La maldición de Baade: el proyecto 152 que no logró resucitar Alemania 

El 15 de marzo se cumplió el 115 aniversario del nacimiento del gran diseñador de aviones Brunolf Baade, quien nació en un momento equivocado de la historia: por razones políticas sus creaciones no llegaron a fabricarse en serie, pero su legado vive.

CC BY-SA 3.0 / Giso Löwe / Baade 152

Sputnik relata la historia de Brunolf Baade, el creador del primer avión reactor de pasajeros en Alemania, que cayó víctima de la política, al igual que su diseñador.

La dura vida de la posguerra 

Durante la Segunda Guerra Mundial este talentoso ingeniero trabajaba para la compañía Junkers, pero después de la guerra la industria de la aviación alemana prácticamente se extinguió. 

Muchos de los ingenieros alemanes tenían solo dos caminos a seguir: trabajar para las autoridades de los países que ocuparon a Alemania o ser encarcelados. 

Brunolf Baade

Sorprendentemente, el joven diseñador que se encontraba en Alemania del Oeste no le interesó a EEUU, que estaba a la caza de cualquier especialista técnico de valor. Por lo cual, fue encarcelado por haber formado parte del partido nazi. 

Poco después fue liberado y optó por trasladarse a la parte soviética de Alemania, donde ofreció sus servicios a las autoridades de la URSS. Al igual que los demás ingenieros y especialistas técnicos alemanes, Baade fue trasladado a la ciudad soviética de Dubná, en la región de Moscú. 

Allí fue destinado a la oficina de diseño OKB-1, que en aquel entonces estaba dirigida por Semion Alekseev, uno de los creadores del legendario caza de la Segunda Guerra Mundial La-5. 

Mientras trabajaba en OKB-1, Baade diseño varios modelos de aviones, entre los cuales estaba el bombardero reactor llamado Proyecto 150. No obstante, esta aeronave no llegó a formar parte de las Fuerzas Aéreas de la URSS por dos razones principales. 

A pesar de que no fuera fabricado en serie, el bombardero del Proyecto 150 fue un éxito y se usó como la base para el primer avión de pasajeros reactor de Alemania, el Baade 152

Primero, estaba el hecho de que el primer prototipo se estrelló, lo cual dejó su marca sobre el avión. Además, para aquel entonces ya se estaba fabricando en serie el bombardero Il-28. 

Nueva vida de un gran proyecto

A pesar de que el bombardero creado por Baade no siguiera adelante, el proyecto no desvaneció. El Gobierno de la República Democrática Alemana (RDA) decidió reanimar la industria nacional de la aviación, y el Proyecto 150 se usaría como la base del avión de pasajeros Baade 152. 

El Baade 152 contaba con ciertos aspectos peculiares en su diseño, como lo fue el tren de aterrizaje en configuración de bicicleta y los motores emparejados. CC BY-SA 3.0 de / Bundesarchiv, Bild 183-54953-0006

Estaba previsto que la aeronave fuera capaz de transportar a unos 70 pasajeros a una distancia de hasta 2.900 kilómetros. Gracias a los motores reactores de fabricación alemana Pirna 014 el avión tendría una velocidad de crucero de unos 800 km/h. 

Para dedicarse a su desarrollo, Brunolf Baade volvió a Alemania del Este en 1954 y en poco tiempo rediseñó su bombardero para convertirlo en un avión de pasajeros.

La aeronave concebida por el diseñador alemán contaba con muchas novedades técnicas para la época. Tenía cuatro motores que estaban montados en parejas de una manera similar al bombardero estadounidense B-52 y el bombardero más rápido de la Segunda Guerra Mundial: el Arado Ar-234. 

Otra particularidad con la que contaba el Baade 152 era un tren de aterrizaje de 'bicicleta', que posteriormente fue reemplazado por una configuración clásica de triciclo. 

Al final se optó por una configuración clásica del tren de aterrizaje en forma de triciclo.

La maldición de Baade

El nuevo avión diseñado por Brunolf Baade realizó su primer vuelo en diciembre de 1958, pero ya en marzo del año siguiente se estrelló, matando a los cuatro miembros de su tripulación. Este evento tuvo unas graves repercusiones para el proyecto. 

El avión contaría con un confortable salón para sus 72 pasajeros. 

La segunda unidad del Baade 152 alzó el vuelo en 1960, pero para aquel entonces su destino ya estaba decidido. A pesar de que fuera promocionado como el orgullo alemán que llevaría a la resurrección de la industria nacional, el Baade 152 no llegaría a ser fabricado en serie. 

Las dos versiones del Baade 152. En la parte superior se presenta la primera versión, en la parte inferior la renovada. 

Aunque incluso se publicó una serie de sellos de correo y se grabó un documental dedicado al nuevo avión alemán, el Gobierno de la RDA optó por comprar únicamente las naves de fabricación soviética.

Al final solo fueron construidas tres unidades del Baade 152, la última de las cuales ni siquiera llegó a volar. En 1961 los primeros cuatro aviones de la serie estaban siendo ensamblados, pero con la clausura del proyecto fueron desmantelados. 

El legado de Brunolf Baade

Andreas Dietrich, expiloto de las Fuerzas Aéreas de la RDA e ingeniero de la misma compañía donde trabajaba Brunolf Baade, habló con Sputnik sobre el legado que dejó el constructor. 

Según explicó, desde que llegó en 2008 a la compañía que ahora se llama Elbe Flugzeugwerke GmbH, empezó a estudiar la documentación técnica y los archivos relacionados con el Baade 152. 

Ahora Dietrich se dedica a salvaguardar el legado del profesor Baade, aunque en la actualidad se trate más de unos principios más bien teóricos que técnicos, puesto que las tecnologías de fabricación y los materiales actuales han avanzado mucho desde entonces. 

No obstante, las aspiraciones que se formaron entonces en cuanto a la calidad del trabajo de los ingenieros de Dresde siguen existiendo al día de hoy. En las últimas décadas se han ganado una reputación a nivel mundial

A pesar de todo, "yo, personalmente, sigo convencido de la fiabilidad técnica del equipo militar soviético", concluyó.



Fuente: mundo.sputniknews.com