martes, 17 de junio de 2025

El Gobierno anunció el tren que conectará al Este con el Gran Mendoza: los primeros detalles

El Gobierno anunció el tren que conectará al Este con el Gran Mendoza: los primeros detalles
La Provincia acordó con Nación el uso de las vías del Belgrano Cargas. Se hará cargo de la recuperación de las vías y de la compra de formaciones.


La firma del acuerdo entre Nación y Provincia por el tren del Este.

La Provincia firmó el primer convenio con Nación para avanzar en el llamado Tren de Cercanías del Este, que permitirá conectar a pasajeros de la estación San Martín con la estación Gutiérrez del Metrotranvía, ubicada en Maipú. El proyecto, que incluye la recuperación de las vías y la compra del tren, costará unos 100 millones de dólares.

El acuerdo firmado por Alfredo Cornejo y el secretario de Transporte, el mendocino Luis Pierrini, estipula que el Gobierno de Mendoza podrá aprovechar la infraestructura ferroviaria, es decir, las vías del Belgrano Cargas.

En otras palabras, la Provincia se hará cargo de las obras necesarias para poner en funcionamiento el servicio, incluyendo la mejora de vías, señalización, comunicación y adquisición de trenes. También podrá sumar inversiones privadas para completar el proyecto.

El Gobierno estimó que el costo de las obras, más el material rodante, ascenderá a 100 millones de dólares. Habrá una licitación nacional e internacional con la intención de obtener inversión pública y privada contra la explotación del servicio proyectado.

Pero para avanzar en un proyecto que data de 2017, primero Nación tenía que permitir el uso de las vías, que son de jurisdicción nacional. El Gobierno ya adelantó que la inversión que se hará en tener las vías en condiciones se recuperará con el uso.

El Gobierno nacional facilitará los permisos, marcos legales y registros necesarios para que el servicio pueda funcionar de acuerdo con las normas nacionales.



El Ejecutivo mendocino aclaró que no se cobrará canon a la Provincia por el uso de la infraestructura ferroviaria. El régimen tarifario será definido por el Gobierno Provincial, tal como sucede con el resto del servicio de transporte público.

La iniciativa contempla la reparación integral de un tramo del ramal del ferrocarril San Martín, con un recorrido de 32,3 km entre la estación San Martín y la estación Gutiérrez, donde se integrará con el actual servicio del Metrotranvía. Con el acuerdo, ahora se avanzará en el análisis técnico.

Esto incluirá la renovación de vías, mejoras en estaciones, pasos a nivel, obras de drenaje y señalización, entre otras intervenciones técnicas.

Por otro lado, el servicio será público, pero no exclusivo, lo que significa que la infraestructura también podrá ser utilizada por otros operadores ferroviarios.

Cornejo explicó que se trata de un plan “en el que la Provincia viene trabajando hace mucho tiempo en base a un proyecto que presentamos ante el Ministerio de Economía para poder recuperar el tren de pasajeros entre el Este provincial y la ciudad de Mendoza, a través de la conexión en Gutiérrez, Maipú, con el Metrotranvía”.

El ministro de Gobierno, Natalio Mema, describió que “una vez finalizada la obra de infraestructura que hay que llevar adelante, montar un tren de pasajeros, que es justamente lo que se indica técnicamente”.

Y cuestionó las tratativas sin éxito que intentaron llevar en la gestión anterior del Gobierno nacional, “quienes hicieron el tren al revés, de la estación San Martín a Buenos Aires y no de la estación San Martín a Mendoza, que es lo que había que hacer”.



Fuente: elsol.com.ar

lunes, 16 de junio de 2025

Por primera vez, Israel derriba un misil balístico en el espacio

Por primera vez, Israel derriba un misil balístico en el espacio
Por Harriet Barber



(06-11-23) Israel ha utilizado su sistema de defensa antimisiles Arrow para derribar un misil balístico fuera de la atmósfera terrestre, en lo que se cree que es el primer combate que ha tenido lugar en el espacio.

El misil balístico fue lanzado desde Yemen por los hutíes respaldados por Irán y voló casi 1.600 kilómetros sobre la Península Arábiga en camino a su objetivo, la ciudad portuaria israelí de Eilat.


El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, a la derecha, y el entonces embajador de Estados Unidos en Israel, David Friedman, miran un video del lanzamiento del misil antibalístico hipersónico Arrow 3 en 2019. Credito: AP

Aunque las Fuerzas de Defensa de Israel han publicado pocos detalles sobre la interceptación, se sabe que la fuerza aérea opera varias baterías del sistema Arrow 2, que utiliza un interceptor hipersónico para eliminar misiles entrantes en el espacio.

El Ministerio de Defensa israelí publicó un video que muestra el momento de la interceptación, con la tenue forma cilíndrica del misil balístico entrante apenas visible en la imagen en falso color, antes de que una explosión se extienda por la pantalla.

En un comunicado, las FDI dijeron que los sistemas de la fuerza aérea rastrearon la trayectoria del misil y lo interceptaron "en el momento y lugar operativo más apropiados".

Las fotografías de Eilat mostraron una columna de humo proveniente del interceptor Arrow, mientras que los residentes informaron haber escuchado una gran explosión desde el suelo.

Los hutíes de Yemen también publicaron imágenes que supuestamente muestran el lanzamiento del misil como parte de un bombardeo de drones y otras armas de largo alcance dirigidas a ciudades y pueblos israelíes.

El misil balístico, disparado el pasado lunes 30 de octubre, sería supuestamente un misil Qader, una versión mejorada del Shahab 3, de diseño iraní.

Con más de 15 metros de largo, el Qader lleva una ojiva de alto poder explosivo y tiene un alcance que pone a todo Israel en distancia de ataque de los Hutíes, que ahora han declarado la guerra a Israel y son una parte clave de la alianza respaldada por Irán contra el país.

Es precisamente esta amenaza la que el sistema Arrow de Israel, desplegado por primera vez hace unos 25 años, fue diseñado para contrarrestar.

Arrow, un proyecto conjunto estadounidense-israelí, surgió de la necesidad de darle a Israel una forma de defenderse después de que las ciudades israelíes fueran atacadas por misiles Scud iraquíes durante la primera Guerra del Golfo.

Mientras que otros sistemas de defensa contra misiles fueron originalmente concebidos para derribar aviones y tuvieron que ser adaptados a la tarea de derribar misiles balísticos de mayor alcance a altitudes y velocidades mucho mayores, Arrow fue el primero en ser diseñado específicamente para esa tarea.


El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, en la fábrica que produce el interceptor Arrow-3 en 2019. Credito:AP

El sistema se había utilizado previamente en 2017 para derribar un misil tierra-aire sirio S-200 que no impactó contra un avión de guerra israelí y se dirigía hacia una ciudad israelí. Sin embargo, la interceptación del lunes marcó la primera vez que se utilizó para su propósito original.

“La interceptación exitosa implica mucho más que proteger a los residentes de Eilat y asestar un golpe a la jactancia de los hutíes”, dijo un funcionario de defensa israelí.

Principalmente, demuestra a Irán, que estuvo detrás del lanzamiento y suministró el misil, que Israel tiene la capacidad de actuar contra su programa de misiles, y esto tiene implicaciones mucho más amplias para el conflicto regional.

Desde los ataques del 7 de octubre por parte de Hamás contra Israel, y el posterior bombardeo israelí de Gaza, los hutíes han lanzado drones, misiles de crucero y misiles balísticos contra Israel en cuatro ocasiones.

Los hutíes han prometido que habrá más ataques de este tipo “para ayudar a los palestinos a alcanzar la victoria”.



viernes, 13 de junio de 2025

Finalmente, Israel atacó Irán y se desató una tormenta de consecuencias poco predecibles

Finalmente, Israel atacó Irán y se desató una tormenta de consecuencias poco predecibles
por Gonzalo Fiore Viani



El conflicto entre Israel e Irán ha dejado de ser una cuestión de sombras, amenazas veladas y ciberataques quirúrgicos. Lo que alguna vez fue una guerra fría regional con epicentro en Medio Oriente, se ha transformado en un enfrentamiento directo de consecuencias imprevisibles.

Lo que comenzó como una ofensiva aérea israelí sobre instalaciones nucleares iraníes terminó de confirmar lo que muchos analistas temían: la región se desliza peligrosamente hacia una guerra de mayor escala.

Donald Trump, con la desfachatez que lo caracteriza, declaró que el ataque israelí contra Irán es “excelente para el mercado”. Según su lógica, la destrucción de capacidades nucleares iraníes estabiliza la economía global. Es decir, para el expresidente norteamericano, un ataque aéreo que ha dejado decenas de muertos y activado sirenas en Galilea es una especie de festival bursátil.

La afirmación no solo trivializa una situación bélica de extrema gravedad, sino que también confirma la visión instrumental que Trump tiene del mundo: si los números verdes en Wall Street justifican la guerra, entonces la guerra es bienvenida.

Trump confirmó, además, que su equipo estaba al tanto de los planes israelíes y que mantuvo conversaciones con Benjamin Netanyahu. Si bien el secretario de Estado Marco Rubio negó cualquier participación directa de Estados Unidos en la operación, resulta difícil creer que un ataque de esta envergadura haya sido ejecutado sin, al menos, una venia tácita de Washington.

Irán, por su parte, respondió, por ahora, con dureza verbal. El canciller Abbas Araghchi calificó el bombardeo como una “agresión temeraria” y exigió una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU. En su carta, acusó a Israel de ser el “régimen más terrorista del mundo” y prometió represalias “decisivas y proporcionales”.

Si las amenazas se traducen en acción, el escenario es de máxima tensión: un conflicto directo que ya involucra no solo drones y misiles, sino también a actores internacionales que podrían ser arrastrados hacia un nuevo abismo regional.

Vali Nasr, exasesor del Departamento de Estado, advirtió que Irán “no tiene opción” más que responder para evitar perder credibilidad. Según su análisis, el ataque no solo aleja las posibilidades de una negociación diplomática, sino que sienta las bases para una guerra de desgaste, larga, imprevisible y con efectos colaterales incalculables. En este sentido, la estrategia de Trump podría terminar fracasando del mismo modo que fracasó su “máxima presión” en 2019: provocando más confrontación y menos diplomacia.

En las horas posteriores al ataque, los mercados energéticos reaccionaron con nerviosismo. El precio del petróleo se disparó casi un 9%, la suba más importante desde el inicio de la invasión rusa a Ucrania. No se trata de una simple reacción especulativa: el temor real es que la respuesta iraní afecte el tránsito por el estrecho de Ormuz, por donde circula más del 20% del petróleo mundial.

Un cierre parcial o total de esa ruta equivaldría a una sacudida global que podría llevar el precio del crudo por encima de los 100 dólares. Para Trump, que intenta vender una narrativa de recuperación económica, este escenario es una pesadilla política. Para Irán, sin embargo, podría ser una herramienta de presión en su arsenal asimétrico.



martes, 10 de junio de 2025

Italia y Argentina fortalecen su alianza espacial: nuevos proyectos satelitales, cooperación científica y tecnología dual

Italia y Argentina fortalecen su alianza espacial: nuevos proyectos satelitales, cooperación científica y tecnología dual



La reciente reunión entre la presidenta del Consejo de Ministros de Italia, Giorgia Meloni, y el presidente argentino, Javier Milei, selló un acuerdo ambicioso que traza la hoja de ruta bilateral para los próximos cinco años. El Plan de Acción Italia-Argentina 2025-2030, adoptado oficialmente en Roma, abarca múltiples áreas de colaboración. Pero entre todas, la cooperación en el sector espacial emerge como un pilar estratégico para ambas naciones.

Un nuevo impulso a la colaboración espacial entre Italia y Argentina

Italia y Argentina redoblan su compromiso con el desarrollo conjunto de tecnologías espaciales, con una agenda centrada en la observación de la Tierra, la exploración espacial y la formación científica. Uno de los focos principales será la nueva fase del sistema satelital SIASGE, una constelación integrada por satélites de ambas naciones con fines de gestión de emergencias. Esta iniciativa se enmarca en la larga historia de cooperación entre la Agencia Espacial Italiana (ASI) y la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE).


Sistema satelital ítalo-argentino SIASGE.

Entre los proyectos destacados, se contempla también la instalación del telescopio Flyeye en la estación “Dr. Carlos Ulrico Cesco” de San Juan. Se trata de una herramienta clave para la detección de objetos espaciales y desechos orbitales, que contribuirá a la seguridad del entorno espacial.

La cooperación incluirá además la participación conjunta en los Acuerdos Artemisa, el marco internacional liderado por la NASA para la exploración lunar y más allá. Así como el intercambio de conocimientos en derecho espacial, una dimensión cada vez más crítica ante el crecimiento del sector.

Asimismo, se buscará impulsar la innovación y el desarrollo de capacidades a través del fortalecimiento de los programas de posgrado del Instituto Mario Gulich y la promoción de alianzas comerciales y tecnológicas entre empresas —incluidas PYMES y startups— de ambos países.

Una agenda amplia, con la mirada puesta en el futuro

Si bien la cooperación espacial fue uno de los ejes más técnicos y visionarios del plan, el acuerdo abarca otros sectores de interés estratégico. Entre ellos: diálogo político, inversiones, transición energética, defensa, cooperación judicial, educación, cultura y políticas sociales.

Este renovado acercamiento entre Italia y Argentina no solo refuerza la relación bilateral, sino que posiciona a ambos países como actores clave en la cooperación espacial internacional y el desarrollo de tecnologías con impacto global.



lunes, 9 de junio de 2025

Un equipo argentino ganó el Mundial de ingeniería aeroespacial en la NASA

Un equipo argentino ganó el Mundial de ingeniería aeroespacial en la NASA
Son estudiantes del ITBA y lograron el primer puesto en la final de la CanSat Competition. Tienen entre 21 y 24 años y simularon una misión aeroespacial a pequeña escala.
por Penelope Canonico



“Después de 6 meses muy duros que implicaron una gran carga emocional y física, es un orgullo tremendo haber ganado la competencia. Los italianos celebraron con nosotros la coronación”, comparte con Clarín Rafael Dalzotto, al borde de las lágrimas, mientras viaja rumbo a Washington.

Tiene la voz disfónica y confiesa que todavía no le cae la ficha de esta realidad: haber alcanzado el primer puesto en la final de la CanSat Competition, una competencia internacional de ingeniería que simula una misión aeroespacial a pequeña escala.

El certamen consiste en desarrollar y poner a prueba un prototipo de satélite y cuenta con el auspicio de la NASA. “Creamos un satélite del tamaño de una lata. Desde un principio sentimos que estábamos representando al país. De hecho, nuestro logo está cargado de símbolos nacionales. Nos apoyamos mucho en la experiencia de los chicos del año pasado”, amplía Dalzotto.

El equipo argentino del Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA) está conformado por Ezequiel Bolzicco, Daniela Maradei, Thomas Marthi y Agustin Pilotto en Estructura y Materiales; Agustin Haarth, Santiago Agosti, Emanuel Albornoz y Rafael Dalzotto en Hardware; Micaela Perillo en Software; Santiago Bolzicco en Operaciones, y Eduardo Barbier como Advisor. Tienen entre 21 y 24 años.



La ciudad de Los Angeles se está incendiando en las protestas más grandes desde los disturbios de 1992. ¿Por qué?

La ciudad de Los Angeles se está incendiando en las protestas más grandes desde los disturbios de 1992. ¿Por qué? 
por Gonzalo Fiore Viani



Los disturbios que han sacudido Los Ángeles en los últimos días no surgieron de la nada. Las protestas masivas, que escalaron hasta llegar al despliegue de la Guardia Nacional por orden del presidente Donald Trump, tienen su origen en una serie de operaciones migratorias federales que provocaron indignación, miedo y resistencia en comunidades locales.

Todo comenzó el viernes 6 de junio, cuando agentes de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) realizaron redadas en varios puntos del condado de Los Ángeles, incluyendo un almacén textil en el Fashion District. Según el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), estas operaciones se justificaron tras una investigación que reveló el uso de documentos falsos por parte de algunos trabajadores. Sin embargo, para muchos en la comunidad, esto fue visto como el inicio de una nueva ofensiva contra inmigrantes, en una ciudad que históricamente se ha declarado santuario.

Las protestas, que ya llevan tres días, se concentraron en el centro de la ciudad, especialmente cerca del Centro de Detención Metropolitano. Los manifestantes coreaban consignas como “vergüenza” y “váyanse a casa” mientras miembros de la Guardia Nacional, armados y con escudos, formaban una línea defensiva. En respuesta a acercamientos de los manifestantes, las fuerzas del orden lanzaron botes de humo y proyectiles de control de multitudes.

El gobernador demócrata Gavin Newsom calificó el despliegue como “una grave violación de la soberanía estatal” y exigió el retiro inmediato de las tropas federales. La alcaldesa Karen Bass también criticó duramente la medida, asegurando que la administración de Trump está provocando un conflicto innecesario: “Esto no se trata de seguridad pública, se trata de una agenda política”, declaró.

La Casa Blanca, por su parte, justificó la acción asegurando que la situación en Los Ángeles era crítica y que se actuó en consecuencia. Trump, al ser consultado antes de abordar el Air Force One en Nueva Jersey, dijo: “Hay personas violentas en Los Ángeles y no se van a salir con la suya”.

Las protestas se expandieron el sábado a Paramount y Compton, donde los residentes —mayoritariamente latinos— denunciaron la presencia de agentes federales cerca de tiendas como Home Depot y Dale’s Donuts, sospechando nuevas redadas. En Compton, un vehículo fue incendiado y se produjeron enfrentamientos directos entre manifestantes y fuerzas del orden. Agentes federales respondieron con gases lacrimógenos y proyectiles no letales.

El presidente Trump firmó ese mismo sábado un memorando para desplegar a más de 2,000 soldados de la Guardia Nacional en el condado de Los Ángeles, usando la autoridad del Título 10, una medida excepcional que permite federalizar tropas estatales sin consentimiento del gobernador. Se trata de la primera vez en décadas que una acción de este tipo se ejecuta sin una solicitud oficial del estado afectado.

Los operativos de ICE han dejado hasta ahora 118 inmigrantes arrestados, entre ellos personas con antecedentes penales, pero también individuos sin historial criminal. Entre los detenidos durante las protestas figura David Huerta, presidente regional del sindicato SEIU, quien enfrenta cargos por obstrucción.

La congresista Maxine Waters, la exvicepresidenta Kamala Harris y otras figuras políticas han condenado el uso de fuerza militar y la criminalización de las protestas, argumentando que se trata de una estrategia para sembrar miedo y distraer a la opinión pública.

Mientras tanto, se espera que las redadas continúen en los próximos 30 días, lo que podría prolongar la tensión en una ciudad que se encuentra, una vez más, en el epicentro del debate nacional sobre inmigración, derechos civiles y uso del poder federal.

La causa principal de las protestas es la decisión de Trump de intensificar las redadas migratorias y ordenar deportaciones masivas en la región. Estas acciones, llevadas a cabo en una ciudad históricamente considerada un santuario para inmigrantes, generaron un profundo rechazo entre residentes, activistas y líderes comunitarios, que denunciaron el uso excesivo de la fuerza, la criminalización de personas sin antecedentes penales, y la falta de transparencia en los procedimientos.

Para la comunidad, estas medidas no solo representan un ataque directo a los inmigrantes, sino también una amenaza a los derechos civiles y a la autonomía local. Las protestas son, en esencia, una respuesta a una política migratoria percibida como inhumana, injusta y políticamente motivada.



viernes, 6 de junio de 2025

Alumnos argentinos ganaron una competencia de la NASA y viajarán a EE.UU. para representar a Latinoamérica

Alumnos argentinos ganaron una competencia de la NASA y viajarán a EE.UU. para representar a Latinoamérica
Un grupo de estudiantes del Southern International School, de Hudson, Berazategui, diseñó una colonia turística en una de las lunas de Júpiter y ahora viajarán al Kennedy Space Center, en Florida.
Por Rodrigo Álvarez


Alumnos argentinos ganaron una competencia de la NASA y viajarán a EE.UU. para representar a Latinoamérica. (Foto: Gentileza Southern International School)

Un grupo de estudiantes argentinos del Southern International School, de Hudson, Berazategui, logró un hito histórico al conseguir el primer puesto en el Desafío Espacial Latinoamericano (DESLA) 2025, una prestigiosa competencia educativa organizada por la NASA.

Gracias a este logro, el equipo viajará el próximo 24 de julio al Kennedy Space Center, en Florida, para representar a toda Latinoamérica en la final internacional, donde competirán con estudiantes de Europa, Asia, Oceanía y América del Norte.

Este logro es el resultado de meses de dedicación y trabajo colaborativo del equipo compuesto por Juan Filloy, Victoria Gabrieludis, Lucio Venier, Clara Pérez Beitia, Martina Mendez, Paula Leguizamón, Delfina Martinez Rozemberg, Luciana Zabala, Bianca Contreras, Valentino Paolucci, Santiago Fassano, Rodrigo Sobradelo, Pedro Boullhesen y Franco Lisnovsky, coordinados por el docente Javier Portillo.


Alumnos argentinos ganaron una competencia de la NASA y viajarán a EE.UU. para representar a Latinoamérica. (Foto: Gentileza Southern International School)

“Una simulación del futuro”

El desafío propuesto por DESLA 2025 consistió en diseñar una colonia turística en Europa, una de las lunas de Júpiter. El proyecto debía contemplar alojamiento para 2000 residentes permanentes y capacidad para recibir a 450 turistas anualmente. El equipo del Southern International School desarrolló una propuesta integral que abordó aspectos de ingeniería, sustentabilidad y bienestar humano en un entorno extraterrestre, demostrando una notable capacidad de innovación y trabajo en equipo.

“Desde el inicio entendimos que diseñar una colonia para Europa no era solo un ejercicio académico, era una simulación del futuro”, expresó Clara Pérez Beitia a TN Tecno.

“Nosotros ya habíamos participado de un simulador del proyecto DESLA organizado por el colegio, que se componía de un RFP (Request for Proposal, o Solicitud de Propuesta) más reducido", explicó Victoria Gabrieludis. “Vernos enfrentados a una consigna mucho más extendida y con requisitos totalmente nuevos a aquellos que conocíamos fue uno de los primeros desafíos para nosotros. Esto nos obligó a decidir y tomar roles que nos ayudaran a mantener la organización y la coherencia de toda la información encontrada y utilizada”.

El diseño elegido para la colonia fue especialmente innovador: una estructura en forma de panal de abejas, ubicada bajo el hielo de Europa, pensada tanto para resistir las condiciones extremas como para atraer a los futuros turistas. “Tener que encontrar una estructura que soporte los movimientos del hielo y, al mismo tiempo, resulte interesante para los turistas, fue un gran desafío técnico y creativo”, detalló Victoria. Así, se les ocurrió la idea del panal, que además de ser resistente, es visualmente atractiva.

El desafío no solo requería creatividad y visión, sino también rigurosidad técnica en áreas como diseño estructural, operaciones, cronograma, costos y turismo. “Uno de los mayores desafíos que tuvimos fue pensar cómo construir en una luna tan lejana, donde llevar materiales sería costosísimo”, explicó Juan Filloy, quien se encargó del diseño estructural y la organización del cronograma y los costos. “Se nos ocurrió una solución creativa: buscar lunas cercanas que sí tuvieran materiales aptos para la construcción. Esa propuesta fue muy valorada por los evaluadores”.

Más allá de los aspectos técnicos, el grupo debió también enfrentarse a desafíos inesperados, como la necesidad de presentar el proyecto en español cuando lo habían preparado en inglés. “Me tocó ser el orador y tuve que traducir todo en simultáneo”, relató Juan. “Por suerte, sabía bien el contenido y pude resolverlo, pero fue un desafío más que sumar a la experiencia”.

Victoria destacó que el mayor aprendizaje fue la capacidad de trabajar a contrarreloj y en equipo: “Tuvimos que aprender a organizarnos, a asumir roles claros y a confiar en nosotros mismos para poder cumplir con los objetivos. Además, aprendimos a pedir ayuda cuando lo necesitábamos y a corregirnos de manera constructiva”.

Delfina Martínez Rozemberg, la integrante más joven del grupo, de apenas 12 años, remarcó el valor del compañerismo y la perseverancia: “Aprendí muchísimas cosas nuevas e interesantes, sobre todo el trabajo en equipo. Ver que todo el esfuerzo tuvo sus frutos es algo fantástico y muy gratificante, algo que me quedará para siempre”.

Rumbo a la final internacional

El equipo se prepara ahora para el viaje a la International Space Settlement Design Competition (ISSDC) en Florida, donde participarán de tres jornadas intensivas en las que deberán resolver un nuevo desafío junto a estudiantes de todo el mundo.

La expectativa es alta y el orgullo, enorme. “Este proyecto no es solo ciencia”, reflexionó Juan. “Tiene un montón de áreas: economía, arquitectura, medicina, turismo. Cada uno puede aportar desde su interés personal. Ese es el mensaje más importante: no se queden con la idea de que por ser un proyecto de la NASA va a ser solo ciencia”, aclaró.

Por último, Victoria Gabrieludis dejó un mensaje para los estudiantes de todo el país: “Nunca dejen de intentarlo. Si uno de verdad se esmera y trabaja de manera constante, se puede lograr cualquier meta. No estaba dentro de nuestros planes este gran destino, y hoy tenemos la posibilidad de ser parte de este hermoso mundo gracias a nuestro esfuerzo y curiosidad”.

Este logro no solo representa un orgullo para el Southern International School y la comunidad educativa de Berazategui, sino que también destaca el talento y la preparación de los jóvenes latinoamericanos en el ámbito de la ciencia y la tecnología espacial.



Tiembla la NASA: la pelea entre Musk y Trump pone en peligro el programa espacial de EE.UU.

Tiembla la NASA: la pelea entre Musk y Trump pone en peligro el programa espacial de EE.UU.



Donald Trump y Elon Musk están en guerra: este jueves, los magnates comenzaron a criticarse públicamente a través de las redes sociales e incluso el CEO de SpaceX sugirió que Trump estaría dentro de los archivos de Jeffrey Epstein sobre tráfico de menores. Pero, más allá de esas cuestiones, la realidad es que el cruce entre los multimillonarios podría poner de cabeza a la NASA.

Como presidente de Estados Unidos, Trump podría cancelar los contratos gubernamentales de SpaceX por valor de aproximadamente US$ 22.000 millones.

Por el momento, la noticia no está confirmada, aunque Musk, lejos de sacar el pie del acelerador, dijo que su compañía espacial “comenzará a desmantelar su nave espacial Dragon de inmediato”. Sin embargo, horas después pareció retractarse.

La cápsula Dragon de SpaceX es la única nave espacial estadounidense capaz de enviar astronautas hacia y desde la Estación Espacial Internacional.

La NASA ha confiado en la nave espacial desde 2020 en virtud de un contrato con SpaceX por valor de US$ 5.000 millones. Sacar a Dragon del servicio probablemente interrumpiría el programa de la estación espacial, que involucra a docenas de países.



Trump vs Musk: Más problemas para la NASA

Pero la cooperación entre la NASA y SpaceX no termina ahí: la empresa de Musk está construyendo el Starship, uno de los cohetes con el que la agencia planea enviar astronautas a la Luna nuevamente.

SpaceX ha ganado contratos por valor de US$ 15.000 millones de la NASA, ya que la agencia también coloca muchas de sus cargas útiles científicas y satélites en el cohete Falcon 9 de la compañía.

En el Pentágono, el negocio de lanzamiento de cohetes de SpaceX también es crucial para poner satélites de seguridad nacional en el espacio. Además, la unidad de satélites militares de SpaceX está construyendo una enorme constelación de espías en órbita para una agencia de inteligencia de Estados Unidos.

El cruce entre Trump y Musk se da pocos días después de que se confirmara que Jared Isaacman, aliado de Musk, no dirigirá la NASA porque era “totalmente demócrata”. La afirmación de Trump fue en referencia a los informes de que Isaacman había donado a los demócratas.



Steve Bannon le pidió a Donald Trump que deporte a Elon Musk y "tome el control de SpaceX"
El exasesor y actual consejero no oficial del mandatario se metió de lleno en la pelea con el multimillonario. Lo acusó de ser "inmigrante ilegal" y pidió expropiar la empresa aeroespacial.


Steve Bannon y Elon Musk.

Steve Bannon, consejero no oficial de Donald Trump, se metió de lleno en la pelea pública que se desató este jueves entre el presidente de Estados Unidos y Elon Musk. Según dijo, le pidió al mandatario que "investigue y deporte" al multimillonario nacido en Sudáfrica ya que está convencido de que es "un inmigrante ilegal". Además, afirmó que el jefe de Estado debería "firmar un decreto y tomar el control de SpaceX esta misma noche".

Musk y Trump rompieron su alianza política y desataron una catarata de acusaciones cruzadas en las redes sociales. El quiebre se formalizó cuando el billonario reposteó en X un pedido de juicio político contra el republicano y propuso que sea reemplazado por el vicepresidente J.D. Vance. A la publicación, Musk agregó un escueto pero contundente: “Yes”.

El conflicto escaló rápidamente. Según informó prensa estadounidense, Trump, durante una reunión con el canciller alemán, expresó estar “muy decepcionado con Musk” por no haber reducido el gasto a través de DOGE y sugirió que podría cancelar todos los contratos gubernamentales de SpaceX y Starlink. “La forma más fácil de ahorrar miles de millones es cortar los subsidios a Elon”, escribió en su red Truth Social. Musk respondió en tiempo real: “Adelante, haceme el día”, le dijo y fue más allá al insinuar que Trump figura en los archivos no publicados del caso Jeffrey Epstein, lo que —según el empresario— explicaría la falta de transparencia de la Casa Blanca sobre ese escándalo.

Bannon pidió investigar el "estatus migratorio" de Elon Musk para deportarlo

Bannon, estratega político, referente de la ultraderecha y otrora jefe del sitio Breitbart News, aprovechó la ruptura consumada esta jornada para profundizar su enemistad manifiesta con el dueño de Tesla, a quien tiempo atrás tildó de "racista" y "un tipo muy malvado" que "debería volver a Sudáfrica". "¿Por qué tenemos sudafricanos blancos, las personas más racistas de la tierra, haciendo cualquier comentario sobre lo que sucede en Estados Unidos?", se había preguntado en aquel momento Bannon.

Hoy, en una entrevista con The New York Times, retomó la diatriba contra Musk. “Deberían iniciar una investigación formal sobre su estatus migratorio, porque estoy convencido de que es un inmigrante ilegal y debería ser deportado de inmediato”, disparó el banquero y exasesor del presidente Trump durante su primer mandato.

Las compañías de Musk, principalmente SpaceX ligada a la industria aeroespacial, han recibido miles de millones de dólares en contratos federales de parte de numerosas agencias estatales a lo largo de los años, según informó el diario estadounidense, y en 2023, los demócratas le prometieron u$s3.000 millones a sus empresas en casi 100 contratos distintos con 17 agencias federales.

En otra entrevista, Bannon dijo esta tarde que el mandatario debería avanzar con la aplicación de una ley que le permitiría quitarle el control de la compañía aeroespacial a Musk. “Creo que la medida que el presidente Trump debería tomar de inmediato, cuando amenaza con retirar uno de los grandes programas de SpaceX, el presidente Trump, esta noche, debería firmar una orden ejecutiva exigiendo que se aplique la Ley de Producción de Defensa en SpaceX y tome el control de la empresa antes de la medianoche”, dijo.

La ruptura de Donald Trump y Elon Musk

La ruptura entre Trump y Musk se consumó pocos días después de una despedida privada en el Despacho Oval en la que el Presidente le entregó al empresario una llave simbólica en reconocimiento por su gestión al frente del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE).

El detonante de la separación habría sido la reversión de los créditos fiscales a vehículos eléctricos, una medida que afecta directamente a Tesla. Se sumó también el proyecto económico que Trump impulsa —denominado “Enorme y Hermoso Proyecto de Ley”— fue uno de los catalizadores de la separación ya que generó fuertes críticas por parte de Musk, quien lo calificó de “repugnante abominación” y advirtió que aumentaría el déficit.

Trump contraatacó retirando la nominación de Jared Isaacman, impulsado por Musk para dirigir la NASA, y lo calificó como “un absoluto demócrata”. Tras el cruce, las acciones de Tesla cayeron más del 10%, sumando tensión al escenario. Musk, lejos de recular, afirmó: “Sin mí, Trump habría perdido la elección. Qué ingratitud”. La disputa entre dos de las figuras más influyentes del mundo se convirtió en una guerra abierta en redes sociales, que deja interrogantes sobre el futuro político y financiero de ambos.



Así es como la seguridad nacional de EE. UU. se ha vuelto dependiente de SpaceX
Una amarga disputa entre Trump y Musk sirve como recordatorio de cuán importante se ha vuelto SpaceX para el ejército y las agencias federales de Estados Unidos.
por Joseph Trevithick, Tyler Rogoway


Imágenes HUM/Universal Images Group a través de Getty Images

La abierta disputa entre el presidente Donald Trump y Elon Musk, quienes hasta hace poco eran amigos cercanos y aliados políticos, ha puesto especialmente de manifiesto la enorme dependencia que el gobierno estadounidense, y en especial las fuerzas armadas estadounidenses, ha adquirido de SpaceX. Ayer, Trump insinuó la posibilidad de cancelar contratos y subsidios a empresas propiedad de Musk. Musk, en parte, respondió amenazando con recortar algunas de las obras gubernamentales más importantes de SpaceX, de lo que posteriormente se retractó.

“La manera más fácil de ahorrar miles de millones de dólares en nuestro presupuesto es cancelar los subsidios y contratos gubernamentales de Elon Musk”, escribió Trump hoy en su plataforma Truth Social. “¡Me sorprendió que [el expresidente Joe] Biden no lo hiciera!”.

Musk ha estado atacando cada vez más las políticas de Trump en los últimos días en X, principalmente por la amplia propuesta de ley presupuestaria y fiscal llamada "Big Beautiful Bill" (Gran y Hermosa Ley). La Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO) ha estimado que, de promulgarse, la ley añadirá 2,4 billones de dólares al déficit federal. Tras la toma de posesión de Trump en enero, Musk se incorporó como funcionario gubernamental especial, aparentemente para liderar una iniciativa de reducción de gastos conocida como el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE). Musk dejó públicamente ese cargo la semana pasada.


Elon Musk, a la izquierda, estrecha la mano del presidente Donald Trump en la Oficina Oval el 30 de mayo de 2025. Kevin Dietsch/Getty Images

"A la luz de la declaración del presidente sobre la cancelación de mis contratos gubernamentales, @SpaceX comenzará a desmantelar su nave espacial Dragon de inmediato", escribió Musk posteriormente en X.

"Buen consejo. Vale, no desmantelaremos a Dragon", escribió Musk más tarde en respuesta a otro usuario en X que le había advertido que no se precipitara.

Dragon es una familia de cápsulas espaciales que dan soporte a la Estación Espacial Internacional (EEI) y actualmente es el único vehículo estadounidense fiable para que los astronautas realicen dicho viaje. Es una capacidad absolutamente crucial para la NASA, especialmente porque las relaciones con los rusos, que también ocupan la estación, se han deteriorado desde la invasión de Ucrania.

En general, queda por ver qué medidas tomará o no Trump, o cómo responderá Musk. Cualquier medida de represalia se vería afectada también por diversos factores legales y de otra índole.

Si la administración Trump decide cancelar acuerdos con SpaceX, en particular, esto podría tener graves consecuencias para la seguridad nacional de EE. UU., y en especial para el aparato militar y de inteligencia estadounidense, que depende en gran medida de la empresa para lanzamientos espaciales y servicios de comunicaciones espaciales. Además, se sabe que la compañía trabaja en capacidades de detección espacial únicas y secretas para el gobierno estadounidense y se espera que desempeñe un papel importante en la iniciativa de defensa antimisiles Golden Dome de Trump. Como se mencionó anteriormente, la familia de naves espaciales Dragon de SpaceX también es absolutamente esencial para las operaciones espaciales de la NASA.

Acceso al espacio

Hoy en día, SpaceX es, con diferencia, el principal proveedor de lanzamientos espaciales a nivel mundial, dominando el mercado de acceso orbital. El año pasado, la compañía realizó 134 lanzamientos orbitales con sus cohetes Falcon 9 y Falcon Heavy, más que cualquier otra compañía en el mundo en conjunto, según un informe de enero de SpaceNews. Los lanzamientos de SpaceX representaron la impresionante cifra del 84 % del total de satélites puestos en órbita en 2024, según el centro de estudios American Enterprise Institute (AEI).

La enorme participación de SpaceX en el mercado global de acceso espacial se refleja en los contratos con el ejército estadounidense. Tan solo en abril, el Comando de Sistemas Espaciales (SSC) de las Fuerzas Espaciales de EE. UU. anunció que le había otorgado a SpaceX un nuevo contrato por un valor cercano a los 6 mil millones de dólares para 28 lanzamientos. En ese momento, United Launch Alliance (ULA), una empresa conjunta de Boeing y Lockheed Martin, y Blue Origin, fundada por Jeff Bezos de Amazon, también recibieron contratos por un valor cercano a los 5400 millones de dólares (para 19 lanzamientos) y 2400 millones de dólares (para siete lanzamientos), respectivamente. Estos contratos también destacan el coste por lanzamiento significativamente menor que ofrece SpaceX en comparación con sus competidores actuales, ayudado en gran medida por el uso de cohetes propulsores reutilizables. Esta enorme diferencia de coste significa que los servicios de SpaceX solo son reemplazables, en lo que respecta a la planificación y el presupuesto de lanzamientos a largo plazo, a un precio mucho más alto.

Una parte particularmente importante de los lanzamientos de SpaceX se destina a la Oficina Nacional de Reconocimiento (NRO), que formalmente forma parte del Departamento de Defensa, pero también mantiene una estrecha relación con la Agencia Central de Inteligencia (CIA). Como principal brazo de inteligencia satelital de Estados Unidos, la labor de la NRO es clave para la seguridad nacional y extremadamente sensible. Su existencia no se reconoció públicamente hasta 1992. Los Falcon 9 de SpaceX se han utilizado en cinco lanzamientos para la NRO este año. Esto se suma a los seis lanzamientos realizados para la oficina el año pasado.

Además de los satélites espías, el ejército estadounidense ha utilizado cohetes SpaceX para lanzar otros tipos de cargas útiles a la órbita, incluidos los secretos minitransbordadores espaciales X-37B.

Además de los servicios de lanzamiento espacial más tradicionales que SpaceX presta al ejército estadounidense, la compañía también ha estado trabajando con la Fuerza Aérea y la Fuerza Espacial en los últimos años en la posibilidad de enviar carga, e incluso personal, rápidamente de un lugar a otro en la Tierra vía espacial. La Starship de SpaceX , una plataforma reutilizable de dos etapas a órbita (TSTO) en desarrollo principalmente para aplicaciones espaciales más allá de la Tierra, se ha planteado como una opción potencial para esta propuesta de misión "Rocket Cargo". Esto también pone de manifiesto un mayor interés del ejército estadounidense en posibles capacidades espaciales suborbitales.


Una prueba de la nave espacial Starship de SpaceX. SpaceX

Comunicaciones basadas en el espacio

Paralelamente a su creciente dominio en el mercado de lanzamiento espacial, SpaceX Starlink se ha consolidado como un referente en el sector de internet y comunicaciones por satélite en los últimos años. Las fuerzas armadas estadounidenses se han convertido en un importante usuario de Starlink, así como de su versión más segura, Starshield, enfocada en el gobierno.

“No creo que se puedan dar 10 pasos sin tropezar con una terminal Starshield”, declaró Mark Kitz, jefe de la Oficina Ejecutiva del Programa de Comando, Control, Comunicaciones y Redes (C3N) del Ejército de EE. UU., en la conferencia TechNet Augusta de la AFCEA 2024, según Defense News. “Diría que el Ejército está muy comprometido con las constelaciones de satélites pLEO [proliferación de constelaciones en órbita baja terrestre] y Starshield”.


Un marine estadounidense instala una antena Starlink en el buque base de expedición USS Lewis B. Puller. Fuerza de Tarea 51/5.ª Expedición de Marines del Cuerpo de Marines de EE. UU.

Kitz se refería específicamente a su experiencia en un reciente evento culminante del Proyecto Convergencia del Ejército. Desde 2020, el servicio ha utilizado estos eventos para probar, integrar e interconectar sistemas y capacidades nuevos y mejorados en condiciones operativas cada vez más representativas, como parte de sus iniciativas de modernización más amplias.

Más allá de las terminales terrestres básicas, las capacidades de Starlink/Starshield se han integrado cada vez más en aeronaves y buques de guerra militares estadounidenses, incluyendo los nuevos helicópteros presidenciales VH-92 Patriot del Cuerpo de Marines y el portaaviones USS Abraham Lincoln de la Armada. La red espacial puede utilizarse para diversas tareas militares cotidianas, como puede leer más aquí. El ejército estadounidense también ha demostrado cómo la red podría utilizarse para transmitir datos de objetivos y apoyar operaciones tácticas, aunque esto plantea cuestiones de seguridad operativa que deben abordarse.

En general, Starlink/Starshield ofrece conectividad global de alto ancho de banda, mucho menos dependiente de la infraestructura terrestre que las redes de comunicaciones satelitales históricamente. Al utilizar una gran constelación de satélites relativamente pequeños, Starlink/Starshield también es más resiliente ante ataques u otros peligros, algo especialmente valioso para el ejército estadounidense, que enfrenta una gama cada vez mayor de amenazas antisatélite. Los funcionarios estadounidenses insisten regularmente en que se espera que el espacio sea un campo de batalla activo en futuros conflictos, especialmente en combates de alto nivel contra oponentes como China.


El comandante de la Armada de los EE. UU., Kevin White, del USS Abraham Lincoln, posa con el teniente Giovanni Scozzi, oficial de sistemas de combate del portaaviones italiano Cavour , utilizando una función de videollamada en vivo habilitada por la arquitectura Sailor Edge Afloat and Ashore (SEA2), que incluye Starlink, para planificar un ejercicio bilateral entre ambos buques. USN

Starlink/Starshield ha tenido un impacto revolucionario en la conectividad global, tanto para fines militares como no militares. Su uso se ha incrementado en el gobierno de EE. UU. y en todo el mundo, incluyendo el apoyo a las fuerzas del orden y las operaciones de respuesta ante desastres.

Siguen surgiendo nuevos casos de uso, como el uso de la red espacial por parte de Ucrania para controlar buques de superficie no tripulados (USV), incluyendo los de tipo kamikaze cargados con explosivos . Starlink también ha sido una herramienta vital para las fuerzas ucranianas, así como para el gobierno del país en general, en materia de comunicaciones generales. Al mismo tiempo, SpaceX y Musk han recibido fuertes críticas en el pasado por limitar el uso de la red por parte de Ucrania. Esto, a su vez, ha puesto de manifiesto preocupaciones más amplias sobre la capacidad de la compañía para bloquear el acceso a la constelación.

Desarrollo de capacidades espaciales de vanguardia

Más allá de las comunicaciones espaciales, SpaceX se ha consolidado como proveedor directo, y no solo como transportador, de capacidades orbitales más secretas para el ejército estadounidense. Esto incluye una supuesta constelación de satélites de inteligencia, vigilancia y reconocimiento (ISR) para la NRO, que parece estar estrechamente vinculada al trabajo que la oficina ha estado realizando para establecer un Indicador de Objetivo Móvil Terrestre (GMTI) persistente y omnisciente, y capacidad de radar cartográfico.

El GMTI es un modo presente en ciertos radares y que se utiliza para distinguir entre objetivos móviles en tierra y estáticos. Los radares con funcionalidad GMTI pueden rastrear la actividad de los objetivos móviles a lo largo del tiempo. Los radares compatibles con GMTI suelen producir imágenes de radar de apertura sintética (SAR), que son mapas altamente detallados de la superficie, similares a imágenes, que pueden capturarse incluso con nubosidad, humo y polvo, e incluso de noche. La superposición de datos GMTI sobre los mapas SAR proporciona contexto adicional para las trazas de radar, lo que facilita la explotación de inteligencia y el refinamiento de las áreas de recopilación.


Ejemplo genérico de trazas GMTI superpuestas a una imagen SAR. Dominio público.

Como escribió TWZ tras los informes del año pasado sobre el trabajo de SpaceX en este ámbito:

Independientemente de las capacidades exactas de los satélites que SpaceX supuestamente está construyendo para la NRO, de cuándo podrían estar operativos y de si esto está vinculado a los planes GMTI de la Fuerza Espacial, las ventajas de un concepto de constelación son evidentes. Históricamente, algunas de las mayores limitaciones de los satélites espías han sido su incapacidad para estar presentes en todos los lugares donde se necesitan simultáneamente y la relativa lentitud con la que pueden reasignarse. Los movimientos de los satélites espías tradicionales también son predecibles, y los países con los medios para monitorearlos pueden adaptar sus actividades según el momento en que un activo esté sobrevolando.

A su vez, los satélites espía de órbita baja presentan limitaciones en cuanto al tipo de inteligencia que pueden recopilar y en qué contextos. Puede resultar difícil utilizarlos para apoyar operaciones muy urgentes o para proporcionar una fuente de información adicional, más a demanda, para las fuerzas en la periferia táctica del campo de batalla. Como se ha señalado, el informe de Reuters afirma que el apoyo a las operaciones tácticas terrestres es un factor clave que impulsó la adquisición por parte de NRO de la nueva constelación distribuida de SpaceX.

En cambio, una constelación más grande y distribuida podría monitorear simultáneamente enormes franjas de la Tierra y, dependiendo del tamaño de la constelación, al menos de forma mucho más persistente y fluida. Esto podría dificultar, si no imposibilitar, que un oponente oculte actividades de interés. Una tasa de revisita muy baja, o incluso eliminarla por completo, podría incluso abrir la posibilidad de una cobertura continua de "transmisión" de una ubicación desde la órbita terrestre baja. Esto también sería esencial para una cobertura GMTI persistente que rastrea los movimientos terrestres en tiempo real con la suficiente fidelidad como para guiar las armas hacia esas rutas.

El ejército estadounidense está trabajando ahora para establecer capacidades espaciales de indicadores de objetivos móviles aéreos (AMTI), similares a los GMTI, pero también para objetivos aéreos. Esta capacidad está lista para aumentar y algún día reemplazar a las aeronaves aerotransportadas de alerta temprana y control en el inventario estadounidense. Las fuerzas armadas estadounidenses también están trabajando para poner en órbita constelaciones distribuidas de satélites más pequeños para ayudar a proporcionar una mejor alerta temprana y un conocimiento general de la situación, especialmente sobre ataques con misiles entrantes, así como para rastrear esas amenazas para posibles intentos de intercepción. Como ya se mencionó al hablar sobre la naturaleza distribuida de Starlink/Starshield, las constelaciones de este tipo también son más resilientes frente a pérdidas debido a ataques y otros peligros en el espacio. También tienen el potencial de proporcionar cobertura continua e ininterrumpida en todo el mundo.


DARPA

Cúpula dorada

Los esfuerzos del ejército estadounidense por ampliar sus capacidades de ISR espacial, así como las redes de intercambio de datos subyacentes que las respaldan, también se alinean con la visión que Trump ha presentado para su iniciativa de defensa antimisiles Golden Dome. Especialmente con su capacidad para lanzar numerosas cargas útiles al precio más bajo, además de los contratos, la capacidad y la experiencia existentes, SpaceX ya se perfila como un actor clave en Golden Dome.


El presidente Trump en la Oficina Oval con un cartel de la Cúpula Dorada detrás de él durante un anuncio sobre la iniciativa de defensa antimisiles el 20 de mayo de 2025. Chip Somodevilla/Getty Images

SpaceX, junto con los contratistas de defensa Anduril y Palantir, se reunió con altos funcionarios de la administración Trump y del Pentágono en las últimas semanas para presentar su plan, que construiría y lanzaría entre 400 y más de 1000 satélites que orbitarían el mundo para detectar misiles y rastrear su movimiento, informó Reuters en abril, citando fuentes anónimas. Una flota independiente de 200 satélites de ataque, armados con misiles o láseres, derribaría los misiles enemigos.

“No se espera que el grupo SpaceX participe en la militarización de satélites”, añadió el artículo de Reuters. “En un giro inusual, SpaceX ha propuesto establecer su participación en Golden Dome como un 'servicio de suscripción' en el que el gobierno pagaría por el acceso a la tecnología, en lugar de ser el propietario absoluto del sistema. El modelo de suscripción, del que no se ha informado previamente, podría eludir algunos protocolos de adquisición del Pentágono, lo que permitiría una implementación más rápida del sistema… Si bien este enfoque no violaría ninguna norma, el gobierno podría verse obligado a suscribirse y perder el control sobre su desarrollo continuo y sus precios”.

Como se mencionó, también será necesario poner en órbita en primer lugar nuevas constelaciones compuestas por cientos, si no miles, de satélites adicionales, lo que nuevamente resalta el dominio antes mencionado de SpaceX en el sector de lanzamiento espacial.

La nave espacial Dragón

Aunque no se trata de una capacidad militar, la familia de naves espaciales Dragon es otro aspecto muy importante de los contratos de SpaceX con el gobierno estadounidense, como lo destacó la respuesta inmediata de Musk a los comentarios de Trump de ayer. Existen versiones de Dragon diseñadas para transportar carga o astronautas, y son un medio clave para que la NASA transporte ambos tipos de carga útil hacia y desde la Estación Espacial Internacional (EEI).

El papel de la familia Dragon ha cobrado aún más importancia desde que Rusia lanzó su invasión total de Ucrania en 2022. Desde entonces, las relaciones entre Estados Unidos y Rusia se han deteriorado significativamente en todos los ámbitos, incluso en el ámbito de la cooperación espacial. Antes del inicio de los vuelos operativos de Crew Dragon en 2020, Estados Unidos dependía completamente de los cohetes y cápsulas Soyuz rusos lanzados desde el cosmódromo de Baikonur en Kazajistán para el transporte de astronautas desde la Estación Espacial Internacional (ISS).

El desarrollo de Boeing de la nave espacial alternativa de transporte de tripulación, Starliner, para la NASA, también se ha visto afectado por repetidos problemas técnicos y de otra índole, lo que ha puesto aún más énfasis en la Crew Dragon. En marzo, una cápsula Crew Dragon regresó a la Tierra desde la EEI con cuatro astronautas, dos de los cuales habían permanecido en el espacio meses más de lo previsto. Los dos individuos en cuestión, Sunita Williams y Barry "Butch" Wilmore, habían llegado por primera vez a la EEI en junio de 2024 a bordo de una Starliner en la que varios propulsores del sistema de control de reacción (RCS) fallaron. Dicha nave espacial finalmente abandonó la EEI sin pasajeros a bordo debido a problemas de seguridad.

La colaboración de SpaceX con la NASA también se ampliará aún más mediante el uso previsto de Starship para ayudar a reiniciar las misiones tripuladas estadounidenses a la Luna como parte del programa Artemis. Actualmente, el objetivo es que Starship ayude a aterrizar astronautas estadounidenses en la Luna en 2027. La última vez que astronautas estadounidenses realizaron ese viaje fue en la misión Apolo 17 en 1972.

De las empresas de Musk, SpaceX, con diferencia, tiene los acuerdos más lucrativos con el gobierno estadounidense, aunque la contabilidad exacta no está clara. La compañía ha recibido al menos 22.000 millones de dólares en contratos federales, de los cuales unos 15.000 millones provienen de la NASA, según informó Reuters en febrero, citando a la presidenta y directora de operaciones de SpaceX, Gwynne Shotwell.

Sin embargo, las demás empresas de Musk podrían perder acuerdos o verse gravemente afectadas si Trump cumpliera su amenaza implícita. Por ejemplo, la empresa de coches eléctricos Tesla tiene sus propios contratos con el gobierno estadounidense y se beneficia considerablemente de los subsidios federales. Otras empresas fundadas por Musk, como la constructora de túneles The Boring Company, xAI, especializada en tecnología de inteligencia artificial, y Neuralin k, desarrolladora de interfaces cerebro-humano, tienen o podrían estar en proceso de obtener contratos con organizaciones federales estadounidenses.


Un Tesla Model 3 perteneciente al Departamento de Estado de EE. UU. se encuentra afuera de la Embajada de EE. UU. en Wellington, Nueva Zelanda, en 2020. Departamento de Estado de EE. UU.

En cualquier caso, el debate público entre el presidente Trump y Musk ha brindado la oportunidad de destacar la importancia que han adquirido los servicios de SpaceX para el gobierno estadounidense, y en particular para sus fuerzas armadas. Cualquier interrupción en este frente podría tener un impacto particularmente desproporcionado en Golden Dome, que ya cuenta con un ambicioso programa para desplegar al menos una capacidad inicial. Esto se suma a la posibilidad de un enfrentamiento con China en el horizonte. Las capacidades espaciales y el acceso a la órbita serían cruciales para disuadir tal resultado, así como para tener éxito en caso de conflicto. Rusia también está invirtiendo en armas antiespaciales exóticas y representa una amenaza creciente para el flanco oriental de la OTAN. Por lo tanto, el momento de una posible interrupción importante con el principal proveedor de acceso espacial del gobierno estadounidense es extremadamente problemático.

En general, en un nivel puramente pragmático, cancelar los acuerdos existentes con la empresa y/o bloquear los futuros podría tener amplios impactos a corto y largo plazo sobre la capacidad de las fuerzas armadas de Estados Unidos de enviar cargas útiles al espacio, así como de utilizar ese dominio cada vez más crítico para detectar, comunicarse y más.



jueves, 5 de junio de 2025

De Neuquén al espacio: el PehuenSat 3 ya tiene fecha de lanzamiento y hay interés internacional

De Neuquén al espacio: el PehuenSat 3 ya tiene fecha de lanzamiento y hay interés internacional
La Universidad del Comahue es una de las cuatro casas de estudios de Argentina en construir tecnología espacial y es la única que logró orbitar. El lanzamiento cuesta 60.000 dólares. Buscan financiamiento privado y ya hay propuestas de Rusia, Alemania y España.
Por Rosana Rins


El PehuenSat 3 es el segundo satélite diseñado y construido por una universidad pública nacional. Foto: Matías Subat

En años en los que las universidades públicas nacionales vienen funcionando con un presupuesto prorrogado desde 2023 y existe desde el gobierno nacional un feroz recorte en el área de ciencia y tecnología, la Universidad Nacional del Comahue sigue dando pelea.

El equipo de estudiantes y docentes de la facultad de Ingeniería de la UNCo, anunció que el PehuenSat 3, el segundo satélite diseñado y construido por una universidad pública de Argentina, será lanzado el próximo año.

Según datos oficiales, la UNCo se ubica dentro de las cuatro universidades nacionales públicas del total de 66 que existen en el país, en diseñar satélites y es la única que logró con éxito enviar uno al espacio. Las universidades de Córdoba, Mendoza y la de San Martín encararon y trabajan en la actualidad en proyectos similares, pero ninguno fue lanzado al espacio hasta ahora.

Desde la UNCo el historial comienza con el PehuenSat 1 que orbitó desde 2007, durante 16 años recolectando datos con fines educativos.

Luego vino un segundo proyecto, el PehuenSat 2, que quedó a medio camino por falta de financiamiento, en 2017. Lejos de bajar la guardia, se potenció esa idea trunca, se la mejoró y el equipo de Ingeniería comenzó a armar el PehuenSat 3.

Es un picosatélite de 10 centímetros (tamaño similar a un cubo Rubik) que permitirá obtener datos sobre temperaturas, calidad del agua, aire y suelo, intensidad del tránsito y condiciones geológicas de todo el planeta. Su particularidad es que no necesitará de conexión a internet para poder transmitir en tiempo real la información recolectada.

El ensamble del nuevo satélite está en proceso. Las piezas que fueron diseñadas y elaboradas por diferentes grupos, están a punto de ser ensambladas. A fin de año se realizará una prueba de lanzamiento en un globo “que permite que llegue a condiciones de microgravedad entre 20 y 25 kilómetros de altura y recorrer entre 200 y 300 kilómetros hasta que se lo recupere, cuando caiga, en algún lugar de la Patagonia”, explicó Marcelo Araoz, director del proyecto, ingeniero electrónico y magister.

Con esa prueba ya estará listo para ser enviado al espacio. Pero… Hay que salir a buscar fondos para financiar la logística del lanzamiento.

“En el mientras tanto no nos quedamos quietos. Estamos buscando financiamiento y ya recibimos varias propuestas”, dijo el docente de la UNCo.

El costo del último paso para llegar “al infinito y más allá”, es de 60.000 dólares. “Es mucho para una facultad o universidad pero no es tanto para un grupo empresarial que lo puede bancar”, consideró Araoz.


Es un picosatélite de 10 centímetros, del tamaño similar a un cubo Rubik. Foto: Matías Subat

El PehuenSat 3 está siendo analizado por dos empresas de España, una de Alemania y una de Rusia, que enviaron su propuesta para encarar el proyecto y poner a disposición los fondos necesarios. “También están en análisis dos firmas de Buenos Aires y salimos a rastrear algunas de China. Por el lado norteamericano tenemos algunas propuestas pero aún no nos enviaron el presupuesto”, agregó.

El lanzamiento de este tipo de satélites se realiza mediante cohetes y el lugar más recomendado para su exitoso despegue es Las Guayanas, “porque más cerca del Ecuador asegura mejores condiciones en todo sentido”.

“Una de las mejores propuestas que recibimos vino de una empresa de Galicia porque ya conocemos cuáles son sus exigencias y nosotros cumplimos con todos los requisitos que solicitan. Estamos en ese proceso”, aseguró el director del proyecto.

Ante la pregunta de por qué se apunta a las empresas privadas y no a los Estados, el ingeniero fue contundente.

“Queremos que las empresas empiecen a apostar un poco también, sino es solo el mundo de los gobiernos que dan un aporte y eso esta muy bien pero cuando vamos a un congreso y se empieza a pensar en tecnología al futuro, no vendría mal un aporte del mundo empresario para el desarrollo de estos proyectos y por el futuro de estos chicos”, reflexionó el docente pensando en los 18 estudiantes que están trabajando en el PehuenSat.

La facultad de Ingeniería cuenta en su “currículum” científico con varios proyectos previos a los satélites. En 2001 lanzaron un paquete experimental dentro de un transbordador espacial. Años después, subieron varias experiencias en cohetes de la Fuerza Aérea Argentina, desde Chamical, provincia de La Rioja y le siguieron otros experimentos estratoféricos en globo que recorrieron de 20 a 30 kilómetros. Todos con resultados alentadores.

Se trata de ciencia, de educación y de futuro

El equipo que está a cargo del diseño, armado y futuro lanzamiento del PehuenSat 3 está integrado por 18 estudiantes y 40 docentes de la facultad de Ingeniería. “Somos una pyme dentro de un grupo de investigación”, aseguró el director del proyecto, Marcelo Araoz.

Y esto tiene mucho que ver con la visión que tienen estos profesionales sobre el valor de la universidad pública, aún cuando las finanzas están en rojo vivo.

Araoz reconoce el gran aporte que están haciendo a la ciencia y a la tecnología de Argentina con el lanzamiento de estos satélites, pero también mira hacia el interior de las aulas de la Universidad Nacional del Comahue.

“Estamos generando ciencia que es palpable y estamos generando estudiantes en el sentido de que pueden ser emprendedores en este mundo de la tecnología espacial. Hay algunos chicos que están viendo de abrirse en este campo y no salir a buscar un trabajo en una empresa que sea de otro. Ellos quieren ser sus propios dueños en un mundo donde hay tanto para hacer. Nosotros los alentamos a que empiecen a patentar sus ideas, a pensar en servicios que puedan brindar para otros. La ciencia no tiene límites”, aseguró el profesional.


El equipo de la UNCo pondrá en órbita el PehuenSat 3 en 2026. Foto: Matías Subat

Consultado sobre si sus estudiantes son conscientes de la magnitud de este proyecto, el docente explicó que en un principio no se daban cuenta porque cada uno trabajaba de manera individual en una parte del satélite, sin ver el trabajo del otro compañero. “Pero en un congreso que se realizó recientemente al que asistimos todos para mostrar el PehuenSat y vieron lo que estaban haciendo sus compañeros y vieron la devolución que nos dieron los integrantes del mundo de la tecnología espacial. Quedaron impactados y eso los motivó mucho porque empezaron a comprender que su trabajo se conecta con el otro y que eso tiene un fin”, comentó.

Y así los estudiantes tomaron dimensión que eso no era solo una parte más de una carrera, sino un trabajo que próximamente llegará al espacio. “Estamos contentos de ser parte de un proyecto de envergadura enorme, todo metido dentro de un cubo de 10 centímetros”, concluyó Araoz.

Al Congreso de la Nación para defender la universidad pública

Donde hay una necesidad hay una inquietud y derechos cercenados y también quienes pelean por cambiar eso. Y en eso está el Consejo Interuniversitario Nacional que nuclea a todas las casas de altos estudios públicas del país.

Hace unos días se presentó un proyecto de ley en el Congreso de la Nación para que las cosas cambien. Y no solo contempla la situación de los profesionales docentes (cuestión que no es menor) que están cobrando un sueldo más bajo al que percibían en 2002, sino que también apuntan a la calidad educativa.

«Una ampliación progresiva del presupuesto destinado a las universidades nacionales del 1% del PBI en 2026 al 1,5% en 2031, la creación de un fondo anual de 10.000.000.000 de pesos para promover carreras estratégicas para el desarrollo del país«, es uno de los puntos que se planteó.

Y no es cuestión menor el párrafo que dice: «Desarrollar y consolidar la función de la investigación en las universidades públicas nacionales».

Y para esto hacer falta financiamiento de un Estado nacional que «banque» y que debería sostener financieramente a las universidades públicas. Porque no se trata solo de emitir títulos, sino de darle la oportunidad a todos los estudiantes de tener una formación formal superior y apoyar a los que no tienen recursos pero sí mucho talento.