Lo mejor de la tecnología de Rusia debe trabajar en la exploración espacial

En enero de este año, Víctor Jartov fue nombrado Diseñador Jefe y Director General de la Empresa Estatal de Desarrollo Científico Lavochkin (NPOL), donde se diseñan y fabrican observatorios y robots espaciales, aparatos de observación y sondeo de la Tierra, naves interplanetarias e impulsores. Su primera entrevista como director de NPOL Víctor Jartov la ha concedido a RIA Novosti.

-¿Qué ingenios están listos para ser lanzados a misiones espaciales cerca a la órbita terrestre y a planetas más lejanos?

-En primer lugar, la plataforma unificada Navigator. En su bloque base con propulsores autónomos y sistemas de navegación, es posible incorporar satélites de muchas aplicaciones como el estudio de la meteorología y la ecología, sondas espaciales, aparatos de monitoreo. En el proyecto Navigator han sido usadas exclusivamente las tecnologías, piezas y soporte lógico más modernos. Gracias a este carguero lograremos dar un impresionante salto hacia adelante: por regla general, en los nuevos equipos espaciales se utiliza sólo un 20 ó 30% de las tecnologías anteriores.

Para este año está previsto el lanzamiento del satélite meteorológico de segunda generación Elektro-L y el observatorio de astrofísica Spektr-P. Ambos japaratos se acoplarán a la plataforma Navigator y ambos están en la recta final de sus preparativos. Como hemos tenido que introducir correcciones en ambos proyectos después de los ensayos, lanzaremos aquel que antes esté preparado, y probablemente antes del Año Nuevo.

Aparte de eso, en 2010 ha de ser lanzado el aparato "Zond-PP", destinado a medir la humedad del suelo y la salinidad del agua de los océanos. Fue montado en otro proyecto innovador: la microplataforma "Karat". Estamos hablando de un "mini transportador", capaz de cambiar el ángulo del satélite instalado, lo que permite captar y estar siguiendo durante media hora un objeto determinado o, por ejemplo, la situación en la Tierra.

El primer vuelo del "Karat" ha de suponer nuestra entrada en el mercado de la puesta en órbita de satélites.

-En distintas órbitas están posicionados cerca de 30 telescopios espaciales de distintos países. De los "sucesores" de nuestros observatorios de astrofísica se lleva hablando mucho tiempo, pero no se llega a ponerlos en órbita. ¿Por qué?

-Es cierto, la construcción de tres observatorios "Spektr" arrancó en la NPOL hace nada más y nada menos que 20 años. No obstante, la falta de recursos económicos, las tecnologías que se hicieron obsoletas y el plazo de garantía que se estaba reduciendo, nos obligaron a renunciar a aquellos modelos. Tuvimos que empezar desde cero en todos los aspectos, y eso que la financiación fue reanudada hace tan sólo 2 ó 3 años.

Ahora se está llevando a cabo la instalación del telescopio "Spektr-R". Su antena de diez metros de diámetro tiene una superficie que ha sido diseñada con una precisión de milímetros, lo que le permite enfocar cualquier rincón del Universo. Combinado con las antenas instaladas en la Tierra, podremos disponer de un sistema de observación de las estrellas y galaxias altamente sensible. La responsabilidad es abrumadora, porque Rusia apenas podría permitirse construir otro telescopio igual.

En el año 2012 procederemos a instalar el complejo "Spektr-RG", dotado de dos telescopios espaciales de rayos X y en 2014 el "Spektr-UF", un equipo único, capaz de captar la radiación ultravioleta de otros mundos, gracias a que su telescopio tendrá un espejo principal de 170 cm de diámetro.

- Se dan diferentes explicaciones al hecho de que fuera pospuesto a 2011 el lanzamiento de la sonda automática interplanetaria "Phobos-Grunt" con destino al satélite de Marte, prevista para el año pasado. Por supuesto, a nadie le gustaría volver a pasar por los fracasos de los dos aparatos "Phobos" que tuvieron lugar a finales de los 80, ni tampoco perder un equipo tan valioso, como lo fue "Mars-96". ¿Cuándo será lanzado entonces el "Phobos-Grunt"?

-Es un proyecto deslumbrante, que se está realizando en un marco de cooperación internacional. Realizar durante el vuelo un estudio de Marte, investigar el propio satélite Phobos después de su aterrizaje, así como poder traer las muestras del suelo significaría un avance espectacular de nuestro conocimiento sobre el origen de los cuerpos celestes. El lanzamiento está planeado para noviembre de 2011, época en la que los planetas se situarán de manera favorable. Intentaremos aprovechar el tiempo al máximo para asegurarnos un exitoso cumplimiento de esta complicadísima misión. El nuevo aparato está basado en soluciones técnicas innovadoras que no han sido sometidas a pruebas de vuelo. Es por ello por lo que estamos ensayando una y otra vez aquí, en Tierra.

La parte inicial de la misión, es decir, el paso de la órbita terrestre a la ruta hacia el Marte y el "Phobos" correrá a cargo de un aparato ya probado en la práctica, la unidad de aceleración "Fregat", que en los últimos 10 años ha funcionado sin fallo alguno en casi 20 ocasiones. Nuestro objetivo consiste en fabricar en serie toda una flota de estos aparatos.

Diría incluso que este año junto con el próximo serán para la NPOL "el momento de la verdad". Todos los nuevos proyectos que hemos hecho tienen que ponerse en órbita.

-¿Se ha producido algún cambio en nuestra política con respecto a la exploración lunar después de los vuelos de sondas y otros aparatos a la Luna de EE.UU., China, Japón y la India?

-Estamos llevando a cabo un programa completo en colaboración con el Instituto de Exploración Espacial de la Academia de Ciencias. En una primera etapa está previsto coordinar las investigaciones que se desarrollan en el marco del programa ruso-indio "Luna Resurs" y las que tienen lugar para nuestro programa "Luna Glob". De acuerdo con el proyecto que tenemos con nuestros socios indios, un cohete indio será el que ponga en la órbita lunar el módulo de aterrizaje ruso. Éste, por su parte, llevará hasta la superficie de la Luna un robot explorador indio. El lanzamiento está previsto para 2013.

Por lo que se refiere al programa "Luna Glob" estaba previsto dejar caer desde la órbita a gran velocidad equipos científicos que debían penetrar cual taladros en la superficie lunar para tomar muestras del suelo a gran profundidad. Pero se ha llegado a la conclusión de que el riesgo era demasiado alto porque no teníamos la seguridad de alcanzar los objetivos y menos de alcanzarlos en plazo. Por ello, se ha decidido realizar un aterrizaje controlado del módulo que depositará todo el equipo necesario para el estudio de la superficie lunar. El lanzamiento está también previsto para 2013.

Por lo que se refiere al aterrizaje y al despegue de aparatos no tripulados en la Luna, NPOL tiene una experiencia que me atrevería a calificar de única. Pero hay que renovarla y darle uso. Es necesario estudiar la posibilidad de establecer en la Luna estaciones de observación astrofísica y bases permanentes habitadas. En una palabra, se trata de preparar la vuelta del hombre a la Luna para trabajar allí.

-Como ocurre en otros sectores de la economía, el sector espacial tiene un importante talón de Aquiles en los recursos humanos: existe un auténtico vacío en el grupo de 30-45 años. Es decir, trabajan bien diseñadores y técnicos ya en una edad madura (que son los que tienen experiencia), bien personas recién diplomadas de centros universitarios, pero sin experiencia ninguna. ¿Qué medidas se están tomando para atraer sangre nueva?

-Un 10% de nuestra plantilla (que está formada por 5.000 personas) son trabajadores de más de 70 años. Estamos intentando recortar personal en esta franja de edad sin perjudicar a las personas ni la marcha de la empresa. Hay, por otro lado, 850 especialistas de menos de 30 años; sólo el año pasado empezaron a trabajar 300 de ellos. La edad media de los trabajadores de plantilla es de 48 años.

La solución de estos problemas pasa por hacer atractivos para la juventud, incluso para los niños, los temas tecnológicos y la creatividad, y salvarlos de la ludopatía.

Con este objetivo, organizamos círculos de interés en las escuelas; existe un liceo especializado en temas aeroespaciales; seleccionamos estudiantes para la escuela de construcción de maquinaria para el sector aeroespacial, para el Instituto de Aviación de Moscú (MAI). Pagamos a los estudiantes un complemento importante a sus becas. En la misma NPOL funciona una facultad del MAI, donde se organizan las prácticas.

Nuestra estrategia consiste en acentuar la motivación del personal. Estamos empezando a desarrollar un programa de créditos hipotecarios para los trabajadores con futuro en la empresa y confiamos en poder empezar a construir viviendas para nuestro personal.

En la ciudad de Kaluga (a unos 200 kilómetros al suroeste de Moscú) hay una filial nuestra donde trabajan licenciados de la moscovita Escuela de Altos Estudios Técnicos Nikolai Bauman. Y tienen que hacerlo en un edificio construido en 1856, donde fueron reparados multitud de veces el techo y los suelos. Allí te puedes encontrar a un chaval delante de un ordenador y, si le preguntas qué está haciendo, te puede responder algo así como: "Estoy trabajando en el instrumental óptico y en el mecanismo de manipulación de objetos para el programa Phobos-Grunt"

Hemos propuesto al alcalde de Kaluga reconstruir este caserón, de modo que pueda entrar mucha más luz a través de los ventanales. Se podría además atraer a turistas que podrían ver cerca del Museo de Konstantin Tsiolkovski pequeños y nano-satélites.

Fuente: RIA Novosti