se precipitaron desde las alturas y en la avioneta en habían partido del Aeroclub La Puntilla (también salieron ilesos). Mientras que en febrero de 2020, a bordo de una avioneta Tecnam P2002, un piloto y su acompañante se estrellaron en el barrio privado Palmares.

“Lo del otro día fue demasiado ya. ¡No fue una tragedia de milagro! ¿Qué ocurría si la avioneta caía encima de una casa?”, destaca Silvana, quien vive en las inmediaciones del aeroclub.

LA NUEVA PISTA Y LA “MINI CIUDAD”EN LA PUNTILLA

En 2019, cuando Omar De Marchi era intendente de Luján de Cuyo, se anunció el proyecto de instalar una “mini ciudad” en la zona de La Puntilla. No contempla únicamente las 36 hectáreas del aeródromo, sino que también toda aquella zona donde en las últimas décadas comenzaron a instalarse algunos desarrollos inmobiliarios.

En este polo urbano diseñado por la comuna se han pensado edificios que no superen los 8 pisos y distribuidos sobre un terreno que conservará las características del lugar donde podrán habitar unas 12.000 personas en forma permanente, además de otras 20.000 que ingresarán a diario.

El objetivo en el lugar es reducir el uso de vehículos tradicionales, además de sumar espacios verdes, escuelas y otros espacios. De acuerdo al masterplan, en este espacio se buscará promover la sostenibilidad ambiental, mediante la reutilización de aguas, construcciones bioclimáticas, movilidad activa y jardines productivos urbanos.

En simultáneo se convierte en una necesidad el hecho de relocalizar la pista aeronáutica e instalarla en la zona de Agrelo, en las inmediaciones de la Destilería, también en Luján de Cuyo.

Pero el proyecto del Aeródromo Luján de Cuyo no está pensado en soledad, sino que será parte de todo un polo logístico e industrial pensado para transportes de carga, con una playa con capacidad para 5.000 camiones, un hotel, una estación de servicio con sistema de carga exprés y galpones, entre otros servicios.

El llamado a licitación de este polo está previsto para el 10 de octubre, y se convoca a privados para que hagan sus propuestas de pista aeronáutica y de todo este predio multimodal.

La propuesta de Luján de Cuyo es concesionar este espacio -terrenos muncipales- a un tercero durante 50 años y para que haga todo el desarrollo aeronáutico y comercial del sitio. La única exigencia de la comuna es que se ceda una franja horaria para el uso del aeroclub y horas de vuelo.

Todo el desarrollo de este sitio correrá por cuenta del privado a quien se adjudique la licitación y se hagan cargo de la concesión. Y, entre los trabajos a encarar, sobresale una importante obra eléctrica. La idea, tanto de Luján como de la ANAC, es que esta ambiciosa nueva pista proyectada pueda funcionar como una alternativa al aeropuerto El Plumerillo y ante alguna contingencia.

A quienes participen de este proyecto, la comuna lujanina exigirá que hagan su propia propuesta también para el desarrollo del polo urbano y tecnológico en La Puntilla, con miras a desarrollar la “nueva ciudad sustentable” en el sitio.

“Actualmente, lo que es la zona de La Puntilla está limitada, y ello hace conveniente la reubicación de una pista con mejor performance, donde puedan operar otras aeronaves más grandes”, agregó Barrionuevo, de la ANAC.

Matías Dalla Torre, director de Planificación de la Provincia por su parte, se refirió al crecimiento intenso que tuvo el área metropolitana hacia el piedemonte.

“Fue muy rápido, se avanzó desordenadamente y de manera conflictiva con el entorno, sobre todo en una zona de fragilidad ambiental”, destacó Dalla Torre. Y agregó que fue a partir de la década del 90 que los desarrollos inmobiliarios se concentraron en el sector.

Ante esta situación, en 2009 la Provincia sancionó una Ley de Ordenamiento Territorial, mientras que en 2022 se sumó la Ley 9.414/22, de Pautas de Manejo y Disposición para la Planificación Integrada del Piedemonte.

“Si alguien quiere establecer un nuevo desarrollo en la zona, hay que pasar por una unidad creada espacialmente. Y hoy no se aprobaría la instalación de un aeródromo en el piedemonte”, concluyó.



sábado, 29 de junio de 2024

Francos dijo que el reactor CAREM paralizado por Milei, es “imprescindible” para el Gobierno
El jefe de Gabinete destacó como "estratégico" al reactor nuclear que desarrolla la CNEA, a pesar que el gobierno mantiene congelados los fondos del organismo a valores de 2023.


Guillermo Francos visitó el reactor CAREM.


A pesar de la parálisis que el sector de ciencia y tecnología padece, a manos de la política libertaria de ajuste y congelamiento de presupuesto, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, aseguró que los proyectos nucleares estratégicos, como el reactor modular CAREM-25, son “imprescindibles para el Gobierno.

Las declaraciones de Francos se dieron en el marco de su visita junto a autoridades nacionales a las obras que lleva a cabo la Comisión Nacional de Energía Atómica en el predio de Lima, en la provincia de Buenos Aires. En ese marco, Francos afirmó que “tenemos que dar a conocer la potencia que somos como productores en el área nuclear y poder ofrecer al mundo este conocimiento”.

“Esta es una visita imprescindible para el Gobierno nacional. Estamos apoyando al equipo de ingeniería nuclear que hay en la Argentina, que ha sido tan prolífico en el tiempo”, expresó el jefe de Gabinete, quien recorrió el predio junto al presidente de la CNEA, Dr. Ing. Germán Guido Lavalle.

Hoy, el gobierno nacional mantiene congelados los fondos de todos los organsimos de ciencia y tecnología (incluida la CNEA) a valores de 2023, con una inflación proyectada del 250% para este año, lo que ya implica la parálisis de proyectos como el propio CAREM, el RA-10 (sólo en el área nuclear) y la discontinuidad de proyectos en todas las disciplinas, el freno de obras de infraestructura y complicaciones incluso en gastos de funcionamiento de los 330 institutos del CONICET y los 17 organismos de ciencia y tecnología.

Visita al CAREM

La comitiva nacional con autoridades de Jefatura de Gabinete, Ministerio de Economía, Comisión Nacional de Energía Atómica, Nucleoeléctrica Argentina, el Banco Nación y el Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE) visitó la obra del reactor CAREM, donde realizaron una recorrida y se interiorizaron del avance de las obras.

El presidente de la CNEA aseguró que “hace falta energía nuclear para la transición hacia las energías renovables”. “Hay una mayor demanda de energía eléctrica por los autos eléctricos y la inteligencia artificial. Es el momento de la oportunidad nuclear: tenemos una ventana de tiempo y hay que aprovecharla”, aseveró Lavalle.

El reactor CAREM, cuya obra se visitó hoy, es un prototipo de reactor nuclear modular pequeño (SMR, según sus siglas en inglés), con capacidad para producir electricidad para una población de 120.000 habitantes. El proyecto contempla un 70% de participación de la industria nacional y más de un millar de empresas aportan servicios, ingeniería y componentes.

Además, se le dieron detalles sobre otras dos obras emblemáticas de la CNEA: el reactor RA-10 para producción de radioisótopos, y el Centro Argentino de Protonterapia para el tratamiento de tumores de difícil acceso y cáncer infantil, obras que pueden obtener mejores resultados con la sinergia con la inversión privada.

En la visita de trabajo también participaron por la Jefatura de Gabinete el vicejefe de Gabinete Ejecutivo, José Rolandi; el subsecretario de Evaluación Presupuestaria, Enrique Pinedo y la directora Nacional de Inversión Pública, Marina Barbeito. Por el Ministerio de Economía estuvo presente José García Hamilton. También asistieron el presidente de la empresa Nucleoeléctrica Argentina SA, Luis Fasanella, y el presidente de BICE Fideicomisos, Maximiliano Voss. Por el Banco Nación concurrieron el subgerente de Operaciones Fiduciarias, José Manuel López Alberti, y el jefe del Departamento Fideicomisos, Adolfo Alejandro del Valle.



miércoles, 26 de junio de 2024

Docentes y estudiantes desarrollan una constelación de satélites
Gestado en la carrera de Ingeniería Espacial de la UNSAM, el proyecto Focus ofrecerá capacidades satelitales para el monitoreo de grandes infraestructuras, como edificios y puentes, y el control de espacios marítimos y continentales. Sus creadores buscan constituir una empresa y brindar el servicio a un costo inferior al del mercado global. Esperan lanzar el primer satélite en 2027.
Por Nadia Luna




¿En qué se parecen la NASA y una universidad pública del conurbano? En que ambas son capaces de diseñar y llevar adelante una misión espacial.

Docentes y estudiantes de la Ingeniería Espacial de la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM) trabajan en la fabricación de una constelación de satélites para el monitoreo de infraestructuras. A través de tecnología de radar, será posible detectar movimientos milimétricos de edificios, represas y puentes, lo que permitirá prevenir accidentes. La constelación inicialmente estará compuesta por tres satélites, aunque el número podría variar según la demanda. Esperan lanzar el primer satélite en 2027.

El proyecto Focus tiene dos objetivos centrales: por un lado, desarrollar equipos de alta tecnología a bajo costo y crear una startup que permita brindar el servicio de imágenes satelitales; por otro lado, involucrar a los estudiantes para que puedan ser parte del desarrollo de un sistema complejo de forma integral, desde la gestación de la idea hasta la obtención de un producto con aplicación concreta.

“Solo un puñado de países tiene esta tecnología. La Argentina entró en ese grupo de élite con el desarrollo del SAOCOM, que funciona en banda L y sirve para el monitoreo de suelos. Nuestros satélites emitirán en banda X y podrán usarse para detectar el movimiento de infraestructuras”, cuenta Erwin Beccari, docente de la Escuela de Ciencia y Tecnología (ECyT) e integrante del equipo Focus. “Algunos expertos que fueron parte del proyecto SAOCOM hoy participan en Focus. Creemos que es importante aprovechar las capacidades que tenemos y evitar que se fuguen”.


A través de tecnología de radar, los satélites FOCUS podrán detectar movimientos milimétricos de edificios, represas y puentes, lo que permitirá prevenir accidentes. Foto: Pablo Carrera Oser.

La iniciativa nació hace unos cinco años, en el marco de la materia Proyecto Integrador de la carrera de Ingeniería Espacial. Los estudiantes hicieron una exploración de mercado y descubrieron que había demanda de servicios de monitoreo de estructuras, pero a precios más accesibles. “Bajar costos permite democratizar la información satelital y monitorear muchos más blancos en todo el mundo”, señala Beccari. El objetivo comercial fijado por Focus es ambicioso: insertarse en el mercado nacional e internacional con precios disruptivos. Esto es, con un servicio que cueste hasta cincuenta veces menos.

Esta misión satelital es un proyecto público-privado en el que también participan empresas como SpaceSUR y Testa Brava, y para el que han colaborado instituciones como la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) y el Instituto Argentino de Radioastronomía (IAR), entre otras. Además, Focus ahora está en la búsqueda de diversos aliados para poder avanzar hacia etapas que requieren mayor inversión.

Ahí va el Capitán Focus por el espacio

La constelación Focus estará constituida por microsatélites de 150 kilos que orbitarán a 600 kilómetros de la Tierra. Plegados, tendrán un tamaño de 80 x 80 centímetros y, con sus paneles solares extendidos, llegarán a cinco metros de envergadura. Fabricar microsatélites no solo permite reducir costos de producción, sino también de lanzamiento: al ser pequeños y livianos, pueden ser lanzados como piggyback, es decir, como carga suplementaria de lanzadores que llevan satélites más grandes como carga principal.

Su carga útil —el corazón del satélite— es el Radar de Apertura Sintética (SAR) en banda X, que permite obtener imágenes de alta resolución. La ventaja de la tecnología de radar respecto a instrumentos ópticos de observación es que no depende de la energía solar ni de las condiciones atmosféricas para realizar mediciones, ya que posee una antena que emite ondas que pueden atravesar las nubes y obtener información en cualquier momento del día.


“Algunos expertos que fueron parte del proyecto SAOCOM hoy participan en Focus. Creemos que es importante aprovechar las capacidades que tenemos y evitar que se fuguen”, dice Erwin Beccari, docente de la UNSAM. Foto: Pablo Carrera Oser

La medición consiste en comparar las imágenes que genera el satélite sobre un mismo blanco cada cierta cantidad de días. “Ese solapamiento de imágenes puede alertarnos sobre desplazamientos en la infraestructura del orden de milímetros, pudiendo predecir deformaciones que, a simple vista, no se detectan. Esa comparación se hace usando una técnica que se llama interferometría diferencial”, explica Beccari.

Para poder ofrecer un monitoreo satelital a menor costo, el equipo apostó por un modelo conocido como top-down (de arriba hacia abajo), que se basa en acotar al máximo un proyecto para enfocarse en una necesidad concreta, lo que permite limitar los tiempos de producción: de ahí el nombre Focus. Se trata de encontrar el mínimo producto viable, en vez del mejor posible, y de trabajar a prueba y error aprendiendo con las fallas que aparecen en el camino. “Antes de empezar, le ponemos un costo determinado al producto final y luego vamos a la ingeniería para intentar llegar a eso. Hoy estos servicios están en el orden de cien mil dólares al año y nuestro precio objetivo es de dos mil dólares al año”, explica el ingeniero Roberto Yasielski, director de la Ingeniería Espacial.

El proyecto Focus apunta a diversos tipos de clientes. Un primer grupo estará compuesto por los early adopters, que son los usuarios actuales de este tipo de imágenes satelitales. En segunda instancia, buscarán expandir el servicio a empresas vinculadas a infraestructura (construcción, minería, etc.) y gobiernos que precisen hacer monitoreos para evitar catástrofes y reducir accidentes. Como un tercer nivel, buscarán abrir un nuevo mercado ofreciendo el servicio a las aseguradoras que deseen tener datos antes de asegurar bienes y obras. Además, esta tecnología también podría usarse en el ámbito de Defensa, en función de las necesidades estratégicas y soberanas de nuestro país.


Desde la carrera de Ingeniería Espacial, se busca involucrar a los estudiantes para que sean parte del desarrollo de un sistema complejo desde la gestación de la idea hasta la obtención de un producto con aplicación concreta. Foto: Pablo Carrera Oser

Con su nave de fibra hecha en la UNSAM

Recientemente, el equipo Focus finalizó la Fase 0, que consistió en realizar la demostración del concepto a través de diversos ensayos que se hicieron en la Universidad y en instalaciones del Instituto de Tecnologías en Detección y Astropartículas (ITeDA – UNSAM/CNEA/CONICET). Ahora están en Fase I, que implica construir un prototipo, constituir la start-up y buscar financiamiento para las próximas etapas.

“El ensayo que se hizo en Fase 0 fue en tierra, con un sistema de travelling que nos donó la CONAE. En la Fase I buscaremos poner el radar en un dron y obtener imágenes aéreas”, explica Beccari. «La idea es terminar esta etapa a fin de año». En tanto, la Fase 2 estará dedicada a la fabricación del satélite, que planean finalizar en 2026, y su puesta en órbita en 2027 (aunque los tiempos estarán supeditados al financiamiento que vayan consiguiendo). Finalmente, la Fase 3 abarcará la fabricación del resto de los satélites de la constelación, cuya cantidad mínima será tres y la máxima estará determinada por la demanda.

“Lo más fuerte de este proyecto es que, desde una universidad, estamos sacando un producto y eso va más allá de hacer I+D. Esto es muy disruptivo. Imaginate que solo las primeras camadas de la carrera lograron gestar un proyecto valuado en 80 millones de dólares. No existe en el país este nivel de ingenieros”, celebra Yasielski.


Parte del equipo de FOCUS. De izq. a der.: Enzo Garabito (estudiante), Alejandro Almela (ITeDA), Erwin Beccari (docente), Matías Aguirre (estudiante), Manuel García (ITeDA) y Víctor Astorga (estudiante). Foto: Pablo Carrera Oser.



Ucrania denuncia ante la ONU interferencias satelitales rusas




Históricamente, las guerras se han ganado en el campo de batalla. Sin embargo, como consecuencia de los avances tecnológicos, cualquier tipo de conflicto implica choques en áreas mucho más amplias.

Un ejemplo de esto sucede en la guerra de Ucrania, en donde la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) está revisando una serie de quejas de Kiev sobre interferencias satelitales que han afectado a los servicios de navegación y programas de televisión.

Según la Unión Europea, la interferencia ha golpeado las señales de GPS y podría poner en peligro el control del tráfico aéreo.

Además, en algunos casos, los canales de televisión infantiles fueron atacados, y en ellos se empalmaron imágenes violentas de la guerra en Ucrania.



La denuncia de Kiev ante el organismo de la ONU, fechada el 3 de junio, documentó al menos 11 casos de interferencia en los últimos tres meses que afectaron a decenas de programas de televisión ucranianos.

Por ello, el país dirigido por Volodímir Zelenski le pidió al organismo que “tome todas las medidas posibles para detener las intervenciones de la Federación Rusa”.

Francia, Suecia y Luxemburgo también enviaron quejas alegando “interferencias dañinas” en sus redes satelitales, aunque no apuntaron directamente contra Moscú.

La UIT, formada por 193 Estados miembros, es responsable de regular y coordinar el sistema mundial de satélites: su constitución le encomienda la coordinación de los esfuerzos para eliminar las interferencias perjudiciales.



domingo, 23 de junio de 2024

La Marina Mercante y la Defensa Nacional
por Jorge Alejandro Suárez Saponaro




​La guerra de Malvinas puso en valor la importancia de contar con una Marina Mercante nacional. Del lado británico disponer de una importante flota mercante, permitió el transporte de personal, materiales, combustible, y víveres. Las fuerzas navales desplegadas sumaron 53 a los que se sumaron 48 de la marina mercante. La Argentina también movilizó medios de la Marina Mercante para llevar a cabo tareas de transporte, abastecimiento, inteligencia y búsqueda y rescate.

En el conflicto de 1982, la Real Flota Auxiliar de la Marina británica movilizó casi medio centenar de buques mercantes que permitió trasladar fuerzas del ejército (por ejemplo, el Canberra trasladó a 3.000 soldados), helicópteros, aviones, llevar a cabo tareas de búsqueda y rescate, salvamento, abastecimiento, dragaminas, hospital, enlace, etc. Los astilleros británicos en pocos días llevaron a cabo las transformaciones necesarias en buques civiles para cumplir su cometido en apoyo a las fuerzas británicas. Si no fuera por disponer de una importante flota mercante, los británicos no hubieran podido llevar a cabo la operación de captura de Malvinas.

Estados Unidos

Estados Unidos en base a la experiencia de la Primera Guerra Mundial, por las dificultades para fletar buques civiles para apoyar las fuerzas enviadas a Europa, llevó en 1936 al Congreso aprobar la Ley de Marina Mercante en la que se establecía que los buques mercantes de bandera estadounidense deben ser propiedad de ciudadanos de Estados Unidos y tripulados por ciudadanos de dicho país. En 1952 fue aprobada una serie de enmiendas a dicha ley para promover la renovación de los buques de la flota mercante. El valor de la marina mercante y su vinculación con la defensa nacional, está plasmada por la Ley Jones de 1920, donde señala: “Es necesario para la defensa nacional y el desarrollo del comercio interior y exterior de los Estados Unidos que Estados Unidos cuente con una marina mercante (…) Capaz de servir como auxiliar naval y militar en tiempo de guerra o emergencia nacional.” Los cambios post Guerra Fría y el cambio del panorama estratégico, llevó a Estados Unidos a dejar de prestar la atención que merece a tal punto de 3.000 buques en 1960 se redujo en 2023 a solo 177 (la mayor parte de cabotaje nacional), cuando China el principal adversario geopolítico de Washington crece a pasos agigantados su presencia en los mares. En medios prestigiosos como la revista Forbes, en una nota de 2023(1) señala que el 90% del transporte militar en las diferentes crisis que intervinieron las FFAA estadounidenses fue realizado por mar. El Departamento de Transporte estimó en caso de una crisis prolongada, los medios tanto de la Armada como de la Marina Mercante, son insuficientes. La US Navy encaró un programa de tres años para modernizar sus buques de transporte y mejorar capacidades, dado la situación de la flota mercante.

La estrecha relación entre la Marina Mercante y la Defensa Nacional, para Estados Unidos está reflejado no solo por la Ley Jones, sino por disposiciones en las cuales los egresados de la Academia de Marina Mercante de los Estados Unidos –dependiente del Departamento de Transporte– son considerados oficiales de la Reserva Naval. El plan de carreras de la citada Academia prevé la posibilidad de acceder a puestos en la Guardia Costera como la Armada. Incluso durante el proceso de formación los futuros marinos mercantes de Estados Unidos reciben formación militar en dichas instituciones con prácticas en buques de guerra.


​Cadetes de la Academia de Marina Mercante de los Estados Unidos. Tienen formación militar.​

Francia

En diversos países la formación del personal de marina mercante interviene la Armada de Francia. En su momento la relación entre las fuerzas navales y la marina mercante era estrecha. En la década del 70 la COPAND (Comisión Permanente para la Adaptación de los Buques a la Defensa), la FAO (Fuerza Auxiliar Ocasional), la FMC (Fuerza Marítima Complementaria), la EOR Marmar (oficiales de reserva de la Marina Mercante escuelas de formación) eran estructuras y/u organizaciones sumamente activas. El fin del servicio militar obligatorio y los cambios post Guerra Fría, llevaron a que solo existieran de nombre. En 2005 el Jefe del Estado Mayor naval almirante Oudot de Dainville, a instancias del Instituto Francés del Mar impulsó el concepto del Clúster Marítimo Francés destinado a impulsar los intereses marítimos y su defensa, aglutinando a todos los actores del sector marítimo para trabajar en una verdadera estrategia nacional con fuerte respaldo del estado.

El citado Clúster permite una mayor interacción de la Armada francesa (o Marina Nacional como se la conoce) con diversos actores de la economía marítima, permitiendo intercambio de información, diseño de mecanismos que impulsen la seguridad marítima, proveer transporte marítimo a las fuerzas armadas, disponer de reservistas para la Armada, y establecer mecanismos para adaptar buques mercantes para necesidades militares. Es frecuente que alumnos de la Escuela Nacional Superior Marítima, responsable de formar personal de la Marina Mercante, entrenen en bases navales francesas, en el marco como reservistas militares.

La Acción del Estado en el Mar en Francia.

Brasil

En la región, la Marina Mercante es considerado un factor relevante para la Defensa Nacional. Brasil en 2002 aprobó la “Lei do Mar” con el objetivo de incentivar la flota mercante nacional. Esto tiene que ver con la defensa de los intereses nacionales, reducir la dependencia externa en materia de transporte marítimo e incrementar la proyección del país. La Marina brasileña entre sus misiones subsidiarias, está orientar y controlar la Marina Mercante. Esto tiene que ver con la interdependencia que hay entre los distintos componentes que integran el Poder Marítimo Nacional. A pesar de la reducción de la flota mercante nacional como consecuencia de las reformas de los 90, la estatal Petrobras a través de subsidiaria Transpetro, es el mayor armador de América Latina. La importancia de la Marina Mercante para los intereses nacionales se manifiesta con medidas de fomento, incentivo a la industria naval y la relación que tiene la Marina con la formación de marinos mercantes. La EFOMM –Escuela de Formación de Oficiales de la Marina Mercante– depende de la Armada, en su programa de capacitación, como Universidad, incluye el entrenamiento de los alumnos de la escuela como oficiales de la reserva naval.

Chile

En el caso de Chile, la Ley de Navegación señala en su Artículo 98: “Los capitanes y las dotaciones de todas las naves o artefactos navales forman parte de la Reserva Naval de la República, y se incorporarán al servicio activo en caso de guerra. Lo mismo podrá ocurrir en caso de conflictos internacionales que amenacen la seguridad del país, conmoción interna, calamidad pública, motín, paralización del transporte marítimo que afecte la normalidad de este servicio o cualquiera otra emergencia, debidamente calificada por el Presidente de la República. En estos casos, las naves y sus capitanes y dotaciones quedarán sometidas a las autoridades y normas legales y reglamentarias de la Armada Nacional.”

La ley de Movilización chilena prevé que en casos de emergencia que los buques mercantes de bandera chilena pueden ser puestos bajo autoridad militar. En 1994 la formación del personal de oficiales de marina mercante estaba en manos de la Escuela Naval Arturo Prat, para luego ser transferida a Universidades chilenas. Finalmente, en 2016 fue creada el Instituto Profesional Piloto Pardo, entidad de carácter civil para formar personal de marina mercante. Ello no impide que para la ley sean considerados parte de la Reserva Naval. Existe la voluntad de potenciar la marina mercante e incrementar el número de buques de bandera chilena, como la creación de nuevas empresas navieras con sede en Chile y con capitales del país, por medio de la reforma del Ley de Fomento de la Marina Mercante, generando un intenso debate en el sector.




Perú

Perú cuenta con la Escuela Nacional de Marina Mercante “Almirante Miguel Grau” donde sus egresados reciben el grado de guardiamarina de la reserva naval. Esta institución depende del Ministerio de Defensa y su director es un oficial superior de la Marina peruana. Vale la pena recordar que por la Ley de Marina de Guerra de Perú, la Marina mercante es considerada como parte de la Reserva Naval. La Marina mercante peruana es reducida, solo 18 buques. La liberalización del sector y una política tributaria desacertada, impide generar interés en el sector privado. El país requiere una marina mercante de mayor entidad para mejorar las comunicaciones de poblaciones costeras. La ley de fomento de la marina mercante, no cumplió con las expectativas.

Colombia

En el caso de Colombia, la Escuela Naval Almirante Padilla, en el plan de estudios, forman oficiales para la Marina Mercante creándose el curso de Pre Grado correspondiente de Ciencias Náuticas. La flota mercante dejó de existir en los años 90, quedando algunos operadores privados con un número reducido de buques de bandera colombiana. La Armada cuenta con la Dirección de Marina Mercante responsable de aplicar y controlar el cumplimiento de normas vinculadas a la marina mercante, aplicación de normas internacionales y nacionales sobre navegación, etc.


En base a los casos observados, no cabe duda que la Marina Mercante está vinculada con la Defensa Nacional. Recordemos que los marinos mercantes están protegidos por normas del Derecho Internacional Humanitario, teniendo antecedentes desde mediados del siglo XIX. En diversos conflictos armados, destacándose la Segunda Guerra Mundial, los beligerantes emplearon sus flotas mercantes en apoyo a las operaciones de sus fuerzas navales. La guerra de Malvinas, un caso que nos toca de cerca a los argentinos, las fuerzas británicas pudieron llevar a cabo el importante despliegue para recapturar las islas gracias a contar con una importante flota mercante y una industria naval desarrollada que permitió adaptar con rapidez buques para ser desplegados en apoyo a la Royal Navy. La flota mercante argentina también realizó una valiosa labor llevando a cabo misiones de transporte, búsqueda y rescate, información, etc. Estados Unidos gracias a contar con una marina mercante importante pudo transportar material de todo tipo en apoyo a las fuerzas desplegadas durante la Guerra del Golfo. Los años pasaron y la falta de políticas adecuadas, terminaron con la reducción de la flota mercante, siendo objeto de preocupación de la US Navy para contar con medios suficientes para apoyar despliegues de magnitud en caso de una crisis grave. En cambio, China si tomó nota de la importancia de una marina mercante para su seguridad nacional, construyendo la flota más importante en el mundo, además de tener el control de puertos y terminales en áreas de valor estratégico, incrementando sustancialmente la movilidad estratégica de la Armada de dicho país.

Buque ELMA Formosa.

Francia por medio del Clúster Marítimo, creó un espacio por el cual la Marina Nacional tiene la posibilidad de estar en contacto permanente con distintos actores de la industria marítima, lo que facilita su comunicación e intercambio de información para una eventual movilización. El entrenamiento militar del personal de marina mercante facilita su rápida integración bajo mando naval.

En el ámbito regional existe un interés en desarrollar sus flotas mercantes, destacando su valor para el desarrollo y defensa de los intereses nacionales. Brasil, Chile, Perú y Colombia consideran a los tripulantes de sus flotas mercantes como reservas de sus Armadas. En todos los casos existen marcos legales para expandir sus marinas mercantes.

Los avances en materia de construcciones navales permiten la instalación de diversos sistemas de armas, como defensa antiaérea, equipos de guerra electrónica, comando y control. Los británicos desarrollaron la posibilidad que los buques portacontenedores sean eventuales portahelicópteros, portaeronaves con aviones de despegue vertical, como de defensa antiaérea. El concepto SCADS C diseñado también por la Royal Navy, permite que buques mercantes tipo Ro Ro, se transformen en buques de asalto anfibio. El ejemplo es el buque RFA Argus, empleado en la guerra de Malvinas. En Suecia en su momento presentó el concepto “Double Eagle Mk II y III” que permite el uso de robots en buques pesqueros para funciones de dragaminas auxiliar.

Portacontenedores MV Contender Bezant, requisado por el gobierno británico para convertirlo en portaaeronaves. Posteriormente fue adquido por la Royal Navy y renombrado RFA Argus.

Los buques portacontenedores y los del tipo Roll On–Roll Off o Ro Ro ofrecen posibilidades diversas para el transporte de materiales para las FFAA. Buques mercantes pueden ser convertidos para realizar operaciones de reabastecimiento. Los barcos tipo ferry que transportan pasajeros y vehículos, son ideales para convertirlos en buques de asalto anfibio.

El valor de las flotas mercantes nacionales no solo reside en casos de conflicto armado, sino en situaciones de emergencia para apoyar operaciones humanitarias, evacuación de connacionales o apoyar el despliegue de fuerzas de mantenimiento de paz.

Los casos citados ponen en evidencia la conexión entre Defensa Nacional y Marina Mercante.

Argentina: promover la Marina Mercante fortalece la Defensa Nacional

La Argentina está de espaldas al mar. Esto fue señalado brillantemente por el almirante Segundo Storni en 1916. El 90% del comercio exterior se realiza vía marítima. Los conflictos que tuvo el país fueron de carácter marítimo: la Guerra del Brasil, Bloqueos Francés y Anglo Francés, Crisis del Beagle de 1978 y la Guerra de Malvinas de 1982. Estos elementos ponen en evidencia que estamos ante un país marítimo, idea que se ve reforzada con la aplicación de la Convención del Mar, traduciéndose en la incorporación de un valioso patrimonio equivalente a la Argentina continental.



Estamos ante un país con serios problemas de infraestructura, agregándose que la flota mercante nacional fue desguazada en los 90 a pesar de generar ganancias por más de US$ 200 millones. En la actualidad el cabotaje nacional se reduce a solo 18 buques, la mayor parte tanqueros. La ley de Marina mercante aprobada en 2017, parcialmente vetada, unido a cuestiones impositivas y falta de políticas ha impedido que Argentina impulse decididamente al sector. En 2021 el Foro de Intereses Marítimos Argentinos señaló que las pérdidas para el país por no contar con una flota mercante adecuada, rondaban los US$ 1.400 millones.

El desarrollo de una marina mercante nacional, incentivando especialmente al sector privado, generaría miles de empleos para astilleros, armadores, tripulaciones y servicios asociados con la actividad naviera. Desde la perspectiva de la Defensa Nacional se traduce en la posibilidad de contar con una importante reserva de buques y personal.

No cabe duda que es preciso actualizar el marco legal respecto a los Intereses Marítimos Nacionales y la Seguridad Marítima, donde sin ninguna duda requiere una autoridad de coordinación, agregándose la ausencia de un sistema que establezca un ordenamiento y planeamiento, que permita utilizar los recursos y medios existentes de manera óptima. En otros países, como Francia resolvieron la cuestión con el concepto de la “Acción del Estado en el Mar” abarca todas las actividades de vigilancia marítima, control del tráfico marítimo, protección de la pesca, Marina Mercante, la policía marítima, búsqueda y salvamento marítimo, seguridad de la navegación, control de la contaminación, etc. Se trata de operaciones que incluyen a la Marina Nacional (marina de guerra), Gendarmería Marítima, Asuntos Marítimos, Aduanas, Administración de Faros y Navegación. En otras palabras, existe una Estrategia Nacional en materia de seguridad marítima, que sustenta el ámbito operacional, en manos del llamado “Prefecto Marítimo” responsable de la coordinación de los organismos involucrados. Destacándose que el Prefecto, es un almirante en actividad. En otras palabras, el concepto de Defensa Nacional en el ámbito marítimo es mucho más amplio y no se limita simplemente a la defensa militar de los espacios fluviales y marítimos de jurisdicción nacional.

En lo referente a la Argentina podría seguirse el mismo camino, donde la Acción del Estado en el Mar se traduzca en una mayor presencia propia en espacios fluviales y marítimos. En Francia tienen un modelo interesante en materia de Acción del Estado en el Mar teniendo como antecedente al Prefecto Marítimo, que es un oficial de la Armada dependiente del Primer Ministro por medio del Secretario General del Mar, que en 1972 tenía competencias de coordinación en casos de emergencia, para derivar en 2005 promover un uso eficiente y coordinado de los medios de la Administración Marítima.

Desde la perspectiva francesa el concentrar en una misma autoridad naval las competencias marítimas civiles y militares tiene notables ventajas: en primer lugar, se asegura la coordinación de los medios navales en zona, ya que todos dependen de la misma autoridad naval y por ende son coordinados por un centro de operaciones, vital para mejorar los tiempos de reacción ante cualquier emergencia, y en segundo lugar, se evitan duplicidades de medios o llenando vacíos, mejorando la eficacia general del sistema. Esto permite que medios navales que tienen capacidades duales puedan ser aprovechadas al máximo. La demanda de sectores políticos de crear un Servicio de Guardacostas, fue respondido por el Ministerio de Defensa con la implementación del concepto “Función de Guardacostas” que engloba un conjunto de actividades vinculadas con la Acción del Estado en el Mar y la creación de un comité de coordinación entre las agencias involucradas, manteniendo el protagonismo de la Marina francesa.

La industria naval privada con los incentivos adecuados tiene gran potencial.

Argentina por medio de la extinta Secretaría de Intereses Marítimos buscó implementar una “Acción del Estado en el Mar” en el marco de políticas de incentivo al cabotaje nacional y la industria naval. Consideramos pertinente, en el ámbito de la Jefatura de Gabinete crear el Consejo Federal de Intereses Marítimos y Fluviales, un organismo interagencial para el diseño de políticas del sector, siendo la secretaría del consejo, la Secretaría de Intereses Marítimos por crearse.

En el marco de una verdadera estrategia nacional en relación al mar, es indispensable contar con centros de formación profesional adecuados. Las Escuelas de Marina Mercante y su relación histórica con la Armada, no obedece a una mera “tradición”. Se forman cuadros de reserva para dicha fuerza militar(2) y genera las condiciones para ser empleados en una eventual movilización. Existen variados ejemplos en la región como fuera de ella, como hemos visto anteriormente.

En nuestro país la marina mercante y sus tripulaciones tuvieron un valor relevante durante el conflicto de 1982, no solo en misiones de transporte, sino de búsqueda y salvamento, minado, abastecimiento de combustible, control del tráfico marítimo e inteligencia. La reducción de los medios navales que incluye un Comando de Transporte Navales con recursos sumamente exiguos y anticuados, requiere sin ninguna duda tener una flota mercante que eventualmente pueda brindar apoyo a las fuerzas armadas en caso de una crisis, no solo el riesgo de un conflicto armado, sino en una emergencia nacional que requiera el apoyo a la comunidad o llegado el caso el despliegue de fuerzas en operaciones de mantenimiento de paz.

ARA Canal Beagle perteneciente al Comando de Transportes Navales de la Armada Argentina.

El veto parcial de la Ley de Marina Mercante sancionada en 2017, por medio de un decreto de necesidad y urgencia de 2018, al eliminar el fondo de incentivo para la industria naval, ha impedido al sector privado la reconstrucción de la flota mercante nacional. Resulta imprescindible terminar con el veto parcial y generar una política que permita la reconstrucción de la marina mercante argentina. En lo referente a las necesidades a cubrir para la Armada, el incentivo estará orientado para que la flota mercante construya estos tipos de buques:

  • Buques tanque.
  • Portacontenedores Roll on / Roll off.
  • Buques de carga en general y tipo bulk carrier.

Ello no impedirá que la Armada reemplace los veteranos buques Costa Sur por el proyecto desarrollado por Astilleros Río Santiago, del tipo portacontenedores Roll On/Roll Off de 161 metros de eslora, con capacidad de llevar más de 200 contenedores, 90 camiones, etc. Por sus características podrá realizar operaciones comerciales, lo que amortizará la inversión que se realice. El posible desarrollo de la industria petrolera como de la actividad minera en la Patagonia, genera la posibilidad que los estados provinciales apoyen una línea de fomento para el traslado de cargas, sin costos asociados de operadores privados, dado que las tripulaciones serían tripulaciones de la Armada. Su papel será complementar al sector privado.

Escuelas de la Marina Mercante​

El mantenimiento de las Escuelas de la Marina Mercante en la órbita de la Armada, no solo es por un mandato de la Ley 22.392, sino por las ventajas en contar con instituciones que forman reservistas navales que facilita la interoperatividad en caso de movilización. La creación de la Universidad de Defensa Nacional y la incorporación de la Facultad de la Armada, antes Instituto Universitario Naval, dejó a las Escuelas de Marina Mercante en una suerte de limbo administrativo, especialmente las Escuelas Nacional de Pesca y la Escuela Nacional Fluvial. Nosotros consideramos pertinente:

  • Los egresados de las Escuelas de Marina Mercante serán parte de la Reserva Naval.
  • El personal de cadetes recibirá formación militar incluyendo embarcos en medios de la Armada Argentina.
  • Adquisición de embarcaciones para adiestramiento.
  • Las titulaciones de las Escuelas Nacional Fluvial y de Pesca serán tecnicaturas terciarias y se integrarán en la UNDEF dentro de la Facultad de la Armada.

El Consejo Federal de Pesca por medio del Acta 8/2015 aprobó el Programa de Apoyo a la Formación de Personal de Pesca. Herramienta que puede permitir obtener recursos para la Escuela Nacional de Pesca. Recordemos que el Artículo 32 de la Ley 27419, prevé que el Poder Ejecutivo Nacional debe crear un Fondo Nacional para financiar la formación de personal de marina mercante y la adquisición de medios para su entrenamiento. Este fondo se financiaría por los recursos provenientes del flete generado por las embarcaciones extranjeras que operen en puertos, terminales marítimas o fluviales o en aguas jurisdiccionales argentinas, mediante excepciones previstas en el artículo 6º de la Ley Nº 19491/44, Ley Nº 12980 modificado por la Ley Nº 27445, estará sujeto al pago de un gravamen equivalente al 0,01% de su valor, con destino al mismo. El Fondo también se integrará con los montos provenientes de las multas establecidas en el Artículo 48º de la misma normativa y modificado por Ley 26778.



La Marina Mercante Nacional. Un activo estratégico

El ejercicio de la soberanía en espacios marítimos y fluviales de jurisdicción nacional, se materializa por distintos mecanismos, que van desde la explotación económica y la presencia de buques de pabellón nacional.

En los años 90 se tomaron medidas contrarias al interés nacional, destacándose el desmantelamiento de la competitiva empresa de marina mercante ELMA, cierre de astilleros y la pérdida de miles de empleos. Desde la perspectiva de la Defensa Nacional, la Armada se quedó sin la posibilidad de contar con una flota de reserva que permitiera movilizar recursos en caso de una crisis.

La reconstrucción de la Marina Mercante permitirá contar con una reserva de medios que pueden ser de utilidad para movilizar medios y personal de las Fuerzas Armadas, no solo en una situación de riesgo de conflicto armado, sino para despliegues fuera del territorio nacional, evacuación de connacionales y de ciudadanos de países aliados en el extranjero.

En este proceso proponemos incentivar la industria naval, a los armadores nacionales, con el objetivo de disponer de determinado tipo de buques que puedan ser útiles para una eventual movilización nacional. Las escuelas de marina mercante siguen bajo autoridad de la Armada formando profesionales y cuadros de reserva. Incluso proponemos un régimen de financiamiento para formar las futuras tripulaciones de la marina mercante nacional.


(2) Los alumnos de la Escuela de Náutica en las invasiones británicas fueron parte del Tercio de Gallegos en la defensa de Buenos Aires