Impulso para el auto eléctrico
Un proyecto de ley busca fomentar la fabricación de vehículos eléctricos a través de incentivos fiscales para la producción local. La iniciativa coincide con el avance de diversos desarrollos en la Argentina.
por Matías Alonso

El proyecto de ley 2929-D-14, de Vehículos Eléctricos y Alternativos, propone incentivos fiscales y beneficios aduaneros para el desarrollo del transporte eléctrico en la Argentina y propone reducir en un 25 por ciento los aranceles de importación de vehículos, piezas, baterías y componentes de estaciones de recarga relacionados con la movilidad eléctrica o híbrida. El proyecto, presentado por el diputado Héctor Baldassi (PRO), impulsa la exención por 15 años de los impuestos a las Ganancias e IVA para los vehículos de este tipo fabricados en la Argentina con al menos el 50 por ciento de piezas locales. Además, busca regular y fomentar iniciativas privadas y públicas de producción nacional de vehículos de motorización eléctrica, que actualmente enfrentan barreras legales para ser comercializados y circular por calles y rutas argentinas. 

Chery QQ, que tiene un precio FOB de 6.800 dólares, es un auto eléctrico económico para ámbitos urbanos.

Una de las características de los automóviles eléctricos es que son mucho más eficientes que los que usan motores de combustión, por lo que tienen un saldo ambiental positivo. Recientemente se conoció el proyecto Sudaca, para producir una bicicleta de motorización eléctrica con baterías de plomo-ácido. También la marca de bicicletas eléctricas china Lucky Lion presentó una bicicleta eléctrica con motor argentino de Ar Motors y baterías de litio, con un costo de entre 12.000 y 18.000 pesos. Pero es necesario que cambie la normativa para homologar vehículos teniendo en cuenta la posibilidad de desarrollo local y la posible entrada de productos importados. En otros países es muy común ver autos eléctricos, sobre todo en ámbitos urbanos, como el modelo chino Chery QQ, que tiene un precio FOB (es decir, en el puerto de llegada y antes de los gastos de patentamiento e impuestos) de 6.800 dólares.

Existen múltiples iniciativas de autos eléctricos en la Argentina. En Córdoba, un proyecto llevado a cabo por la empresa I-D-Tec y radicado dentro del campus de la Universidad Católica de Córdoba se basa en el desarrollo de un auto eléctrico con motores de alta eficiencia y baterías de litio originarias de China, pero con diseño propio. Se trata de un automóvil para dos pasajeros y espacio para sumar una silla de bebé o algunos bolsos. El auto tiene dos motores acoplados a las ruedas traseras, está construido en fibra de vidrio inyectada y ya finalizó el desarrollo de la matricería para hacer la producción en serie. El primer objetivo de la empresa es producir 25 autos en los dos primeros años. Es un proyecto financiado a través del FONARSEC de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica del Mincyt y además ha logrado conseguir financiamiento del Banco Mundial por 2,5 millones de pesos. Estiman que el automóvil terminado tendrá un precio de unos 7.500 dólares, pero lo más interesante es que, teniendo en cuenta los costos de la electricidad actuales, gastará unos 50 pesos por mes para realizar 3.500 kilómetros. Sería un auto urbano con una velocidad máxima de 90 kilómetros por hora y se recargará en seis horas. 

 

 

Bicicleta eléctrica presentada por la empresa china Lucky Lion con motor argentino de Ar Motors.

Juan Pablo Zagorodny, presidente de la Asociación Argentina de Vehículos Eléctricos y Alternativos (AAVEA), explica que hoy existe “cierta flexibilidad como para que un municipio o una provincia puedan autorizar y reglamentar el uso de los vehículos eléctricos dentro de su ámbito propio” mediante una patente municipal, como sucede con los tranvías en la ciudad de Córdoba. Además, frente a las preocupaciones sobre si la mayor demanda de electricidad podría afectar a la red eléctrica actual, expresa que “las redes eléctricas domiciliarias no sufrirían grandes esfuerzos si los cargadores son de baja potencia, menor a la de un aire acondicionado estándar, y los usuarios se acostumbran a cargar sus autos preferentemente por la noche, cuando se produce el “valle” de la electricidad, contribuyendo así a la predictibilidad del sistema”.

Actualmente, la normativa argentina no permite homologar autos eléctricos, ya que cataloga los vehículos dependiendo de los centímetros cúbicos del motor. En otros países se los cataloga basándose en los caballos de fuerza o kilowatts de potencia, con lo que no importa cómo se genera la energía en el motor, es decir, da lo mismo si es de combustión o eléctrico.

Fuente: unsam.edu.ar/tss