Preparan un fastuoso funeral para el líder de la Secta Moon
Se autoproclamaba como el "mesías surcoreano". Fundó la Iglesia de la Unificación a la que transformó en un imperio multimillonario. En 1995 se reunió con Carlos Menem.
AFP/Télam
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| Se esperan miles de personas en el funeral del reverendo Moon previsto para el 15 de setiembre. (AP) |
La Iglesia de la Unificación prepara los
funerales de su fundador, Sun Myung Moon, fallecido en Corea del Sur a
los 92 años, para unas celebraciones en una pequeña localidad surcoreana
aislada a la que se espera la asistencia de decenas de miles de
personas.
En el gigantesco complejo donde se encuentra el cuartel general de la Iglesia, conocida también como la Secta Moon, en Gapyeong, al Este de Seúl, tendrán lugar el 15 de setiembre los funerales del autoproclamado "mesías surcoreano" que fundó la controvertida Iglesia de la Unificación y la convirtió en un imperio multimillonario.
Moon, que había sido hospitalizado el mes pasado por una neumonía, falleció el domingo. La Iglesia había informado el viernes que padecía una disfunción crítica de sus órganos vitales y el sábado los médicos hablaban de un "estado irreversible".
El cuerpo de Moon ha sido transportado a un edificio de mármol blanco, sobre una colina que domina el complejo. "Era nuestro padre y el mesías de Dios. Su cuerpo ha sido dibujado por Dios y pensábamos que viviría 100 años", declaró un colaborador suyo.
La organización religiosa que fundó en 1954, después de haber sido rechazado por las iglesias protestantes coreanas, es una de las más controvertidas del mundo y muchos países la consideran una secta. Estaba presente en varios países de América Latina, como Brasil, donde posee más de 40 terrenos (cerca de 80.000 hectáreas) en Mato Grosso do Sul, en la frontera con Paraguay.
En la Argentina, en tanto, fue recibido por el presidente Carlos Menem en 1995 y fundó el periódico "Tiempos del Mundo".
Durante cierto tiempo, fue considerado el surcoreano más famoso, pero hoy no hay muchos jóvenes compatriotas que puedan decir quién es al escuchar su nombre.
La merma de popularidad se debía, entre otras cosas, a la importante reducción de sus seguidores en Europa occidental y en Estados Unidos donde, en la década del 70, fue uno de los líderes religiosos más controvertidos y en 1982 fue condenado a 18 meses de prisión por evasión de impuestos.
El movimiento es célebre por sus ceremonias nupciales que reagrupan a miles de parejas, la última de ellas organizada en Corea del Sur en marzo de este año. Afirma que evangeliza en unos 200 países y su vasto imperio económico abarca desde el sector de la construcción a la educación, pasando por la alimentación, la ingeniería, la prensa e incluso una fábrica de automóviles en Corea del Norte.
Moon nació en una familia de agricultores de lo que hoy es Corea del Norte. El reverendo dijo que a los 15 años tuvo una visión de Jesús que le encomendó que completara la misión interrumpida por la crucifixión. Su organización reivindica tres millones de seguidores en unos 200 países que lo llaman "el Verdadero Padre" y lo consideran como "el único Mesías de la historia humana".
El reverendo tenía 14 hijos y muchos de ellos trabajan en su imperio. Hyung Jin Moon, el menor de los siete hijos varones, le sucedió en 2008 con 28 años de edad al frente del movimiento.
En el gigantesco complejo donde se encuentra el cuartel general de la Iglesia, conocida también como la Secta Moon, en Gapyeong, al Este de Seúl, tendrán lugar el 15 de setiembre los funerales del autoproclamado "mesías surcoreano" que fundó la controvertida Iglesia de la Unificación y la convirtió en un imperio multimillonario.
Moon, que había sido hospitalizado el mes pasado por una neumonía, falleció el domingo. La Iglesia había informado el viernes que padecía una disfunción crítica de sus órganos vitales y el sábado los médicos hablaban de un "estado irreversible".
El cuerpo de Moon ha sido transportado a un edificio de mármol blanco, sobre una colina que domina el complejo. "Era nuestro padre y el mesías de Dios. Su cuerpo ha sido dibujado por Dios y pensábamos que viviría 100 años", declaró un colaborador suyo.
La organización religiosa que fundó en 1954, después de haber sido rechazado por las iglesias protestantes coreanas, es una de las más controvertidas del mundo y muchos países la consideran una secta. Estaba presente en varios países de América Latina, como Brasil, donde posee más de 40 terrenos (cerca de 80.000 hectáreas) en Mato Grosso do Sul, en la frontera con Paraguay.
En la Argentina, en tanto, fue recibido por el presidente Carlos Menem en 1995 y fundó el periódico "Tiempos del Mundo".
Durante cierto tiempo, fue considerado el surcoreano más famoso, pero hoy no hay muchos jóvenes compatriotas que puedan decir quién es al escuchar su nombre.
La merma de popularidad se debía, entre otras cosas, a la importante reducción de sus seguidores en Europa occidental y en Estados Unidos donde, en la década del 70, fue uno de los líderes religiosos más controvertidos y en 1982 fue condenado a 18 meses de prisión por evasión de impuestos.
El movimiento es célebre por sus ceremonias nupciales que reagrupan a miles de parejas, la última de ellas organizada en Corea del Sur en marzo de este año. Afirma que evangeliza en unos 200 países y su vasto imperio económico abarca desde el sector de la construcción a la educación, pasando por la alimentación, la ingeniería, la prensa e incluso una fábrica de automóviles en Corea del Norte.
Moon nació en una familia de agricultores de lo que hoy es Corea del Norte. El reverendo dijo que a los 15 años tuvo una visión de Jesús que le encomendó que completara la misión interrumpida por la crucifixión. Su organización reivindica tres millones de seguidores en unos 200 países que lo llaman "el Verdadero Padre" y lo consideran como "el único Mesías de la historia humana".
El reverendo tenía 14 hijos y muchos de ellos trabajan en su imperio. Hyung Jin Moon, el menor de los siete hijos varones, le sucedió en 2008 con 28 años de edad al frente del movimiento.
En la Argentina, de la dictadura al menemismo
Por Sergio Rubín - CC - Especial para Los Andes
El visceral anticomunismo del reverendo Moon
fue el gran disparador de su relación con la Argentina a partir de la
instauración de la última dictadura militar. Si bien la secta Moon llegó
al país meses antes del golpe militar de 1976, fue en 1979 cuando
comenzó a profundizar su accionar político de la mano del general Genaro
Díaz Bessone, secretario de Planeamiento, y el general Guillermo Suárez
Mason, comandante del Primer Cuerpo de Ejército y luego interventor en
YPF.
Moon también logró establecer por aquellos años una estrecha relación con un alto miembro de la Iglesia Católica, el entonces arzobispo de La Plata, Antonio Plaza, también caracterizado por su fuerte anticomunismo, capellán de la policía bonaerense en tiempos del temible Ramón Camps. También con uno de los hombres de su entorno e igual perfil ideológico, Nicolás Argentato, rector de la Universidad Católica de La Plata. Aquellos peculiares lazos derivaron en que la universidad le otorgara a Moon en 1985 el doctorado Honoris Causa.
Con la llegada de la democracia, la presencia de la secta Moon en el país se debilitó. Sin embargo, en el marco de un complot contra su estabilidad que el gobierno de Raúl Alfonsín denunció, el ministro de Defensa, Roque Carranza, dijo que la “comunidad” de Moon estaba implicada.
Volvió a cobrar influencia con el triunfo de Carlos Menem, con quien se reunió en más de una ocasión durante sus visitas al país. Paralelamente, la secta fue adquiriendo propiedades y campos en el país, sobre todo en Entre Ríos y Corrientes. En la localidad correntina de Paso de la Patria contaba con una quinta en donde a Moon le gustaba descansar y salir de pesca por el Paraná.
La secta realizaba las compras a través de diversas firmas que llevaron a sospechar que podrían ser sociedades fantasmas que podrían estar lavando dinero.
Moon también logró establecer por aquellos años una estrecha relación con un alto miembro de la Iglesia Católica, el entonces arzobispo de La Plata, Antonio Plaza, también caracterizado por su fuerte anticomunismo, capellán de la policía bonaerense en tiempos del temible Ramón Camps. También con uno de los hombres de su entorno e igual perfil ideológico, Nicolás Argentato, rector de la Universidad Católica de La Plata. Aquellos peculiares lazos derivaron en que la universidad le otorgara a Moon en 1985 el doctorado Honoris Causa.
Con la llegada de la democracia, la presencia de la secta Moon en el país se debilitó. Sin embargo, en el marco de un complot contra su estabilidad que el gobierno de Raúl Alfonsín denunció, el ministro de Defensa, Roque Carranza, dijo que la “comunidad” de Moon estaba implicada.
Volvió a cobrar influencia con el triunfo de Carlos Menem, con quien se reunió en más de una ocasión durante sus visitas al país. Paralelamente, la secta fue adquiriendo propiedades y campos en el país, sobre todo en Entre Ríos y Corrientes. En la localidad correntina de Paso de la Patria contaba con una quinta en donde a Moon le gustaba descansar y salir de pesca por el Paraná.
La secta realizaba las compras a través de diversas firmas que llevaron a sospechar que podrían ser sociedades fantasmas que podrían estar lavando dinero.
Fuente: Los Andes Online
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