En pleno ajuste a la CONAE, Milei se comprometió a realizar “exploraciones espaciales conjuntas” con Estados Unidos
La CONAE, el organismo de ciencia especializado en desarrollo aeroespacial padece un ajuste sin precedentes. El acuerdo con Trump para la exploración del espacio ultraterrestre.

El gobierno argentino, celebró, el jueves 27 de marzo un acuerdo con Estados Unidos en el que “se compromete” a realizar investigaciones en el espacio exterior, con el objetivo de mejorar la vida en la Tierra.
Fue el resultado de la ronda de consultas espaciales, en un programa que se enmarca “en la buena relación bilateral que mantienen las administraciones de Javier Milei y Donald Trump”.
Dicha gestión selló el compromiso de ambos de Estados para trabajar juntos en operaciones en el espacio. En ellas involucrarán a las agencias espaciales gubernamentales de los dos países, y también la colaboración de empresas del sector privado.
“Los Gobiernos de los Estados Unidos de América y de la República Argentina se complacen en reafirmar su duradera asociación y compromiso con el uso responsable y pacífico y la exploración del espacio ultraterrestre, luego de una serie de consultas espaciales bilaterales llevadas a cabo en Washington D.C., del 11 al 13 de marzo de 2025″, explicó un comunicado difundido por el servicio exterior norteamericano.
Claro que, teniendo en cuenta el brutal desfinanciamiento del sistema científico argentino a manos del propio Milei, queda claro que es muy difícil que avance ese acuerdo.
Es que, la inversión estatal en ciencia y tecnología en Argentina tocará en 2025 un piso histórico luego de la decisión del gobierno de Javier Milei de dejar sin efecto la Ley de Financiamiento del sistema de Ciencia y Tecnología, votada en 2021 por el Congreso, y que fijaba el cumplimiento de una pauta escalonada de inversión pública que debía alcanzar el 1% del Producto Bruto Interno (PBI) en 2032.
Para la foto
Al respecto, Periferia dialogó con Emiliano Baum, ingeniero de Software de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales quien explicó que el acuerdo, en el que Argentina participará con un CUBESat, “es parte de las acciones de cooperación históricas“. Baum asegura que “en CONAE venimos funcionando de manera cada vez más degradada porque nos vamos quedando sin antenas en el segmento terreno. Las señales de los satélites se transforman en datos y esas señales se las damos a otro sector que genera información. El inicio de ese camino es cada vez más chico, tenemos menos sistema. Así, la CONAE pierde parte de su existencia y de su peso internacional, los satélites SAOCOM están promediando su vida útil, el nuevo satélite (ARSAT SG1) está ralentizado”, explicó Baum.
“CONAE está con el mismo presupuesto de 2023, con la inflación que hubo, y no hace falta ser economista para entender que el organismo funciona de manera degradada”, dijo Baum a Periferia. El especialista en Software sostuvo que “el proyecto de acceso al espacio está en pausa, se fue mucho personal y gente capacitada. Eso se explica porque desde que asumió Milei nosotros perdimos un 45% de nuestros salarios en términos reales“.
“Desde el gobierno nacional dicen que van a participar en un proyecto internacional pero es para la foto”, concluye Baum.
Un acuerdo de difícil implementación en un país para el que la ciencia no es prioridad
Este camino, si bien aún no se transitó, es casi seguro que será así teniendo en cuenta que para el Gobierno el sector científico no es una prioridad. Como muestra basta recordar que el propio Javier Milei llamó “canallas” y “casta” a los investigadores y las investigadoras del CONICET.
La norma se cumplió hasta 2023, cuando asumió Javier Milei la presidencia de la Nación y fue allí que la inversión en ciencia y tecnología, a contramano de la orientación de cualquier país desarrollado, comenzó a descender mes a mes.
Así, la Función CyT (FCyT) del Presupuesto de la Administración Pública Nacional (APN) muestra una caída de su Crédito Vigente (CV) del 21,8% real contra 2024, año en el que había declinado un 32,9% contra el año precedente. La Función, que es la que define con qué recursos contará el sistema científico, pierde así 47,2 puntos en el bienio.
Piso histórico de inversión en ciencia
Para el año en curso se proyecta un rebote estadístico de la actividad económica del 3,7%. En este contexto el Presupuesto Vigente de la APN declina un 19,0% en términos reales, tras caer un 26,1% en 2024. Con ello, la FCyT representaría en 2025 tan solo 0,157% del PBI (0,302% en 2023; 0,206% en 2024), un mínimo absoluto en la serie histórica.
El crédito vigente de la Función Ciencia y Técnica se ubica así a 55,1 puntos reales de su máximo de 2015 y el del CONICET marca una caída del 43,0% en términos reales de su presupuesto respecto de hace diez años.
Qué son los Acuerdos Artemis
El 27 de julio de 2023, la NASA celebró la decisión de Argentina de adherir a los Acuerdos Artemis, un pacto internacional para promover la cooperación pacífica en la exploración espacial.
Bill Nelson, administrador de la NASA, destacó en aquella oportunidad que Argentina se convirtió en el país número 28 en firmar los acuerdos, que tienen como objetivo garantizar una exploración responsable del espacio, incluyendo la asistencia mutua en caso de problemas y la prevención de interferencias en actividades espaciales.
Los Acuerdos Artemis, que fueron establecidos en 2020, son fundamentales para el Programa Artemisa, que planea llevar astronautas de regreso a la Luna y, eventualmente, a Marte. Nelson expresó su gratitud por el compromiso argentino, señalando la importancia de este tipo de cooperación internacional para el avance de la ciencia y la tecnología.
La intervención en aquel momento estuvo a cargo del presidente Alberto Fernández, quien durante su encuentro con Nelson resaltó la relevancia de esta alianza para el desarrollo del programa espacial argentino, en colaboración con la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE).
El entonces ministro de Ciencia y Tecnología, Daniel Filmus, había destacado que Argentina es uno de los pocos países del hemisferio sur con la capacidad de desarrollar políticas satelitales propias. Esta integración a los Acuerdos Artemis abría nuevas posibilidades para la cooperación internacional en ciencia espacial.